Esa misma tarde nos reunimos en el anexo para planificar como haríamos para lograr atraer al colombiano sin levantar sospechas de sus hombres ni de sus socios, que a fin de cuentas son nuestros conocidos y en alguna ocasión han negociado con mi organización; así como también ideamos un plan adicional que es el que le presentaré a Sandra para la aprobación de Mac.
Allí mismo Malcolm llamó a su contacto para que este ubicara los números del colombiano. En este punto debíamos ser muy cuidadosos de no dejar rastro que nos delatara.
—Debemos hacer todo de modo que no aparezca ninguno de nosotros involucrados —pienso en voz alta—, ¿podemos tener acceso a los socios directos del colombiano además de los rusos y el mexicano?
—Sí, solo que va a costar unos días, pues la cabeza del rastreo de est
