Llegó la hora del almuerzo, el cual constó de un asado. Los que se estaban encargados de asar la carne eran los hermanos Kai y Klay Clooney, y la que servía los platos era mi hermana, mientras los demás nos quedamos sentados a un lado de la cancha, en unas sillas. -¿Cómo va la universidad, Ryan? - le preguntó Fellaini al hijo de los mejores amigos de infancia de mi madre. -La ingeniería financiera es dura, hay mucha matemática, pero ahí vamos - respondió Ryan. -Tus padres me han contado que te ha ido bien con el equipo de fútbol de la universidad – dijo mi padre – he visto los videos que le envían a Melanie de tus partidos, juegas muy bien. -¿No te gustaría jugar profesionalmente? ¿En un club? - le preguntó Adam. -Bueno, es algo que he pensado a lo largo de estos años, pero creo que p