Hermoso Rojo

6: El novio perfecto

Mark

Aparco en frente de la mansión de Cindy y tremenda mansión que tiene. Es una mansión que tiene el doble de tamaño que la mía, con un enorme jardín lleno de rosales y una fuente posada en medio, tiene alrededor de dos pisos y su estilo es muy a lo gótico lo cual lo hace parecer muy elegante y glamurosa, cabe recalcar que muestra fincas con decoraciones de hierro y setos bien cuidados.

Sí, la mía se queda corta

Salgo del coche no sin antes sacar el ramo de flores que le compré antes de llegar. Toco el timbre que resuena por todo el lugar. Minutos más tarde Gloria la encargada de los deberes de la casa abre la puerta.

—Sr. Henderson—saluda sorprendida al verme—Llegó temprano, Cindy aún no está lista—sonrío.

—No te preocupes Gloria es parte de la sorpresa—le muestro el ramo de girasoles que sostengo en mi mano derecha.

—Oh sus favoritas—dice con los ojos de par en par—Pase, en un momento bajará la señorita, los patrones no están en casa así que siéntase cómodo, si quiere algo de beber o …—dice pero de inmediato la corto.

—Muchas gracias Gloria, pero prefiero no quitarle su valioso tiempo, yo espero en la sala—Gloria sólo asiente pidiendo permiso. Entro a la mansión y cierro la puerta detrás mío.

Sí, he estado muchas veces en ésta mansión, prácticamente conozco todo el lugar, pero eso Cindy no lo sabe…ella sólo sabe que conozco su habitación, la sala y la cocina. Sí, bueno conozco casi toda la mansión y la razón tiene un nombre y un apellido y…una “hija”.

—¡Mark llegaste temprano!—anuncia Cindy bajando apresuradamente las escaleras.

Cindy es una buena chica, es demasiada atractiva, es la mejor de su clase, inclusive tiene grandes aspiraciones, sus padres quieren que tome las riendas de la empresa familiar, pero ella quiere empezar desde cero quiere hacer su propia empresa, está de aspirante en la empresa familiar, pero eso es nada más para que se dé una idea de cómo funciona este mundo de los negocios.

Le extiendo el ramo de girasoles.

—Sorpresa—sonrío y le tiendo el ramo a lo cual ella lo toma entre sus manos muy entusiasmada.

—Sabes…—dice analizando el ramo. De repente su cara torna un gesto serio. Yo escucho atentamente.—Eres el novio perfecto, Henderson—deja de analizar el ramo y me mira por el rabillo de su ojo.

—Lo soy—respondo un tanto orgulloso.

Me regala una sonrisa de boca cerrada. Niega con la cabeza

—Nada es perfecto Mark…—dice—Inclusive tú…intentas que esto parezca—nos señala—Perfecto y la verdad es de que no lo es, cada relación debe de tener sus altibajos, sus problemas ¿entiendes a qué punto quiero llegar?—arquea una ceja. Sus ojos me analizan con una determinada atención.

Frunzo el ceño.

—¿Quieres que tengamos peleas? ¿Qué nos peleemos?—pregunto algo confuso a la situación. Ella niega con la cabeza riéndose un poco de mi respuesta.

A corta la distancia que hay entre nosotros.

—Lo que quiero decir es…—musita para ambos—Que me digas tus problemas, lo que piensas, lo que sientes—posa la palma de su mano en mi pecho.—Quiero conocer al imperfecto de Mark Henderson, quiero que además de que me tomes como tu novia tómame como una amiga, quiero ser tu confidente Mark, la que siempre esté a tu lado en los buenos y malos momentos.

Inmediatamente mi cerebro prende sus alarmas. No entiendo…¿no es suficiente con lo que le otorgo? Esto ya no se trata de sólo sexo, citas y regalos…al menos no para ella. Inclusive creí que al haberme dicho que era el novio perfecto era un cumplido. Lo que me está pidiendo es algo que he evitado y precisamente traté …traté de no hacer ese tipo de cosas para que no cayera por el otro lado.

Al parecer esto se te está escapando de las manos

No

Mis opciones son limitadas no debo de cortar con ella o severas consecuencias pasarán. Sólo debo de seguirle la corriente e ignorar esto como si nunca hubiese pasado al menos por el momento.

Sonrío.

Quito su mano sobre mi pecho. —Lo que usted ordene—le beso gentilmente la mano.—Pero ya luego te contaré mis problemas con el negocio de mi padre ahora hay que concentrarnos en que no nos cancelen la cita…—le echo un vistazo a mi reloj—porque se nos hace tarde.

***

Aparco el coche y de inmediato me pongo en marcha para entrar a la casa.

Apunto de abrir la puerta ésta se abre por sí sola dejando ver a una niña de diez años.

Sí, mi molesta hermana.

—¿Y a ti quién te invitó a mi casa?—frunzo el ceño.

Daisy sólo se dedica a ignorar mi comentario

—Llegaste temprano, ¿por qué?—se cruza de brazos. Gruño y hago que se haga a un lado. Entro a mi casa y lo primero que hago es servirme un buen trago de vodka. Daisy sólo se dedica a analizar mis movimientos. La miro.

—¿Quieres?—le muestro la botella de vodka a punto de negar la interrumpo—Bromeo tranquila, creo que aún tengo jugos en la cocina—bebo de mi trago—Claro, si es que Zac no se los ha acabado ya.

Daisy sólo se dedica a rodear sus azules ojos. Se cruza de brazos.

—No has respondido mi pregunta y no, no hay jugos Zac se los acabó todos—rio por mis adentros al escuchar eso. Ya me lo esperaba.

—¿Qué quieres qué te diga? Tuve una cita con Cindy terminamos temprano y quise volver a casa—dejo a un lado mi trago para ahora dedicarme a echarme sobre el sofá—Sin mencionar que estoy cansado—miro a Daisy por el rabillo de mi ojo—¿Satisfecha mamá?

Daisy afloja sus brazos y se sienta en el sofá al lado mío.

—Mamá y papá estuvieron aquí para hablar contigo, pero como vieron que no estabas y supusieron que estabas con Cindy me dejaron a mí para pasar el mensaje

Arqueo una ceja.

—¿No pudieron enviar un mensaje en vez de enviar a un animal mensajero?— Daisy me arroja la pequeña almohada que se encontraba del lado suyo—Bueno ya lo siento—alzo las manos en son de paz.

—No lo sé tonto sólo sé que ellos tenían cosas que hacer y esto realmente urge—trata de explicar. Yo sigo escuchando—Habrá un tipo baile o “gala” como lo quieras llamar que nuestro padre ha organizado…—arqueo una ceja—es cómo para festejar la “colaboración” con los nuevos socios de papá.

—Ajá ¿Y?—rueda los ojos.

—Pues que tenemos que ir tonto ¿qué no tienes las suficientes neuronas como para entender? A veces pienso que no eres mi hermano por ser tan tonto—dice con mucha desesperación.

—No lo sé pregúntale a mamá porque yo también a veces pienso que no eres mi hermana—frunce el ceño—Sólo mírame—me señalo—y mírate—la señalo—definitivamente belleza no heredaste.

Daisy dice algo que no logro escuchar, después de eso se levanta del sofá no sin antes de terminar de pasar el mensaje.

—Papá quiere que vayas y lleves a Cindy como tu acompañante, será dentro de una semana así que vete preparando mi querido hermano.

—Mensaje recibido—alzo el pulgar—Supongo que ahora tienes que pasar la noche aquí ¿no?—Daisy asiente—Sabes dónde es tu lugar—Daisy gruñe.

—Te odio—y con eso se va a su respectivo cuarto.

—Eso es recíproco—le guiño el ojo.

Después de estar por un largo rato tomando un descanso en la sala veo la hora, viendo que ya es tarde subo a mi cuarto, me quito la camisa que llevo puesta y sólo me quedo con un chándal. Me recuesto en mi cama boca arriba y antes de dormir me pongo a checar mi celular. Minutos después ,dispuesto a ya dormirme un mensaje hace que mi celular vibre.

Zac: Tengo un problema…uno muy gordo

Yo: Que tienes una gran adicción a los jugos? Sí ya me di cuenta ;)

Zac: -_- no es gracioso

Yo: sí lo es :)

Zac: Bueno no tiene nada que ver con mi adicción a los jugos si?

Yo: ¿?

Impaciente espero la respuesta de Zac lo cual se tarda unos minutos en escribir

Zac: ¿Alguna vez has tenido un amor no correspondido?