Sinfonía de amor y desamor

~ Capítulo 08: Las Consecuencias a Pagar ~

Loving you was sunshine,

but then it poured.

And I lost so much more than my senses

Because loving you had consequences

* *

(Consequences – Camila Cabello)

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El resto de la tarde no pude tener otra conversación a solas con Lilieth, pero tampoco importó mucho, pude notar en su mirada que ella sabía que eventualmente la tendríamos.

Cuando llegó la noche y acabó la cena, papá y Logan ni se levantaron de la mesa, solo se enfrascaron en alguna disputa sobre fútbol que no fue suficiente para llamar mi atención, así que seguí a mamá a la cocina para limpiar los platos con ella.

—Has estado muy callado hoy. —comentó un rato después.

—¿Sí? No lo había notado. —pero la verdad tampoco me extrañaba, había estado muy preocupado por el asunto con Lilieth como para prestar atención a otra cosa.

—Sí, por un momento creí que habías discutido con Lilieth, ella se veía un poco desconectada también.

—¿Qué? ¿De qué hablas? Ni al caso… ¿Por qué discutiría con ella?

—Eso mismo fue lo que pensé luego, pero aun así… Sigo sin entender qué pasa. —hizo un puchero mientras cerraba por última vez la puerta del lavavajillas.

Suspiré mientras la veía ir al refrigerador, sacar la jarra de jugo y servir dos vasos, sabía lo que quería hacer, y también sabía que yo no podía negarme.

—De acuerdo… Ella me estuvo contando algunas cosas sobre su… familia, algunas de ellas un tanto tristes y sorprendentes para mí, pero me pidió que no se lo contara a Logan —hice una pausa, pero ella no pareció inmutarse. —. Me hizo prometérselo, y pasé toda la tarde intentando adivinar la razón, porque si le voy a guardar un secreto a mi hermano… —«Otro más», pensé sintiéndome un miserable. —Me gustaría saber por qué.

—Entiendo, ¿pero qué pasa con su familia? —preguntó dándole un sorbo al jugo, pero yo chasqueé la lengua con pesar.

Sí, mamá solía ser mi confidente, más por coacción que por voluntad propia, pero lo era… Y sin embargo había cosas que no podía contarle, con esta ya eran dos. Ella sonrió y me señaló.

—Por eso te lo contó a ti… Supongo que sabe que nadie más lo sabrá jamás si solo tus oídos la oyeron, sabes que a Logan no se le dan bien los secretos.

Torcí el gesto al oír eso, ya que era cierto solo en parte; Logan era un genio mintiendo… si consideraba que valía la pena hacerlo; como prueba de ello estaba la guerra de casi seis meses donde hasta lo mandaron a terapia porque mamá creía que tenía un cuadro bulímico, ya que empezó a tomar más comida de la usual de la despensa pero no aumentaba de peso… Eso estaba enloqueciendo a mamá, hasta que un día solo “se curó” y ella dio gracias a Dios y pasó página.

Lo que ella jamás supo fue que durante todo ese tiempo Logan había estado tomando toda esa comida extra para Luke. Él se dio cuenta que nuestro amigo llevaba muy poco a la escuela, así que se había dado la tarea de alimentarlo correctamente por su cuenta, le había hecho jurar a Luke que no diría nada, por eso ni yo lo sabía.

Sin embargo un día lo descubrí metiendo las cosas en el morral de Luke y tuvo que confesármelo, desde entonces nos dividimos la labor y eso coincidió con la milagrosa recuperación de mi hermano, que hasta el sol de hoy no se lo había confesado a nadie, aunque sabía que más por Luke que por él mismo.

—Sí, supongo que es por eso. —fue todo lo que respondí.

—¡Ahora vengo, ma! —exclamó Lauren antes que ella pudiera decir nada.

Mi hermana pasó cruzando la cocina como un rayo, dirigiéndose hacia la puerta trasera… hacia el jardín.

—¡Lauren! —exclamé enfadándome de pronto.

—Déjala. —intervino mamá en tono de advertencia, entorné los ojos y me puse de pie.

—Vale, iré a ducharme, pero en cuanto termine iré a buscarla. —dije antes de salir de la cocina y subir las escaleras.

Lauren hacía lo mismo todas las noches… Luke no había ni siquiera pisado bien el interior de la casa de huéspedes cuando ya la tenía ahí, a todos nos quedaba claro que a él no le incomodaba, pero a mí el asunto me irritaba sobremanera, pero por lo visto era el único, porque incluso Logan me pedía que los dejara en paz.

Subí hasta mi habitación a quitarme la ropa, me dirigí al baño y procuré olvidarme del asunto, en cambio me concentré en Lilieth, su cumpleaños sería en unos días y de pronto sentí que ya no podía regalarle aquel tonto suéter que pretendía comprarle, en un principio me dije que pensármelo demasiado no tenía sentido, que ella estaría más interesada en el regalo de Logan; pero ahora, luego de esa conversación… Sentía que nuestra relación, nuestra amistad, había alcanzado otro nivel, y en mi interior necesitaba darle algo significativo, algo que la hiciera feliz cuando se sintiera así de triste.

Eso ocupaba mi mente cuando salí del baño y me vestía, pero no terminaba de dar con una idea realmente buena, lo cual me decía que me esperaba una noche larga, porque lo lograría dormir hasta conseguirlo. Cuando salí de mi habitación y atravesaba el pasillo vi por la ventanilla que había cerca de las escaleras que Luke y Lauren estaban acostados en el césped del jardín… Viendo las estrellas.

Puse los ojos en blanco y me masajeé el puente de la nariz mientras me apoyaba del barandal, meditando si ir de una vez o esperar un poco, pero la molestia regresó. No entendía por qué se hacían eso, no entendía por qué los demás lo permitían… Yo parecía ser el único que entendía que eso terminaría mal.

Lauren estaba enamorada de Luke… Luke estaba enamorado de Lauren, pero él jamás haría algo al respecto… Estaba demasiado roto para hacerlo, y eso terminaría hiriendo a ambos. Querían engañarse fingiendo una amistad hermosa, pero... Las consecuencias iban a ser catastróficas.

Yo entendía que mi hermana no lo viera, ella solo estaba disfrutando de ese sentimiento tan fuerte y salvaje que tenía hacia él, pero me enfurecía que los demás tampoco, y a veces quería enfadarme con él, pero… Sabía que no era su culpa, y entonces me gustaba pensar que algún día estaría bien, lo suficiente para eso, pero luego pensaba… ¿Y si tardaba demasiado? Lo quería, pero… ¿Acaso tenía que dejar que mi hermana sufriera todo su proceso de sanación?

La frustración me invadía en momentos así, los veía y se me hacía una situación demasiado masoquista, pero entonces… Mientras aún me debatía sobre qué hacer, pensé que el amor era algo realmente complicado de entender para cualquier otro que no lo esté sintiendo, quizás ese pensamiento popular de que el corazón siempre le gana la batalla al cerebro era cierto, porque yo estaba ahí viéndolos desde la distancia, señalándolos por esa no-relación poco sana que tenían, mientras yo meditaba sobre qué regalarle a la novia de mi hermano… Porque estaba enamorado de ella, ciertamente yo también terminaría pagando alguna consecuencia.

Yo era el menos indicado en esa familia para juzgarlos, y perdía un poco más de ventaja sobre cualquier otro cada que me alegraba de tener algún momento furtivo con ella, como el de hoy; cada que veía repetidamente la puerta de la cafetería esperando el momento de verla entrar… No, yo ciertamente no podía juzgarlos.

Entonces, en medio de mi debate, vi que Lauren se incorporaba y se sentaba con las piernas cruzadas, sonriendo con ilusión, y cuando vi que la boca de Luke se movía sin pausar, comprendí que estaba cantando, estaba cantando para ella.

La idea cruzó mi cabeza a la velocidad de la luz, como un cometa atravesando el cielo de mis ideas e iluminándolo todo, ya sabía qué regalarle a Lilieth, y como si de una señal del destino se tratara… Escuché sonar mi teléfono, me acerqué hacia la habitación y leí su mensaje de texto:

“¿Podrías guardarme el secreto?”

Sonreí mientras escribía mi respuesta:

“Eso depende de ti… ¿Podrías mandarme la lista de reproducción de Valerie? Yo NECESITO oírla.”

Esperé ansioso su respuesta, esperando que me dijera que sí, porque ya mi mente estaba trazando el plan, el plan para darle el mejor regalo de cumpleaños.

***

Eso ocupó gran parte de mi mente el domingo, pero también había otra cosa que debía cubrir con premura, y era el asunto de las solicitudes para las universidades… Debíamos tomar una decisión pronto.

—Lo que digo es que… Estoy orgulloso de mi papá, pero yo no quiero ser contratista, Logan no quiere ser arquitecto y Luke sé que tú no quieres ser mecánico… —dije mirando a mi hermano y a mi mejor amigo, que escuchaban con atención, aunque el primero con más ánimos que el segundo.

—No, ciertamente no quiero ser mecánico, Liam; pero… ¿Sabes lo difícil que es…?

—¿La industria de la música? Sí, lo sé. Por eso digo que nos enfoquemos y eduquemos al respecto, no vamos a ir por ahí tocando guitarra, esperando que alguien se dé cuenta que somos talentosos y nos saque en televisión solo porque somos guapos, digo que nos preparemos, ¿de acuerdo? Podemos estudiar composición, tecnología del sonido, producción musical… Podemos licenciarnos en muchas cosas que nos ayudaría a conseguir trabajo en caso de que no funcione lo de cantar. Solo… Vamos a intentarlo, ¿sí?

Esperé paciente la respuesta de ambos, hasta que Logan dio una palmada al aire y sonrió.

—Pues yo digo que sí, ¡me apunto! Hagámoslo.

—Bien, pero somos una banda… Somos un trípode. —respondí y ambos miramos hacia Luke, que era realmente el hueso duro de roer, el que más recelo tenía.

Nuestro amigo movió su cabeza de un lado a otro, tronando su cuello en el proceso, pero seguimos esperando, sabíamos que era un tema complejo para él.

Conversábamos sobre tomar la decisión de solicitar plazas en las mismas universidades, pero la renuencia de Luke se debía a que, aunque pretendíamos enviar solicitudes a la Real Academia de Música, y a la Universidad de Limerick ahí en Irlanda, esas eran solo las opciones secundarias… Nuestro plan A, e incluso el B, eran Londres y Leed, y ahí era donde nuestro amigo veía las complicaciones.

—Supongamos por un momento que decidimos ir a Londres… Dije supongamos —repitió en tono de advertencia cuando Logan sonrió victorioso. —. De ser así… ¿Cómo creen que podría costear eso? He estado ahorrando, sí… Pero dudo que me acerque siquiera a la mitad de lo que cuesta un año… Y son cuatro.

—Sabíamos que dirías eso, así que estuvimos investigando… y…. Conseguimos requisitos para las becas. —dije sacando la carpeta que había guardado en el estuche de mi guitarra.

Luke tomó la carpeta y analizó el contenido mientras mi hermano y yo lo mirábamos ansiosos. Luego de hablarlo un par de horas habíamos descartado la opción del BRIT School para enfocarnos en una carrera completa, y consideramos que las licenciaturas que ofrecía la Royal Holloway, se adecuaban bastante a nuestras aspiraciones futuras.

De hacerlo… Tendríamos que mudarnos a Londres y vivir ahí durante los cuatro años. Logan y yo no teníamos mayores problemas con eso puesto que papá y mamá tenían los medios para costear las matrículas, pero sabíamos que Luke necesitaría ayuda y también sabíamos que no aceptaría dinero por parte de nosotros, así que la beca… Que aceptara solicitarla, era nuestra mejor opción.

—¿Solicitar una beca? —dijo lentamente, aun leyendo los papeles. —¿Y si no me aceptan?

—¿Quieres parar ya con esa actitud de mierda? —exclamó Logan medio en broma, medio enfadado.

—Te aceptaran. —me limité a responder yo.

—¿Cómo estás tan seguro? —respiré profundo y alcé una mano para calmar a Logan cuando lo vi poner los ojos en blanco.

—Porque aunque tú no… Nosotros sí somos capaces de reconocer tu talento, serían unos idiotas si no te aceptan… Y no tienen fama de ser idiotas en esa universidad.

—Solo quiero que estén preparados para el fracaso, ¿de acuerdo?

—¿Estás tú preparado para el éxito? —pregunté en respuesta mientras alzaba una ceja. Luke alzó las manos en gesto de rendición y entonces fue finalmente momento para celebrar. —. ¿La decisión está tomada entonces?

—Sí, solo queda el detalle de… Ya sabes… La firma. —dijo Logan con un poco de nervios, y yo hice una mueca al comprender a qué se refería.

—¿Qué firma? —Luke frunció el ceño.

—Pues… Eres menor de edad, y para optar por la beca tus padres deben firmar junto contigo la solicitud, así que…

—Mi papá debe firmar esto. —concluyó él a mitad de una respiración larga y pesada.

Yo asentí, deseando poder hacer algo para evitarle todo eso, pero no podía.

—El realidad tu tutor legal debe hacerlo. —ambos nos giramos al escuchar el tono lúgubre de Logan, y entonces me sentí peor.

El tema no era sencillo para nadie, pero Logan se llevaba una tajada de resentimiento tan grande como la de Luke.

—Exacto, si se concretara eso que papá te propuso y él se convirtiera en tu tutor… Entonces él podría…

—No —me calló Luke sin mirarme, su mirada estaba fija en los papeles en sus manos. —. ¿Dicen que solo necesito su firma aquí? No debería ser tan difícil… Me lo debe, iré a verlo y yo…

—Iré contigo. —manifestó mi hermano con determinación.

—No… Iré solo —Luke alzó una mano cuando le vio intenciones de protestar a mi hermano. —. Dije que iré solo, voy a estar bien. No creo poder mañana, pero… Esta semana iré, yo… Hablaré con él y haré que firme los papeles, y luego…

—Y luego regresas a casa. —Logan seguía incómodo con la situación, y una vez más lamenté no haber estado con él aquel fatídico día, en sus ojos aún se podía ver el miedo y la desolación que sintió entonces, y como cada vez que el tema salía a relucir… Lamenté que llevara él solo la carga de ese recuerdo.

—Y luego volveré a casa. —aseguró Luke mirándolo fijamente.

Me sentí incómodo y al mismo tiempo triste por ellos, porque si mi hermano llevaba el dolor de ese día… Mi amigo sin duda llevaba la culpa.

—De acuerdo, entonces… ¡Está todo dicho! —exclamé sonriente, tratando de aliviar la tensión que se había creado.

—Está todo dicho —dijo Luke acercándose a mí y estirando su puño.

—¡Prepárate, Londres… The Ghost Engine está en camino! —exclamó Logan sonriendo otra vez.

—En serio debemos cambiarnos ese nombre. —refunfuñó Luke.

—¡Calla! Ese es el nombre del éxito. —siguió mi hermano mientras nos abrazaba a ambos.

Y no pudimos hacer más que reír, esperanzados por el camino que parecía abrirse ante nosotros; y deseé, igual que hacía siempre que hablábamos de la banda, que nunca nos faltara fuerza y determinación para alcanzar el éxito.