Sinfonía de amor y desamor

~ Capítulo 06: Cruzando Los Límites ~

As sure as night is dark and day is light

I keep you on my mind both day and night.

* *

(I walk the line – Johnny Cash)

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Logan y yo salimos del aula un poco después de Luke, y nos dirigimos al comedor, era hora del almuerzo. Al llegar vimos que ya Lilieth se encontraba en nuestra mesa con Lauren, esas dos habían hecho buenas migas desde el comienzo y mientras hacíamos la fila para llenar nuestras bandejas meditaba en cómo siempre me generaba una sensación agridulce verlas llevarse tan bien, lo mismo ocurría cuando la veía hablar con mi madre; era lindo saber que alguien a quien le tienes tanto cariño se lleva bien con tu familia, pero luego llegaba a ese detalle de que no era yo el nexo entre ambas partes.

—Hola, pequeñas… ¿Me extrañaron? —preguntó Logan cuando llegamos a la mesa, y apenas se había sentado cuando ya estaba besando la frente de Lilieth.

—Muchísimo, la clase de historia estuvo aburridísima. —respondió ella mientras apoyaba su cabeza en el hombro de Logan, procuré ignorarlos mientras saludaba a mi hermana.

—Pues nuestra hora tampoco fue muy buena, lo único que nos salvó fue la señorita Boyle con lo de las admisiones para la universidad. —siguió Logan.

—Ah, sí… También pasó por mi aula. Déjame ver tus opciones. —Lilieth esperó ansiosa mientras Logan sacaba la carpeta de su morral.

—¿Y Luke? –preguntó Lauren, frunciendo el ceño.

«Huyendo de ti, seguramente»

—No lo sé, salió un poco antes que nosotros, quizás tenía cosas que hacer antes. —respondí tajante, notando que Logan me lanzó una mirada furtiva para luego desviar su atención nuevamente a Lilieth, de seguro feliz de no tener que rendirle parte a Lauren.

—Pero… ¿Sí vendrá a almorzar? —me encogí de hombro como toda respuesta mientras pensaba en cómo haría mi amigo para escapar del interrogatorio de la chica, porque todos sabíamos que ella exigiría ver esa lista, si había alguien más preocupada por el futuro de Luke que nosotros, o incluso él mismo… Era Lauren.

—¡Woah! Puros conservatorios de música, quién lo hubiese pensado —le escuché decir a Lilieth con sarcasmo. —. Espera… ¿BRIT School? Eso es genial, Logan. Vas a solicitar una plaza, ¿cierto?

—Ehm… Aún no hemos tomado ninguna decisión, pero… Supongo que sí, sería tonto no hacerlo. —Logan me miró como esperando confirmación, y eso llamó la atención de Lilieth.

—¿A ti también te la recomendaron? —preguntó con un brillo entusiasta en sus ojos, como si realmente se alegrara por mí.

—Sí, de hecho nos dieron la misma lista; ya sabes… Un dos por uno.

—Bien hecho, Callaghan… Son unos chicos talentosos. —agregó en tono de apreciación.

—¿Sabes si a Luke también se la dieron? —preguntó Lauren nuevamente haciendo que Logan torciera el gesto, sabía tan bien como yo que ya se estaba acercando el punto en el que tendríamos que empezar a mentirle.

—Sí, creo que sí, la verdad no dejó que viéramos nada, ya te dije que se fue rápido. —contesté encogiéndome de hombros, sabiendo que la mejor forma de hacerle creer a alguien tu mentira… Es no dar muchos detalles. Ella hizo una especie de puchero pero asintió.

—¿Y qué me dices tú? ¿Dónde está tu carpeta? —preguntó Logan en un intento de desviar la conversación.

—Ehm… Ahí está —señaló hacia su morral en el suelo para que la sacara él mismo, mientras ella seguía comiendo. Logan tomó la carpeta antes de hacer un par de gestos de asentimiento.

—Nada mal, son buenas universidades, ¿no? —ella asintió mientras masticaba su comida, pero no pude controlar la curiosidad y le pedí la carpeta a mi hermano.

Leí las opciones y Logan tenía razón, eran muy buenas universidades, incluso en sus opciones destacadas estaban la ICL y Cambridge, eso era excelente… Y prestigioso; pero lo que realmente me impresionaba es que todas esas opciones se relacionaban a ciencias empresariales… Ninguna a fotografía o comunicación audiovisual, lo cual me resultaba sumamente extraño, considerando que hablábamos de la chica que prefería llevar una cámara en su cartera que una botella de agua.

—Solo opciones de administración y negocios. —evidencié lo obvio, ella me miró confundida.

—Sí, aún no estoy segura pero es lo que pretendo estudiar.

—¿Y qué pasa con la fotografía? —pregunté haciéndola alzar una ceja.

—¿Qué pasa con eso?

—¿Acaso no vas a intentar titularte en eso? Aprenderías muchas cosas y podrías…

–No, la fotografía es solo un hobby… No puedo vivir de eso.

—¿Pero qué hablas? ¡Claro que puedes! —dijo Lauren.

—Sí, nena… De hecho sí puedes. —agregó Logan un tanto confundido.

—¿Y por qué mientes? Todo el mundo sabe que amas la fotografía, y también sabemos que eres muy buena… ¿Por qué desperdiciar ese talento?

—Lo mismo digo, creo que deberías intentarlo. —me apoyó Logan.

—Y yo creo que deberían ocuparse de sus asuntos y entender que no voy a estudiar fotografía, ¿vale? —respondió en tono cortante, dejándonos a todos mudos.

—Oye, nena… ¿Qué pasa? —Logan tocó su hombro para calmar su tensión, pero la chica se sacudió su mano.

—Nada, me molesta que critiquen mis decisiones.

—Nosotros no estamos…

—¡Basta, Liam! Ya dije que no. —Lilieth se levantó de su silla y se alejó de la mesa a zancadas, y de un segundo a otro estaba saliendo del comedor.

Mis hermanos y yo nos miramos confundidos, sin tener la menor idea de qué pasaba, y así estábamos cuando Luke llegó a la mesa tres segundos después.

—¿Por qué tu novia iba echando fuego? —preguntó mientras se sentaba.

—No lo sé, pero iré a averiguarlo. —respondió en medio de un suspiro; se levantó y se alejó igual que ella.

Yo ignoraba el saludo y la conversación entre Luke y Lauren mientras tamborileaba sobre la mesa con los dedos, tratando de adivinar el motivo de su reacción, pero nada se me ocurría, ninguno de nosotros había hecho algo malo, entonces… ¿Por qué su molestia?

—¿Puedes enseñarme tu lista? —preguntó Lauren llamando mi atención, le hablaba a nuestro amigo, por supuesto; y ver cómo él le entregaba la carpeta sin titubear me intrigó.

Vi a mi hermana leer y sonreír con entusiasmo.

—Esto es excelente, Luke… ¡Te felicito! Sé que brillarás sea donde sea que decidas estudiar. —le comentó mientras le devolvía la carpeta.

Que no dijera nada sobre Julliard me puso en alerta, estiré la mano y tomé la carpeta para echarle un ojo, sin pasar por alto la tensión de Luke mientras la leía, pero no pude hacer más que admirar la pericia y astucia de mi amigo. La mención al conservatorio de Nueva York ya no estaba, borrada como por arte de magia y comprendí que el chico tuvo que haber salido corriendo a sacarle una fotocopia a la hoja… Tapando con otra hoja en blanco la parte de esta donde aparecía dicho nombre, que para su fortuna estaba al final de la lista.

—Vaya, Luke… Te felicito. —dije entregándole la carpeta, mientras nos mirábamos fijamente, asumiendo que el énfasis puesto en la última frase le bastaría para entender por qué lo felicitaba realmente.

Él asintió y sonrió en medio de una mueca, lanzando la carpeta bajo su morral, para luego enfrascarse en alguna insulsa conversación con Lauren, de la cual preferí quedarme excluido; porque mi mente y mi atención seguían puestas en Lilieth y su rabieta de unos minutos atrás, pero si bien tenía que esperar a que Logan me comentara lo que habló con ella, sabía que algo no olía bien en todo eso, y sospechaba que me tocaría a mí mismo indagar al respecto.

***

La curiosidad siguió carcomiéndome los días que siguieron, mucho más luego de que Logan llegara esa misma noche con la única explicación de que, según lo que ella le contó, la fotografía era solo un pasatiempo y ella en realidad quería dedicarse a la gestión empresarial. Aquello era una gran tontería, y me exasperó el hecho de que Logan se lo tomara tan a la ligera, porque o no lograba darse cuenta de que Lilieth le mentía, o de plano no le importaba lo suficiente.

Sin embargo procuré no enfrascarme demasiado en ese pensamiento, y en cambio traté de descubrir qué era lo que ocurría con ella. Tenía que estar mintiendo, lo sabía; la fotografía para Lilieth era lo que la música para mí, era lo suyo, y tenía que haber un motivo por el cual ella se negara a seguir su camino.

Hablar con ella me sirvió de poco, en mi intento de no confrontarla de manera directa, siempre buscaba sacarle alguna conversación que terminara llegando a ese punto, trataba de abordarlo desde el punto de a qué quería dedicarse en la vida, pero sus respuestas eran tajantes y meditadas de cabo a rabo, nunca pensé en darme por vencido, pero mis ideas estaban empezando a rayar en lo mediocre cuando por fin tuve una revelación.

El miércoles era el día en que su grupo de fotografía estaba realizando esa exposición sobre el amor de la que me había hablado; lo cual, igual que ocurría cuando el club de estilismo hacía sus prácticas públicas, llamó mucho la atención; con la salvedad de que esta vez nadie corría el riesgo de terminar con algún mal corte de cabello.

—¿Qué opinan? —preguntó Lilieth mientras los chicos y yo mirábamos su exposición. Ubicada bajo uno de los robles del patio trasero del colegio.

—Son muy buenas, creo que las mejores de acá —respondió Logan abrazándola, haciéndome apartar la mirada de inmediato y dar un paso para alejarme… Por acto reflejo.

—Yo creo que son un poco tristes. —agregó Luke pensativo.

—¿Tristes? ¿De qué hablas? Ambos están sonriendo. —argumentó mi hermano con el ceño fruncido.

—Sí, Luke… En realidad creo que transmiten un poco de esperanza, ¿no? —siguió ella, pero mi amigo se mantuvo en silencio, contemplando las imágenes frente a él.

Se trataba de una especie de collage que mostraba en varias escenas, la dinámica entre el Oficial Mason y Martha, mi compañera de trabajo. Lilieth le había tomado fotos durante varios días, traté de no pensar demasiado en el hecho de que quizás ese fue el motivo por el que asistía tanto a la cafetería… La pareja, no yo.

En las tomas se veía a los protagonistas sonriéndose mutuamente, y sí, entendía el punto de Lilieth, a simple vista lo que se apreciaba era la promesa del amor, un amor de esos donde ambos son felices; pero… mirando con un poco más de atención, se podía ver que no se tocaban nunca, y las miradas más soñadoras se daban en uno cuando el otro no estaba mirando; añoranza era el verdadero sentimiento que transmitía, eran decenas de fotos que mostraban a dos personas que quieren estar juntas y no lo están, y sí era bastante triste, justo como Luke decía.

Lilieth se distrajo cuando el profesor Meyer se detuvo frente a su exposición a evaluar su trabajo. Logan se mantuvo a su lado, pero Luke y yo nos apartamos un poco. Yo me dispuse simplemente a mirar a Lilieth, trataba de no hacerlo, pero a veces no podía evitarlo… Era demasiado hermosa como para resistirme tan siquiera el placer de mirarla. Ese día llevaba el cabello recogido en una trenza de lado, con el flequillo cubriéndole parte del rostro cuando el viento soplaba, mientras los rayos del sol hacían brillar sus mechones rebeldes.

—¿No vinieron sus padres? —preguntó Luke, y yo fruncí el ceño al darme cuenta que, en efecto, no estaban.

—Ehm… Por lo que veo no, supongo que estaban muy ocupados. —y aunque quería creer que ese era el verdadero motivo, de pronto se me hizo un tanto conveniente la excusa.

Miré a lo largo del gran círculo de sombra que daban los árboles en ese tramo del patio donde se había levantado la exhibición y vi que el resto de los chicos, tenían aunque sea a uno de sus padres presentes. Aquella era una evaluación clave y especial en esa clase y era entendible que pidieran su asistencia, ¿por qué entonces no estaban los suyos?

Sabía que su papá tenía obligaciones, pero su mamá no… ¿Por qué no asistió ella? Minerva Thatcher era una mujer peculiar, recordé aquella única vez que fui a su casa… Mi primera impresión sobre ella fue que parecía la viva imagen de lo que llamaban una esposa trofeo, una mujer hermosa que destilaba estilo y elegancia, de modales impecables y que hablaba como una aristócrata, y muy religiosa, según me había dicho la misma Lilieth una vez, y supuse que aquello venía de maravilla cuando el señor Thatcher tenía algún evento importante, pero también noté que la mujer no parecía ser muy unida con su hija… y viceversa, de hecho, parecía que en esa familia solo compartían la casa y el apellido.

Pese a que crucé un par de palabras con Luke, en el tiempo que restó de la exposición y me dediqué a pensar en ese hecho, aunque no entendía la conexión que podía haber entre lo de no querer estudiar fotografía y la ausencia de sus padres en ese evento… Sabía que había algo, las alarmas sonaban en mi cabeza, pero no terminaba de encajar las piezas.

Pasada la hora los chicos y yo nos fuimos, pero yo me las apañé para regresar al final de la jornada, sabía que Logan tenía que ir con Lauren al centro de voluntarios, y que Luke debía ir a trabajar; y también sabía que no era prudente y que moralmente hablando no era correcto que yo me aprovechara de esos vacíos, pero no podía evitarlo, mis ganas de saber más sobre ella, y en especial de estar con ella, me impedían ver con claridad la diferencia entre lo bueno y lo malo, entre lo correcto y lo inapropiado, la línea que separaba una cosa de la otra no era clara, y yo la cruzaba sin meditar demasiado al respecto.

Cuando llegué al pasillo donde sabía que estaría, la encontré abriendo su casillero, y como si me lanzara otra miga de pan para no perder el camino, la vi sacar su cámara del morral y vi sus intenciones de guardarla en el locker.

—¿Por qué no te la llevas? —al oírme Lilieth se sobresaltó y dejó caer el morral… Y la cámara.

—¡Demonios, Liam! ¡Mira lo que me hiciste hacer! —levantó la cámara y vi con horror que la lente se había desprendido, ella chasqueó la lengua con pesar y se dejó caer en el suelo, abatida por el asunto.

—Maldición… Lo siento, déjame intentar… —me agaché a su lado y traté de tomar la cámara, pero me lo impidió.

—No, déjalo… Se desprendió, debo mandar a repararlo.

—En serio lo siento, Lilieth. Te compraré otra, el fin de semana iré y…

—No quiero otra, debo mandar a reparar esta.

—Pero, yo puedo…

—Sé que puedes, pero yo quiero esta —su tono cortante dejó tenso el ambiente entre nosotros, así que solo pude asentir y dejarme caer a su lado… en silencio. —. Lo que ocurre es que esta cámara fue un regalo de alguien especial, ¿entiendes? No puedo solo desecharla y ya. —agregó después de un rato.

—Vale… Entiendo, en serio lo siento. —ella asintió. —¿Fue un regalo de tus padres?

—No, mis papás nunca me regalarían una cámara —rió con amargura.

—¿Por qué no?

—Porque… —guardó silencio un rato para luego suspirar —Es un tema complicado, solo no les gusta que haga esto.

—¿Por eso no quieres estudiar fotografía, cierto? —pregunté, aunque en el fondo sabía la respuesta.

—Por eso no puedo estudiar fotografía, entre muchas cosas… Papá cree que es un desperdicio de mi inteligencia… Me ahorraré lo demás.

—Pero… Es tu vida, me refiero a que… ¿Qué planeas? ¿Estudiar algo que odias solo para complacer tus padres?

—Quizás sea difícil para ti comprenderlo, Liam… Tus padres los apoyan en todo, pero… no todos corremos con esa suerte y algunos solo debemos seguir la corriente. —se encogió de hombros y torció la boca con resignación.

Comprendía lo que decía, era exactamente lo mismo que ocurría con Luke y su ridículo plan B de pedir una plaza para estudiar mecánica, creyendo que lo de la música no funcionaría; en su caso él tenía una situación complicada… Una vida complicada, y entendía sus motivos; entonces me pregunté si ella también tenía grilletes que le impedían dejar volar sus aspiraciones.

Nos quedamos un rato más sentados en el suelo del pasillo mientras ella sostenía entre manos aquella cámara rota, seguramente lamentándose todavía; pero yo sólo podía pensar en cómo ayudarla, en cómo sacarle aquel pensamiento de la cabeza, pero más importante aún… en conocer el motivo de esos pensamientos, por lo visto Lilieth también tenía una historia complicada y yo no descansaría hasta conocerla por completo.