—Bien, es hora de contar todo, hermana —dijo Draco desde su asiento frente a mí. Nos habíamos reunido en la sala de reuniones con mis compañeros, Draco, y su beta, Cass. Pensamos que sería mejor si todos escucharan y pudiéramos tomar la mejor decisión para seguir adelante. Me había llenado de donas, café y esperaba tener suficiente valentía. —Bien, sé que hoy compartiré esos secretos, pero… —Respiré profundamente—. Es difícil compartir cuando se ha demostrado que, si lo hago, salgo lastimada o muero. Mi ansiedad está en su punto más alto y... solo... Leo se levantó y salió por la puerta. Ni siquiera miró hacia atrás. Miré a Lucas preguntando qué estaba pasando. ¿Dije algo incorrecto? —No eres tú, cariño. Volverá enseguida —dijo Lucas, lo que me tranquilizó; desde su asiento junto