Nos separamos un poco, los dos sabíamos perfectamente lo que estábamos haciendo, y no queríamos avanzar (yo si lo deseaba, pero Jake siendo completamente heterosexual no), y nos quedamos mirando sin punto fijo al piso. -Volveré a la habitación – dijo secamente y salió casi que corriendo. -Ok – susurré y me volví a recostar en mi cama, con una sensación rara en mi estómago. Mierda…ahora Jake pensará que soy un pobre gay que gusta de él ¿¡Yo que culpa!? ¡Él fue el que se me acercó! Que mierda. Intenté seguir durmiendo pero me fue imposible, totalmente imposible, no era siquiera capaz de pegar un ojo. Así duré hasta que amaneció, y escuché ruidos en la cocina. Bajé y encontré a Jake ya vestido con su ropa del día anterior, haciendo un inútil intento por preparar panqueques. Me acerqué y t