—Pero ¿qué tiene eso de malo? Actúas como si lo que dijera fuera imposible de pasar, Chiara. Solo es una cama. Una cama para los dos. —¡No vamos a dormir en la misma habitación, no vamos a dormir en la misma cama!—Cuando Davide dijo las palabras, Chiara no tardó en ponerse como loca, él la miraba desde una esquina, observándola de brazos cruzados mientras ella discutía sola, porque él no había dicho ni media palabra luego de darle la información. Esperaba que se lo tomara de alguna manera, pero no de esa. ¿De qué forma podía acercarse a ella de manera rápida sin perder tiempo? Davide pasaba la mayor parte del tiempo fuera, entonces su único y más largo momento con su esposa tendría que ser en la cama, en las noches. Debía tenerla en la misma cama. No pretendía que ella fuera acepta