Capítulo 24. Esto nunca te lo voy a perdonar Piero Reyes. Con mi cuerpo aun temblando, y con las pocas fuerzas que me quedaban, no sé cómo lo hice, pero pase sobre los muebles y llegue a donde estaba la muy fresca, agradezco a la muchacha de la boutique que me aconsejo ponerme estás cómodas zapatillas de plataformas, y dejar ahí mi ropa junto a mis sandalias de tacón, porque con ellas no hubiera podido hacer esto. ** No afectaran para nada a su bebé señora, y se verá tan alta que parecerá una modelo de pasarela. Es usted realmente hermosa, nunca me hubiera imaginado que estuviera casada y menos que pronto se convertirá en madre, se le ve tan joven. ¡Su esposo la debe amar mucho! ** fue lo que me dijo, Pues no lo sé, ahora ni me interesa lo que dijo sobre los sentimientos de esa basura