No sé cuánto tiempo pasé apretado entre los brazos de Viktor, me perdí en mi dolor, en mis frustraciones.
Solté todo lo que tenía guardado en mi alma, tan profundamente que me estaba enloqueciendo. No hablamos más, solo lloré y lloré todos mis años de soledad, estos 7 meses de necedad, todo en el abrazo lleno de amor de Viktor.
Todo terminó con un gruñido a nuestras espaldas. Me alejé muy rápido del cuerpo contenedor del chico y me puse de pie pensando en defenderlo del peligro, pero era solo Scott muy cabreado.
Me miraba sin dejar de gruñir, Viktor comenzó a hablarle tranquilamente para calmarlo.
Es obvio, es un alfa y otro macho con poder estaba abrazando a su pareja.
Aunque es obvio que Viktor reparta abrazos de amor ya que es la parte humana de la pareja, nació para eso, el joven alfa tendrá que aceptarlo con el tiempo.
-disculpa alfa.
Le muestro mi cuello en señal de respeto, no me muevo hasta que después de unos momentos siento sus dedos en mi piel.
Pongo mis ojos en blanco, estos protocolos que seguimos a veces siento que son absurdos.
-Clark.
Me saluda mientras sostiene a su pareja por la cintura.
-Scott. Hola.
-que hacían?
Viktor responde por mi, yo no quiero hablarle.
-nos encontramos de casualidad y lo invité a dar una vuelta conmigo. Hacía tiempo que no lo veía por el pueblo.
Solo asiento con mi cabeza reconociendo sus palabras.
-y cómo estás Clark? Disculpa mi comportamiento. Todavía me cuesta
-entiendo. Está bien, es normal.
Estoy bien.
-Me voy a ir.
-no te vallas Clark. Quieres almorzar con nosotros?
-no lo creo.
Respondo
Scott me mira sin expresión alguna.
-puedes unirte a nosotros Clark. Siempre eres bienvenido en nuestra casa.
-está bien.
Aunque corrí como 2 horas, estoy sudado.
-puedes darte una ducha en casa, no hay problema. No corres como lobo? Yo corro todos los días pero voy alternando mi forma
Scott me dice mientras volvemos a subir al auto
-no, estoy distanciado de él.
Le digo y me arrepiento de dar tanta información.
-mm entiendo
-y tu como llegaste hasta aquí? No estabas en el taller?
Viktor le pregunta a su alfa
-estaba si, pero vine a comprobar la entrada de la casa de los Miller. Y vi tu auto cariño.
-y tienes que arreglarla?
-está muy vieja, la casa entera, pero quieren arreglar la galería y las escaleras de ingreso que está en muy mal estado, es algo que deberíamos poder hacer en unos 2 o 3 días, seguramente la semana que viene, ya nos organizaremos.
-está bien.
Vamos camino a su casa, me estoy arrepintiendo de ir, no sé cómo me sentará volver ahí.
Y sin darme cuenta ya estamos en la puerta.
Suspiro y cierro mis ojos un momento.
-está bien Clark. Tu puedes, puedes vivir un poco, relájate cariño.
La mano de Viktor acaricia mi cabello. Y sonrío.
-me siento como un niño pequeño siendo cuidado por un hermano mayor.
-está bien eso, debes dejarte cuidar Clark, no siempre debes ser el fuerte.
Le sonrío suavemente y doy un paso al interior de la casa.