Patrick fue a recoger a su hija del colegio y la directora aprovechó para darle pésimo noticias, su hija había aprobado todos los exámenes académicos para nivelarse en el grado correspondiente después de ocho meses sin asistir al colegio, pero se reusaba a ponerse frente a un piano, el violín o siquiera componer. Nadie entendía por qué de los siete nietos de Adriana Betancurtt Luthor, Meredith tenía que ser la más similar a su abuela. Era una bendición y un castigo. La niña pintaba, esculpía, dibujaba precioso, pero escucharle con cualquier instrumento era simplemente fascinante, hipnótico.
—Peque, no sé nada de música. Y eso, si fueses un hijo varón te diría que no es un trabajo y te pondría a trabajar en una mina, pero eres mi hija y planeo casarte con un gilipollas con dinero, así que, te escucho: ¿cuál es el plan que tienes para ti?
—¿Vas a castigarme por no tocar?
—No, la verdad, a veces pasamos de cosas. —comentó él.
—¿Es porque te recuerda a tu madre?
—Puede… pero, el piano en específico me recuerda a ti, a mi pequeña princesa, a sí que cuéntame, vas a volver a tocar o tengo que buscarte algo que hacer. Puedo casarte ya, seguro que catorce es una buena edad —bromeó y ella sonrió.
—No me siento inspirada y nunca me ha gustado tocar por tocar.
—Hija, es una escuela de arte. Te preparan para ir a Juilliard, has hablado de eso toda la vida, ojalá no lo eches a perder.
—Eres pésimo motivador.
—Eres mi hija, tus hermanos han echado a perder cosas, y yo igual, es normal que seas un fraude.
—¿Estás intentando enojarme?
—Si está funcionando...
—¿Puedes llevarme a casa y dejar de darle vueltas a la manzana?
—Vale. Solo quiero que sepas que si ocupas hablar, un psicólogo, familia, lo que sea, lo tendrás.
—Gracias, papi.
—Con todo el gusto, amor.
Patrick le deja en casa y antes de irse le prepara un emparedado, su hija se queda viendo el pan con jamón sin mantequilla y sonríe.
—La tía Ada nos ha dado comida de lástima, hay camarones, se ven buenos, todo está en el refrigerador y ese es tu latte con crema batida.
—Gracias a Dios, sabes hacer latte porque el pan con jamón aquí seco… fatal.
—Gracias, papá, además de guapo e inteligente eres un chef que me alimenta sin miedo al éxito.
—¿A dónde vas?—pregunta su hijo mayor.
—Voy a comer con una amiga.
Parker le da un beso a su hermana en la frente y Percy le roba un sorbo de la bebida, luego revisa el pan y mira a su papá:
—Describe a esta amiga
—La mujer a la que le puse los cuernos con tu mamá y como si fuese poco he dejado a mi amante embarazada, me he casado con ella, he tenido gemelos y una nena.
—Wow, ¿y te ha esperado estos años?—preguntó Meredith y su hermano río.
—Somos amigos, no necesitas estar preocupada o celosa, cuando tenga una pareja les mando un mail.
—Gracias, tenemos un grupo de Whats familiar.
—Bye, cuiden a su hermana y contrólense los tres.
Mainvillage es famoso por su gran cantidad de eventos para sacar el dinero del bolsillo de los ricos, Patrick tiene unos cuantos eventos en lista a los cuales le gusta asistir y otros a los que tiene que ir ya sea por el trabajo de sus hermanos o el nombre de su familia, mientras caminaba por la sala de eventos en busca de Daniela, la vio, la chica de su convención tomada de la mano de un hombre. Llevaba un vestido naranja pegado al cuerpo, el cabello recogido, pero, él no podría olvidarse de esos ojos enormes, la cara llena de inocencia y el cabello castaño.
Ella la chica de sonrisa dulce, demasiado joven, demasiado guapa e inteligente, demasiado Jane y Adam Luthor para él, la joven le miró a los ojos por un par de segundos y sonrió, su pareja se giró a verle y Daniela le dio un par de golpes en el pecho.
Daniela se muestra feliz cuando ve a Patrick, se disculpa con el grupo de señoras con el cual está y les acerca a saludarle con un beso en la mejilla y un abrazo. Ella sonríe y le da una repasada completa, le arregla la corbata.
—No te has vestido para mí.
—Le he preparado un emparedado a mi hija y creo que no le gustó.
—¿Tenía mantequilla?—Patrick no podía creer que ella recordase ese dato de cuando eran novios. Patrick no cree en llenar el pan con tantas salsas y elementos grasos, el jamón y queso crema de un solo lado deberían ser suficientes.
—Eso saca granos y engorda. —La mujer ríe y ella le hace una seña para que distraiga a la pareja de Leonel del Castillo, los dos se ríen y él pregunta cuándo se ha convertido en una esposa florero. Patrick presenta a Castillo con su ex pareja, los dos estrechan manos y comienzan a hablar sobre su negocio.
Aurora no podía creer su suerte, primero que su padre le enviara a la convención cervecera, segundo llamar la atención de Patrick Luthor en Jenas y camiseta y por último, encontrarle ahí, en un evento estúpido organizado para sacar dinero del bolsillo ajeno.
Patrick le mira de pies a cabeza, algunos la juzgarían por los kilos de más y otros le inventarían un posparto, pero, a Patrick le llamó la atención la inusual timidez de la mujer. Por su ropa y peinado, era obvio que tenía acceso a mucho más dinero del que admitió la primera vez que se vieron, ella definitivamente no es una simple empleada.
—Patrick —le llama Castillo y estrecha su mano hacia ella. La mujer le ve impresionada, de la misma manera que él se queda en silencio y sonríe.
—Me disculpo. Es una grosería, no haberles presentado, Aurora, él es Patrick Luthor, de la cervecería.
—En serio, soy muy fan de tu trabajo, soy bióloga.
—Hola, bióloga.
—Soy Aurora
—Aurora, es un placer—Dice y le saluda.
—¿Te consigo una habitación o aquí estás bien? —Patrick baja la mirada hacia Dani.
—No entiendo por qué todo el mundo se mete con mis pantalones.
—De seguro no soy su tipo y ha venido contigo.
—Patrick no tiene tipo y no estamos en una relación.
—Aurora está solterísima—Comenta Castillo, la mujer se ruboriza y mira a su amigo incómoda pro semejante acotación.
A quien le preocupa su amiga, una cosa es reservarse por religión y otra es no interactuar con el sexo opuesto o el mismo sexo, por una mala experiencia con un gilipollas en la adolescencia. Cualquier sexo para ella está prohibido y no tiene nada con la asexualidad, pero, sabe que muy dentro Aurora es la chica perfecta para casarse y ser la madre de unos dos hijos. Él se hubiese casado con ella, si no fuese gay.
Patrick y la joven se disculparon para ir al bar mientras ellos dos continuaban trabajando. Al paso que se alejaban, Daniela se preguntaba si toda la vida sería su amiga, su fiel y leal amiga. Mientras Castillo rezaba porque Aurora finalmente se pegara un revolcón, específicamente con el caliente, sexy, maravilloso y deseable señor Luthor.
Chicas, practiquen comentar, que siempre hay demasiado cotilleo. Les dejo dos temas; Mercy que a muchas de ustedes no les gustaba, se ha ido y Daniela que las estresaba, sigue por aquí, extra pregunta: Meredith siendo el clon de Adriana, la vida... funciona de mil maneras. ¡Las leo!