Aidan. ¿Cómo se atrevió a tanto?, claro que no iba a dejar esto así como así, por algo la tengo justo aquí. No fue para tanto, tan solo nos dio una tocadita. ¿Te estás escuchando? Claro, debo admitir que es una chica de armas tomar. Dice Alan con un poco de humor, esta pequeña chica no va a venir a toquetearme y salirse con la suya como si nada, yo soy un futuro Alpha, nadie me intimida, al contrario, yo intimido. — No vuelvas a hacer lo de hace un momento. Advierto con seriedad, ella entrecierra sus ojos fulminándome, no debería verla tan atractiva haciendo ese gesto. ¿Ya ves moco? No estás enojado. No te metas, déjame solucionar este tema. — Yo… bueno… — ¿Qué pasa, eh?, ¿ya no eres tan valiente? La interrumpo en tono burlón, me vuelve a fulminar con la mirada, forcejea con