Rosa nos mira con una expresión desaprobatoria. Y el hombre de mostrar un rostro carente de emociones, pasa a tener una sonrisa coqueta. Es falso. Todo en él es falso. Esa apariencia. Ese rostro. Esas emociones. Esa identidad que usará de seguro. Lo único que tiene ella es el olor, es el sabor. ¿Qué cosa es esta? ¿Es de verdad la muerte o he sido acechada por otra entidad todo este tiempo? ¿Qué pasa? ─ Perdón por interrumpir en el estudio de tu papá Rosa. Es que nos perdimos buscando el baño – dice la cosa, en un tono astuto… es evidente que está mintiendo ¿por qué lo hace tan evidente? ─ ¿Sí? Ian te está buscando Agatha – me indica Rosa. Molesta con la boca hecha una línea. Lo capto ahora. Estaba encerrada y escondida con un hombre casi acorralándome, un hombre que no es Ian. ¿Un