Pov. Valentina
No debes esperar nada de nadie, porque cuando esperas, cuando dejas que pasen, las cosas terminan como ahora. Con Alva en lencería, Demon cerca de ella y lo que parece ser el inicio de una película porno.
En este caso soy la mujer que se encuentra enferma, ella la empleada golfa, él… no encuentro adjetivo acorde para su persona.
Ahora me arrepentía de no haberlo visto besándose, de no prestar más atención y solo tener una pequeña frase: “¿Por qué no lo dices? Es una niña.”
Comparado con ellos, seguramente lo era, no iba a decir que no, porque sería hipócrita de mi parte, no llegaba a tener ese grado de maldad.
Tuve que madurar a los golpes, muchos golpes y entendía que eso no era algo bueno ni mucho menos, porque no me hice responsable hasta que paso todo esto.
Así que
