Pov. Valentina El sujeto que está acostumbrado a tener todo, actúa cómo Demon. Todas le pertenecemos, todos somos su propiedad, él es el maldito amo de todo el universo y tú no eres más que un acuerdo, pasatiempo o en el peor de los casos el medio para un fin. Mis pies dan contra el suelo mientras contengo las ganas de mandarlo de vuelta con su creador, no me gusta para nada la forma en que se refería a mí como si fuese mi dueño, porque no lo es. No es mi dueño, nunca lo va a ser. No le pertenezco. — Valentina —mi brazo es tomado y mi cuerpo tirado hacía atrás para volver sobre él. — Suéltame, no tengo nada que hablar contigo. — Íbamos a almorzar —bufé. — Por si no es obvio, no vamos a ir a ningún lado —paso su mano libre por su rostro. — Estas actuando irracionalmente