Cuando llegaste

CAPÍTULO 11

NAJWA

Me dolió mucho cuando el director me dijo que no podía volver a asistir a clases porque mi padre había cancelado mi matriculación. La verdad es que no me lo esperaba, aunque no debería de sorprenderme, puesto que él no quería dejarme estudiar una carrera en un principio porque decía que las mujeres teníamos que atender la casa y a nuestros maridos. Si ya sé. Es un pensamiento muy machista y estoy segura de que cancelo mi matriculación para presionarnos a mi madre y a mí a volver con él porque no tiene ni idea de quién es Christian.

A media tarde salimos rumbo a la hacienda de Christian, pero ya llevamos más de una hora y todavía no hemos llegado. Ahora mismo vamos por un camino de terracería que está completamente rodeado de vegetación, pero a lo lejos se ve un enorme muro de piedra con una puerta de acero, la cual tiene impreso en ella las cabezas de dos caballos y un letrero en forma de agave que pone “Hacienda Agave Azul”.

Al estar cerca, Christian toca el claxon e inmediatamente dos hombres abrieron la enorme puerta para que pudiéramos entrar.

- Bienvenido Patrón – le dice uno de los hombres que abrió la puerta a Christian.

- Hola, Jacinto. ¿Hubo algún problema durante mi ausencia? – le pregunta Christian.

- No, ninguno Patrón – le dice este.

- Bien. Hazme el favor de decirle a todos que los quiero ver mañana a primera hora en el comedor – le pide y este asiente en respuesta.

- Claro Patrón – le dice Jacinto.

Christian pone la camioneta en marcha nuevamente y a medida que vamos avanzando vemos a la gente trabajar en las grandes plantaciones de agave.

Este lugar me recuerda a las telenovelas tradicionales que pasan por televisión con caballos y sus plantaciones enormes.

Una vez pasamos las plantaciones empezamos a ver pequeñas cabañas que supongo que serán las casas de los trabajadores, como también se puede ver la enorme caballeriza estilo granero junto a un picadero dónde varios trabajadores están entrenando a caballos y en lo alto de una montaña se ve una casa enorme de estilo mediterráneo moderno que toma prestados detalles estéticos del renacimiento italiano y español.

Nada más bajarnos de la camioneta vemos salir de la casa a una mujer de mediana edad, la cual va vestida con ropa tradicional.

- Christian, todo está listo como me lo pediste – le dice con una sonrisa mientras nos mira a mi madre y a mí con curiosidad.

- Gracias Lupita – le dice Christian – Mira. Te presento a la señora Azahara y a Najwa – le dice provocando que esta nos sonría – Y ella es Lupita, la mujer que nos ayuda a que la casa esté en orden.

- Bienvenidas. Estoy a sus órdenes – nos dice – Permíteme yo las llevo – le dice a Christian cuando ve que este saca las maletas de la cajuela de la camioneta.

- No hace falta Lupita, yo lo hago. ¿Nos podrías preparar una jarra de agua fresca de limón para este calor? – le pregunta y está asiente en respuesta antes de salir rumbo a la cocina.

- Es muy amable – dice mi madre.

- Sí, pero tiene un pequeño defecto, es muy chismosa – dice Panchita en un susurro.

De repente escuchamos como alguien grita “AGÁRRENLO” e inmediatamente vemos a Aquiles, el caballo que Christian utilizo en la presentación de anoche, correr a todo galope hacia nosotros.

- ¿En qué quedamos tú y yo la última vez potro endiablado? – le pregunta Christian serio una vez este llego a donde estábamos provocando que este relinche y mueve su cabeza de arriba abajo – Bueno. Y entonces, ¿por qué te escapaste de las caballerizas?

Este pasa de Christian olímpicamente y viene directamente hacia mí provocando que por instinto retroceda.

En persona, Aquiles impone mucho porque es un caballo enorme en altura y en peso.

- Tranquila. No te va a hacer nada – me dice Christian con seguridad.

Me quedo quieta como si fuera una estatua y Aquiles pone su hocico con delicadeza en mi vientre mientras cierra sus ojos, es como si supiera que… No. Es imposible que lo sepa. ¿O sí?

- Perdón, Christian. No pudimos evitar que se saliera de la caballeriza, ya sabes cómo se pone cuando te escucha llegar – le dice el mismo hombre que llevo a Dalia a la Universidad.

- No te preocupes Hugo – le dice – Mira. Te presento a la señora Azahara y a Najwa – le dice señalándonos – Cualquier cosa que ellas te pidan la haces como si hubiera sido Panchita, Dalia o yo quien te lo estuviera pidiendo, ¿entendido?

- Sí – le dice – Estoy a sus órdenes – nos dice mirándonos a mi madre y a mí – ¿Me llevo a Aquiles?

Aquiles quita su hocico de mi vientre al escuchar su nombre y mira a Hugo antes de relinchar.

- Yo me encargo de llevarlo. Por favor, llámale al carpintero para que haga otra puerta – le dice Christian a Hugo mientras Aquiles vuelve a poner su hocico en mi vientre otra vez.

- ¿Qué le pasa? ¿Por qué hace eso? – pregunta mi madre con curiosidad una vez Hugo se fue.

- Si no me equivoco Aquiles puede escuchar el latido del corazón del bebe – dice Dalia.

- ¡¿Qué?! ¿Cómo es posible eso? – le pregunto con mucha curiosidad.

- Porque los caballos poseen un sentido del oído más desarrollado que el del ser humano. Tanto así que pueden captar frecuencias tanto por encima, como por debajo del espectro audible por los humanos – me explica Christian – ¿Qué paso? ¿Te gusta lo que escuchas? – le pregunta a Aquiles mientras lo acaricia en el cuello provocando que este mueva su labio superior – Me vas a tener que ayudar a llevarlo a la caballeriza – me dice Christian.

- Está bien. ¿Qué hago? – le pregunto con curiosidad.

- Primero enséñale tu mano derecha para que vea que no vas a lastimarlo, aunque él ya confía en ti – me dice y yo así lo hago – Muy bien. Ahora acaríciale la frente dibujando pequeños círculos muy lentamente – hago lo que me dice y Aquiles ladea ligeramente la cabeza y estira el cuello, además, levanta y mueve ligeramente el labio superior.

- ¿Ahora qué hago? – le pregunto mientras sigo acariciándolo.

- Camina en dirección a las caballerizas – cuando comienzo a caminar, Aquiles me sigue como si fuera un perro.

- Nosotras los esperamos adentro, que aquí hace mucho calor – nos dice Panchita.

Una vez dejamos a Aquiles en las caballerizas que por cierto no se quería separar de mi vientre entramos a la casa y al verla me doy cuenta de que lo que me dijo Dalia sobre que yo la ayude a hacer la remodelación es verdad.

Me imagino que quieren saber cómo es la casa por dentro, ¿o no? (Pueden ver la casa en el canal de YouTube Enes Yilmazer - ¡Inside a $34,900,000 CALIFORNIA MEGA MANSION with ocena views! Aunque se la describo abajo)

La casa tiene hermosos pisos de piedra caliza, prácticamente a lo largo de todo el nivel principal y sus paredes son de color blanco. A mano izquierda tenemos el salón formal conformado por un hermoso sofá de media luna en color gris con sus cojines en color gris, vino y amarillo, cuatro sillones redondos con base giratoria en color blancos con sus cojines en colores vino. En medio de ellos una mesa de café cuadrada de cristal y justo en frente una chimenea de gas revestida con mármol gris. Al lado de la chimenea se instaló un pequeño lavabo y también una pequeña nevera.

Tenemos unas puertas corredizas de vidrio que se esconden en la pared que se abren a un patio cubierto y a las impresionantes vistas.

A mano derecha tenemos el comedor formal con una hermosa mesa de cristal para diez personas con un hermoso candelabro y además tenemos ventanas arqueadas que dan al frente de la casa y otras puertas corredizas de vidrio y justo al lado hay un pequeño diseño de cava.

A medida que vamos avanzando por el pasillo a mano derecha tenemos la escalera de piedra caliza con iluminación led que va hasta el nivel inferior, así como al segundo piso. Seguimos caminando por el pasillo y antes de entrar a la cocina tenemos un ascensor.

La cocina y el comedor es un área familiar. Este lado de la casa está completamente abierto, por lo que recibe mucha luz gracias a las puertas de vidrio corredizas que están totalmente abiertas y que hacen que el interior y el exterior se junten, además de que nos permite ver la enorme piscina. El comedor tiene una mesa redonda para cinco personas en mármol gris y sus sillas estilo sillones redondos.

La cocina por su parte, tiene islas dobles, hermosos gabinetes de roble blanco. La primera isla tiene la encimera de vidrio comprimido con borde en cascada y con sus taburetes en tela gris a cada lado. Justo al lado de eso tenemos la misma encimera con el borde de la cascada con su fregadero, por supuesto, algo de almacenamiento adicional en cada lado de esta y si miramos a la pared tenemos los gabinetes base con encimeras de mármol, placa para salpicaduras de mosaico de mármol con el patrón de chevron, y por supuesto, su estufa de gas con seis fogones y su congelador y nevera en panel.

Al fondo del lugar se puede ver una hermosa sala de estar con un sofá enorme en forma de u, una mesa de café en vidrio y su chimenea de gas revestida de mármol blanco.

Saliendo de la sala de estar hay un pequeño pasillo al aire libre que nos lleva a la que era la casa de huéspedes, la cual convertimos en el despacho y el estudio de grabación de Christian. Al entrar a esta nos encontramos a mano derecha con unas escaleras con el mismo estilo de las anteriores, pero en forma de caracol que nos llevan al segundo piso donde está el estudio de grabación (ESTUDIO DE GRABACIÓN Canal de YouTube Arq. Salvador Sturla para que lo vean)

El despacho tiene una mesa en mármol gris con cajones a ambos lados para guardar documentos al fondo, un ordenador, una silla giratoria en forma de huevo en cuero marrón y dos sillones estilo silla en color azul igual que la enorme alfombra y en la pared al lado de la puerta hay una gran estantería de suelo a techo llena de libros y de algunos cajones más de almacenamiento. Este lugar tiene el suelo de piedra caliza y grandes puertas francesas que le dan mucha luz.

Regresando a la casa, bajamos al nivel inferior que tiene unos hermosos suelos de madera y justo al lado de la escalera tenemos un piano de color n***o a mano derecha. Si avanzamos un poco por el pequeño pasillo estamos en un espacio completamente abierto con un área de descanso, mesa de billar y un bar listo en el lado izquierdo, desde donde podemos ver gracias al enorme ventanal la colección de coches de Christian (Mercedes Benz Clase G en n***o, Jeep Wrangler Unlimited en color verde oscuro, Ferrari 488 GTB en rojo, Porsche 911 Carrera Cabriolet en azul oscuro y un Lamborghini Huracán Spider en color verde)

En este nivel también está el gimnasio y la sala de cine, la cual cuenta con una pantalla que ocupa toda la pared, butacas en cuero n***o a tres niveles y un pequeño bar nada más entrar que tiene una nevera, lavabo y obviamente la máquina de palomitas.

En el segundo piso tenemos un tragaluz justo encima que deja pasar luz natural hasta el nivel inferior, completando con el candelabro en forma de diamantes.

Todo este piso tiene los suelos de madera, incluidas las habitaciones.

Justo en frente de la escalera tenemos unas puertas dobles de granero que se abren al área de estar del segundo piso. Unos asientos bien cómodos en color blanco, ventanas abatibles al fondo del lugar y unas puertas de acordeón en cristal que se abren a un balcón privado. El techo de este espacio nos deja a la vista unas hermosas vigas de madera y para completar todo esto tiene un bar instalado con microondas, gabinetes de roble blanco, una pequeña nevera, lavabo con una encimera de mármol negra y el protector contra salpicaduras con el acabado de cuero.

A mano derecha, saliendo de la sala de estar, hay unas puertas dobles que llevan al dormitorio principal, el cual tiene un pequeño pasillo con dos puertas dobles a cada lado de este. A mano derecha tenemos la increíble suite principal con su cama King Size en el lado derecho y justo en frente de la cama tenemos un sofá con dos sillones y una mesa, chimenea de gas revestida de mármol gris con una televisión instalada y al lado de esta una pequeña nevera. Tenemos iluminación en cornisa justo en el centro e iluminación led empotrada alrededor de la habitación y al lado derecho de la cama tenemos unas puertas corredizas de vidrio escondidas en las paredes que se abren a una terraza cubierta que se comunica con el baño gracias a que este también tiene unas puertas corredizas de vidrio. El suelo de piedra caliza, dos sofás, uno a cada lado y una mesa de café en medio de estos.

Volviendo adentro tenemos unas puertas dobles que nos llevan al baño que tiene como una especie de tocador y lavabo con hermosas encimeras de mármol. La pared trasera del tocador es de azulejos texturizados con espejos redondos, luces empotradas, justo al otro lado tenemos una bañera circular que tiene un pequeño banco en su interior y hermosos pisos de mármol en todo el lugar, una ducha en forma de lluvia a ras del suelo con las paredes revestidas de mármol y al lado del lavabo hay una puerta que nos lleva al primer vestidor que tiene gabinetes de roble blanco con sus perchas, estantes e iluminación led.

Regresando al pasillo abrimos la otra puerta corredera que nos lleva a otro baño con entrada de mosaico de mármol con pisos de mármol a lo largo. Lo primero que se ve son los gabinetes de roble blanco con su lavabo justo en el centro. Encimeras de mármol negras y el enorme espejo cuadrado que cubre la pared. A mano izquierda hay una puerta que nos lleva al inodoro, el cual tiene dos, uno tradicional y otro de pared. Al otro lado de esto está la ducha a ras del suelo con hermosas losas de mármol en las paredes y justo detrás del lavabo está todo el vestidor.

Las cuatro habitaciones restantes son parecidas a la principal, pero no son tan grandes ni tienen dos baños incorporados.

Después de tomar un vaso de agua de limón, subimos a la segunda planta para ver las habitaciones.

- Esta va a ser tu habitación – me dice Christian luego de que le enseñara a mi madre la que ella iba a ocupar – Si hay algo que no te guste puedes cambiarlo sin ningún problema – me dice mientras deja las maletas en el vestidor.

- Gracias Christian, pero no cambiaré nada – le digo sonriendo.

De repente todo a mi alrededor empieza a darme vueltas.

- ¡Najwa! ¿Qué te pasa? – me pregunta Christian preocupado mientras me abraza a él para que no me caiga al suelo.

Por unos segundos tuve los ojos cerrados por culpa del mareo y cuando los abrí me quedé atrapada en la mirada de Christian, pero después no puede evitar mirar su boca, la cual está a unos centímetros de la mía.

Nunca me he besado con nadie, pero ahora mismo tengo la necesidad de sentir sus labios en los míos.

- ¿Estás bien? – me pregunta mirándome los labios él a mí ahora.

- Sí. Solo estoy un poco mareada – le digo.

- Seguramente es por el calor que estás mareada. Te ayudo a llegar a la cama – me dice dejando de abrazarme antes de cargarme en brazos.

Me recuesta en la cama con sumo cuidado y me pone uno de los cojines en la espalda para que me apoye contra el cabecero de la cama.

- Te voy a buscar un vaso de té de jengibre. No te muevas – me dice y yo asiento en respuesta.

Cierro los ojos y respiro hondo mientras me acaricio el vientre con amor y poco a poco me siento mejor.

Luego de cinco minutos veo entrar nuevamente a Christian a la habitación.

- Toma – me dice dándome la taza de té – Cuidado que está caliente.

- Gracias – le digo antes de tomar un sorbo de té.

- ¿Estás mejor? – me pregunta preocupado sentándose en la cama frente a mí.

- Sí.

- ¿Segura? ¿No quieres que llame al médico para que venga y te revise? – me vuelve a preguntar.

- Estoy bien, tranquilo – le digo poniendo mi mano sobre la suya antes de que alguien toque a la puerta – Adelante.

Inmediatamente, veo entrar a mi madre, la cual se sorprende mucho al ver a Christian.

- Vine a ver si necesitabas ayuda para ordenar tus cosas, pero mejor vuelvo luego para que sigan hablando – nos dice apenada.

- No se preocupe – le dice Christian inmediatamente mientras se pone de pie – Y qué bueno que vino porque no quería dejar a Najwa sola.

- ¿Por qué? – le pregunta mi madre con curiosidad.

- Es que hace rato, se desmayó – le dice.

- ¡¿Qué?! ¿Estás bien, hija? – me pregunta preocupada acercándose a mí.

- Sí, tranquila – le digo.

- Bueno, yo las dejo solas – nos dice Christian antes de salir de la habitación.

- Mírame a los ojos Najwa – me pide mi madre luego de sentarse en la cama – ¿Qué te pasa con Christian?

- Nada. ¿Por qué? – le pregunto confundida.

- Porque no me gustaría pensar que Christian se esté aprovechando de la situación para divertirse contigo – me dice.

- Como crees mamá. Christian se porta como un príncipe. Es todo un caballero. Me respeta, me mira a los ojos y con ellos me dice que me comprende, que me admira porque se enternece cuando le sonrió y se le iluminan cuando le hablo – le digo.

- Hablas de Christian como si te estuvieras enamorando de él, ¿es eso, hija? ¿Te estás enamorando de Christian? – me pregunta.

- ¿Cómo crees que voy a estar enamorándome de Christian mamá? Lo que pasa es que es el padre del bebe que llevo en mi vientre y me parece una buena persona, eso es todo – le digo ocultando mi nerviosismo.