Narra Clara
Intento actuar como si todo fuera completamente normal, aunque no lo sea.
Nadie en la oficina me trata de manera diferente; hasta donde sé, ninguno de ellos sabe sobre mi relación con Renzo, pero es en lo único que puedo pensar.
Sus labios, sus manos en mis labios, la forma en que me mira.
Sus palabras la noche anterior cuando me sacó.
Nada de esto tiene sentido. No es racional, no es posible y, sin embargo, aquí estoy, girándome hacia este tipo como una completa idiota. Necesito apagarlo, pero aún no sé cómo.
Alrededor del mediodía, Dante aparece con un almuerzo para llevar.
—Cortesía del chef– dice con un guiño—.Además, Renzo te envía saludos, pero tuvo que regresar a casa para atender una emergencia.
—Oh, está bien, claro. Ningún problema—miro en dirección a su ofic
