Una Geisha Contemporanea Para el Ceo

Geisha Meilin.

—Hola Yang Mei Xian —saluda, con un perfecto inglés, una señora, desde que mi prima abre la puerta.—Tomen asiento.

—Buenas noches, Sra. Li Huang wu, ella es mi prima Yang Vicini Meilin.—dice mi prima.

—Bienvenida Srta. Yang, Soy la Sra. Li, pero conociendo tu procedencia puedes llamarme Tía Wu, ya vi tu hoja de vida y tú experiencia en el área de danza contemporánea, me alegra que hayas venido desde tan lejos a nutrirse de nuestra cultura, que serán siempre tus raíces, por vía de tu padre. Te vamos a enseñar durante los próximos 3 días a actual como una Geisha, bailar, servir el té y entretener a nuestros clientes, hoy en día no nos regimos con tanta reglas como antes, pero mantenemos la tradición lo más original posible, tengo chicas que saben tocar algún instrumento, si sabes o te interesa me puedes decir así estaremos en la misma página.

—Muchas gracias por la oportunidad, de estar aquí, estoy ansiosa por aprender todo. La verdad no sé tocar ningún instrumento tradicional chino, pero sé tocar violín y guitarra, no profesionalmente, pero le puedo enseñar lo que sé y usted decide si lo ejerzo aquí.

—Bien, firma este contrato y puedes venir desde que estés instalada. ¿Tienes algún nombre en mente de como quieras llamarte o no hay problemas con usar tu nombre verdadero?

—La verdad prefiero mantener mi nombre, si no es problema.

—Bien entonces te llamaremos Geisha Meilin.

—¡Muchas gracias!—Le dije agradecida.

Luego de firmar el contrato mi prima me dio un mini tour por la propiedad, el entrenamiento de baile se lleva a cabo en el jardín, el de té en unos de los pabellones, cerca de la cocina, y el de música en el sótano, para no molestar a los clientes.

—Ya puedo respirar más felicidad.—me digo a mi misma.

Mei Mei, antes de irnos me hace probar dos, de tantos postres tradicionales de ese país, el pastel de luna y el helado frito, están realmente deliciosos. Pienso que no me voy a cansar de los postres.

Ya han pasado varias horas desde que salimos de casa de mis tíos, son casi las 10 de la noche y por mis ojos no se asoman una pizca de sueño, y al confesarlo a mi prima decide darme otro mini tour, pero está vez, por los alrededores.

La vida nocturna de Hong Kong, es bastante alegre, y el paisaje de la costa es hermoso, se parece un poco a mi país, pasamos por un bar, allí Mei Mei me da a probar unas de sus mejores cervezas baijiu, es la bebida alcohólica nacional de china y una de las bebida más consumidas en el mundo, con una historia que abarca varios miles de años.

—Realmente nos la pasamos genial, algunos chicos, se voltean a vernos, al haber notado, la particularidad de estar hablando español, aunque nos vemos como auténticas chicas chinas.

Cuando retornamos a la casa mis tíos ya duermen, Mei Mei me abre la puerta con su juego de llaves, me dice que más adelante me dará una copia de la llave de la casa.

Nos despedimos con un abrazo y quedamos de vernos al día siguiente en horas de la tarde.

Al día siguiente me levanté temprano, por supuesto que con las 3 alarmas que había dejado programadas la noche anterior.

Estuve corriendo por media hora a los alrededores, aunque termino regresando caminando, muerta de cansancio, pienso que me estoy poniendo vieja o ya he perdido la costumbre, pero con mi carrera debo mantenerme en la línea, ¿se imaginan una maestra de danza Contemporánea pasada de peso?, no me mal interpreten no es discriminación, es que hay que poner cada cosa en su lugar, si quiero ser exitosa debo cuidarme más, dormir bien, y ser feliz para hacer felices a mis futuros estudiantes.

Ya para las 2 de la tarde Mei Mei, está de vuelta. Yo estoy lista así que luego de ella, bañarse y cambiar su de ropa nos dirigimos camino a la casa de té.

—¡Buenas tardes!—saludo a 4 chicas y 3 chicos que están en el área de música.

Todos me saludaron con un caluroso recibimiento, posiblemente por ser la prima de Mei Mei, o tal vez se alegran de que yo este ahí, pues les ayudaré con todo. El trabajo dividido es menos pesado.

Estuvimos 2 hora en el área de música, tocaron el Ciao, un instrumento de viento, el Gu un instrumento de percusión y la pipa que es un laúd de 4 cuerdas, es un instrumento tradicional chino, al igual que la cítara, un instrumento musical de cuerda pulsada, con más de 4500 años.

Luego pasamos al salón para aprender a tomar el té, y para aprender a hacer la ceremonia tradicional del té, en china es muy sencillo, se emplean nada más y nada menos que tres teteras para su uso y elaboración. Una sirve para calentar el agua hasta el punto óptimo de cocción de 80 grados centígrados, otra para verter las hojas de té e infuncionarlo, durante menos de un minuto, y la última para servirlo.

¡Sí…claro lo leí muy sencillo en la web, hasta que me tocó ponerme la ropa!, maquillarme, peinarme e intentar moverme lento pero con gracia, mientras sostengo la tetera, realmente admiro a esas mujeres, y me fascina como se ven, voy a apreciar y amar cada segundo que esté en Hong Kong. Luego de dos horas corrigiendo errores, la Sra. Li nos invitó a cenar, el ambiente era muy alegre, y ni se diga de la fabulosa e impresionante comida que nos sirvieron.

Luego de disfrutar entre todos, decidimos salir al patio a reposar la comida y luego de media hora hablando de todo, nos dispusimos a bailar.

—¡ Sí… llega mi parte favorita!.—gritó mi interior.

La Sra. Li quiere verme bailar con el atuendo aún puesto, no estoy acostumbrada, pero como ya he visto miles de tutoriales en Youtube y practicado en medio de mi concurrida soledad en República Dominicana. Decidí dejar el nerviosismo de un lado era mi momento de brillar.

La Sra. Li saca los instrumentos, que toman los que serán mis compañeros de trabajo, y ella dirige aquel baile con su voz, cosa que me parece impresionante, me aclara que debo improvisar conforme va avanzando la música, me pide que baile con el corazón y eso voy a hacer, me facilitan un gran abanico de papel y pido que me den alguna hoja papel para simular una carta doblada, me pongo en pose y di la señal para empezar mi primer acto.

Cerré mis ojos, la música empieza lentamente, entre crucé mis manos con el abanico abierto, lo coloqué en modo que me ocultara la mitad del rostro, empecé con giros suaves, aleteando mis brazos al compás de la música, me giraba cual mariposa en vuelo, sigo girando de izquierda a derecha el abanico, giré varias veces en mi centro, para ir tirando al aire el abanico, sin cometer el error de dejarlo caer, la música me eleva al sentimiento de despedida de un gran amor, es lo que me imagino, me arrodillo, colocó el abanico a un lado y saco el papel del kimono desdoblando y haciendo creer que lo estoy hojeando, me llevo las manos a la cabeza en forma de que he recibido una mala noticia, me adentré tanto en el papel del baile, que de la nada me surgieron varias lágrimas, supongo que la música tuvo la mayor culpa de eso, cuando empieza a tornarse el ritmo más rápido, me levanto con el abanico y lo lanzo al aire, lo atrapo sin mirar con la otra mano, sin poner una mano en el suelo, recojo el papel y lo rompo, luego doy un salto sin perder de vista el abanico y me agacho para volver a ladear el abanico como echándome el aire a la cara me toco la pierna derecha sin poner las manos, eso lo hago con el abanico y subo un poco el kimono mostrando solo las sandalias de madera, piso nuevamente el suelo, fuertemente con ellas, sigo dando giros y lanzando el abanico al aire, cuando siento que la música va a terminar, bajo la intensidad y vuelvo a mi posición anterior, cubriendo me el otro lado de mi rostro con el abanico.

Cuando termino escuché una gran ovación, más de 30 personas, están disfrutando de mi baile, yo me doy cuenta al terminar, pues apagaron la luz del pequeño escenario, en el que estoy subida. Siento que mi corazón sale de mi pecho de emoción.

Cuando alzo la vista al balcón de la casa de té, hay un chico que se queda mirándome fijamente, aún yo haya terminado de bailar, siento que me sigue con la mirada. Pero no le di importancia solo pienso que realmente le gustó mi baile.