Jenna entró en la habitación, afiló su mirada cuando vio que Mackenzie se alejó rápido de Andrew, tuvo una sospecha que la llenó de odio
—¿Qué sucede? Andrew, cálmate, por favor.
—¡Te dije que no te metieras, lárgate de aquí! —exclamó sorprendiendo a Mackenzie, Jenna se quedó callada, bajó la mirada y se marchó—. Y tú, será mejor que moderes tú carácter y seas menos rebelde —dijo Andrew bastante altivo
—¡Vete al infierno! —exclamó Mackenzie. Andrew sintió mucha rabia—. Lárgate de aquí, o te juro que no respondo —Mackenzie tomó una almohada dispuesta a lanzarla en la cara del Lord, quien la observaba confuso negó decepcionado, pero supo que sería imposible ganarle una pelea a esa mujercita, dio media vuelta y se marchó resignado. Ella cerró de prisa, jurándose que nadie le diría que hace
