El Hijo Oculto del Presidente

Una vida frívola

—Cuéntame, ¿Qué hizo Logan para que te hayan citado? —le preguntó George a Nadia sentada a su lado, mientras una de las chicas encargadas del área de la cocina se dedicaba de servir.

—¿No crees que te excediste con la señora Anne? —fue la respuesta de Nadia, evadiendo por completo su interrogante.

—Ese es un tema que no voy a tratar contigo, pero igual quiero que sepas que es una decisión tomada —le respondió tajante—. Respóndeme —exigió.

—Fui recibida por una psicologa y una psicopedagoga, dicen que Logan tiene cierto deficit de atención, no es algo grave, pero que sí requiere atención por su edad para que no se convierta en algo más profundo, ellas creen que requiere más atención, y no entiendo si yo siempre estoy ahí con él, tal vez sea porque no te ve sino por horas, y hay días en los que no te ve —informó Nadia.

—Claro que lo veo en las mañanas, hoy fue que no tuve tiempo porque debí salir rápido 1reclacó en voz firme—, que no puedo estar como lo haría cualquier otro padre con un horario de trabajo normal, ahí sí lo reconozco, aquí es donde tú debes apoyarme, Logan es solo un niño de cuatro años, mo te va a demadar tanto más que hacer tareas con él y si se quiere jugar con él un rato, supongo que no lo has hecho en los últimos meses y eso ha incidido en su rendimiento —opinó George observador.

—Siempre te he apoyado, no me gusta este reclamo, accedí a tenerlo porque sería nuestro complemento, no solo mío, entiendo que tienes muchas responsabilidades, pero debes recordar que somos una familia y como tal debemos procurar pasar aunque sea medio día a la semana juntos, desde hace años no sabemos lo que es eso, no creo que él problema de Logan sea por mi culpa —adujo Nadia buscando justificarse.

—Nadia, no quiero que una observación de un psicologo se convierta en un conflicto, aquí mi brazo derecho en todo lo que tiene que ver con el hogar eres tú, has lo que te corresponde y yo luego de que pase todo esto, organizaré mi agenda para dejar aunque sea mediodía a la semana para compartir en familia —le dijo serio—. Por lo pronto necesito que me presentes un horario de actividades a realizar con Logan, si lo que él necesita es atención y presencia de nosotros, entonces establece un plan y me lo presentas. Prometo llegar a casa antes de que él se duerma, estaré con él al comienzo y al finalizar el día.

George pudo interpretar en el rostro de Nadia el malestar que le ocasionó su orden, en los años anteriores él solo se ciño a lo que ella creyó conviente, y como quiera que nunca tuvieron problema alguno con lo que a él le parecía perfecto, no se había mostrado tajante. Nunca antes había tomado decisiones radicales en torno a la administración del hogar.

—¿Te acompañaremos a las giras que harás durante las campañas? —preguntó Nadia en un tono de voz bajo, cambiando bruscamente el tema.

No estaba de acuerdo con la forma en la que George se estaba dirigiendo a ella para hacerla ver como la responsable de lo que estaba ocurriendo con Logan, sin embargo, alterarse y reclamar no era una reacción inteligente, no para lo que ella siempre ha procurado mostrarle. Ser una mujer comprensiva, colaboradora y conformista con las decisioens de su esposo, fue algo que le aconsejaron su madre y Anne de Gautier, consejo que hasta ese día había dado buenos resultados, tanto que George no le negaba nada, a excepción de la posibilidad de que Logan recibiera formación en casa.

George pese a cuidar mucho la identidad de Logan, permite que vaya a un instituto exclusivo, donde solo va un grupo reducido de niños, cuyos padres son figuras públicas reconocidas y cuidan que los relacionen con ellos, se preocupa por proteger a Logan de los ataques o el asedio de personas imprudentes, por eso hasta ese día no se había permitido mostrarse en publico con él. No obstante ello, es partidario de que su hijo debe relacionarse con otros para fortalecer su carácter y motivarse a aprender.

George accedió a la adopción de Logan solo porque Nadia insistió en ello, dado que no puede tener hijos, pese a ser una mujer muy joven.

Nadia llevada por otra grandiosa idea de Anne de Gautier ella le insistió a George para que aprobara la adopción. Anne le dijo que un hijo iba a fortalecer el matrimonio, y los afianzaría. Cuatro años han transcurrido desde que se casaron, y en ese tiempo no habían tenido problema alguno que los llevara aun conflicto. Pese a sentirse aburrida de la vida tan monotona que lleva porque George pasa mucho tiempo trabajando y las pocas actividades que ella realiza como primera dama no la llenan, tampoco el hecho de ser madre ha podido darle motivación, lo que la lleva a sentirse como si cargara con un peso que pareciera no soportar, pero por comodidad y no perder todo lo que tiene con George se obliga día a día a mantener, así sienta que con ello se le estaba yendo la vida. Llevaban una vida frívola, carente de amor, inclusive hasta por Logan, no lo maltrata pero tampoco siente amor por él, y por George menos, para ese moemnto ya ni sabía que sentía por él.

¿Amor por George? Le ha tocado fingirlo, no siente el amor que creía sentir por él. quien pese a ser un hombre atractivo, no le genera ilusión alguna porque siempre ha sido un hombre frío con ella, atento pero con una frialdad que no la motiva más allá que hacerle insinuaciones para que le regale unos minutos de sexo, un sexo que no tiene la explosión propia que resulta de estar con quien más se ama o mínimo con quien genera revoluciones hormonales provocadora de órgasmos alucinante. Ni eso ha tenido su matrimonio, pero tales deficienicas han sido compensadas con todos los lujos que ser su esposa le ha ido aportando.

Si se analiza a fondo, Nadia lleva un vida triste. Guarda la esperanza de que cuando pase el siguiente periodo presidencial que seguro él ganará, ella tendrá más atención de su parte y con ello pueda proponerle trabajar por salvar la relación, porque en realidad el problema de fondo de la perfecta relación que aparentan tener es porque George no le presta atención sino para las cuestioens básica y para estar a su lado cuando se deban mostrar publicamente como la pareja ejemplar. De resto, ha llegado a sentirse como una muñeca decorativa.

Nadia, ahora con mucha más madurez comprendió que Anne solo la preparó para ser la mujer decorativa de su hijo. Le enoja reconocerlo, pero no por eso tiene intención de abandonar el lugar que se ha ganado a pulso esos cuatro años. No todos los días se consigue a una suegra que la apoye tanto, al punto de preocuparse por su bienestar y ayudarla a espantar a cualquier mujer que amenace con alterar la paz que hay en su relación.

De Anne aprendió como actuar en esas situaciones de alerta. Ha logrado que George despida a dos de sus secretarias por creerlas coquetas, cuida mucho que él ponga su atención en nada más que no sea ella, Logan y el trabajo al que ha estado llamado a atender en su rol de presidente, lo que según su percepción no da para que él considere desviarse y considerar mirar con otros ojos a cualquier otra mujer que no sea ella.

—Llegado el momento te informo si es necesario que me acompañes, pero te advierto algo, con Logan presentando esos problemas no lo creo conveniente —le dijo George firme y comenzó a probar de su comida.

—Pero sería un par de horas o días —se quejó Nadia.

—En un par de horas puede ocurrir una tragedía —expresó trágico—. Preocupate por lo que debe ser importante apra tí.

—Y lo hago, cuidar de ambos es lo que he hecho en todos estos años —comentó sintiendose ofendida.

—Pues tendras que esforzarte un pcoo más para que nuestro hijo mejore y no sienta la falta de ambos, organiza el horario que te dije, has una planificación de actividades y las discutimos en la noche.

—¿Incluyo en ellas ratos de intimidad entre ambos? —se atrevió a preguntarle porque era algo de lo que ni siquiera hablaban.

—No creo necesario incluir en una planificación las horas y días en los que quieras tener sexo —respondió grotesco.

Nadia se mordió el labio para no caer en una discusión con él por algo que no era para ser discutido allí, asomó la idea porque pensó que él también estaba necesitando de esos momentos de relajación con más frecuencia de la que los tenían.

—Cierto, eso no es de incluirse en ninguna agenda, solo que estás tan ocupado que nunca tienes espacio ni siquiera para atender a tu esposa —le dijo ella y se incorporó de la silla con elegancia, pero en una actitud que demostraba enfado, inconformidad por la falta de consdieración de él—. Nos vemos en casa.

No la detuvo, la vio alejarse y decidió no darle importancia a su reclamo. Para George estaba sobreentendido que ella había asumido ese matrimonio con las consecuencias propias de haber llegado a él sin amor. Nadia nunca fue engañada por él, siempre supo que él no se estaba casando por amor, que ella esperara atención primordial era aspirar a más de lo que él era capaz de ofrecerle, y no estaba dispuesto a ceder por hacer algo que estaba en contra de sus deseos.

—Permiso, presidente —Cecil se atrevió a ingresar al comedo

—Adelante 1accedió George mirándola.

—Voy saliendo a la sala de juntas, no sé si quiere que retrace la reunión por una hora más mientras usted reposa de su almuerzo —propuso la abogada.

—No, no lo hagas, ya voy a lavarme los dientes y estaré ahí cuando mucho cinco minutos tarde, no es necesario retrasar el programa de hoy —le dijo serio.

—Perfecto, me iré adelantando —anunció su asistente—. Buen provecho.

Adoptando su rol de lider, George decidió olvidar la breve discusión que tuvo con Nadia y cualquier otro problema familiar, se tomó un sorbo de agua y continuó comiendo otros dos bocados, y luego miró su reloj, deóun cuarto de su comida y se fue a su despacho.

Mientras miraba su reflejo en el espejo suspendido al frente del lavado, recordó a Chloe y sintió odio, un odio que no ha superado en todos esos años.

«¡Qué descaro el de Nadia pedirme intimidad cuando no tengo disposición ni siquiera a ser feliz!» dijo en su mente con amargura.

Era consciente que Nadia no reclamaba por la ausencia de sexo, porque lo tenían, aunque no con la frecuencia y con el toque de romanticismo que tal vez esperaba obtener de él. No le nace ser cariñoso ni romántico, y no se molesta en esforzarse por ello.

Con la traición de Chloe murió el George romantico y atento, ese que era muy pendiente de los detalles, que hacía todo por complacerla en todos los aspectos, sobre todo en la intimidad. Se niega a volver a ese punto, prefiere ser el hombre que ha sido en ese tiempo así ninguna otra mujer lo volverá a traicionar.