AMOR DE MILLONES

Afinación

¡¡Amigos amigos! Dejando a un lado los negocios ...

                                                                        $♤$♤$♤$♤$♤$♤$

En Golden Esperanza ya había amanecido e Izana y Afonso aún estaban despiertos. Con el cuerpo ya anestesiado y la cabeza un poco volteada, pero se encontraban muy bien. Después de la noche anterior de comida italiana y muchas pollas entre los dos, ambos tuvieron un momento de reflexión, un momento de lógica y de encuentro contigo mismo. Afonso finalmente entendió lo que Izana quería mostrar con el beso, y lo tomó sin cuaderno y comenzó a dibujar un nuevo proyecto, de la nada, que hizo a Izana muy feliz. Encontró lo que faltaba, corrigió los errores y fallas mirando los anteriores y solo entonces, finalmente, consiguió lo que quería, llegó a la perfección.

- ¡Terminé! - dijo Afonso emocionado

- Me di cuenta. ¿Como se siente? - Pregunta de Izana

- Satisfecho. completo y brillante. - Responde Alfonso.

- Buen Alfonso, ahora escanea y manda ya sabes donde.

- No lo sé, me siento inseguro. - Ventilaciones Afonso

- Date prisa Afonso, tu proyecto acaba de salir de forma. Ir. - Izana anima

- ¿Está seguro? - pregunta Alfonso

- ¡Si, ve! Envíe su proyecto pronto. - Termina Izana

Alfonso la mira a los ojos y se llena de genuina motivación sincera y positiva, y decide seguir su consejo. Toma su proyecto y comienza a escanear todo en PDF, hoja por hoja, pero luego recuerda que también necesita una diapositiva, y Zana dice que lo ayudará con eso. Y esa noche de sábado, aunque fuera común para otros, para Zana y Afonso, era un día para correr riesgos, para dar los primeros pasos hacia sus sueños. Y a las 03:00 de la mañana terminaron todo, y la señorita Flores, que estaba exhausta y muy loca, volvió a dormir a su departamento. Donde apenas podía levantarse, y Guerra le preguntó si no quería quedarse a dormir ahí, ya que su departamento estaba tan cerca, pero ella siempre estuvo correcta y erguida, le agradeció su amabilidad, pero dijo que no puede. duerme lejos del rincón privado, y él entiende muy bien lo que era, y la escolta hasta su puerta.

- Hoy fue una noche de grandes momentos. Diste tu primer paso. - Celebra a Izana

- Con tu aliento. - dice Alfonso levantando su cuello largo

- No. Fue con tu valentía y actitud de Alfonso. Porque si no fuera por eso, no habrías presentado tu proyecto. -Izana habla mirándolo

- Aún así gracias Izana. - Gracias Afonso

- No quieres a Alfonso. ¡Buenas noches! - Responde Izana ya levantándose.

- ¡Buenas noches! - Alfonso habla

Afonso cierra la puerta y mira el lío que hizo con sus dibujos por la habitación, y se echa a reír, imaginando que sus padres estaban viendo ese lío ahora, seguro que dieron una linda charla, pero a él no le importó, estaba feliz. Así que ya mareado, el niño se tira en el sofá y toma su mano para apagar el cuaderno. Pero antes de colgar, aparece un nuevo mensaje de la nada y lo abre para ver de quién es. Cuando se da cuenta de la fuente, rápidamente se levanta y abre el mensaje que decía.

======================================================

@ Javiernegocios e inversiones 

 Estimado Afonso Guerra Mastberon Analizamos tu proyecto y estamos interesados. Queremos tener la oportunidad de conocerte en persona para hablar sobre tu negocio. Póngase en contacto con nosotros este lunes a las 14:00 en nuestra sede en la dirección indicada. Con impaciencia Lauriano Yndickrs ======================================================= 

Alfonso, que estaba totalmente cansado y somnoliento, apenas podía contenerse con tanta felicidad. Estaba extasiado al saber que estaban interesados en su sueño, que a partir de ahora podía ser lo que quisiera, una gran oportunidad para cumplir su gran deseo de libertad, su propio camino lejos de la sombra de su padre. A partir de entonces, ya no sería Afonso Guerra, sino Afonso Mastberon.

$♤$ Una semana después♤$♤$♤$♤$♤$♤$♤$♤$♤$

Después de una semana buscando trabajo y también haciendo muchos trabajos rápidos. Izana trató de llevarse bien pero siempre hizo una bifurcación, después de todo, sus padres nunca la dejaban trabajar afuera, solo con números. Así que no la ayudó con agilidad y flexibilidad, entristeciéndola. Como chica independiente, solo le iba bien dentro de la universidad como siempre quiso, pero no fuera de ella. Zana ya intentó Pet Shop fue arrastrada por el perro por perros kkkk. Intentó como camarera, olvidó a un cliente, probó en la cocina al chef no le gustó el cumplido que recibió de su esposo sobre una salsa que creó Izana. En la pizzería dejó una pizza de pepperoni, en la tienda, hizo un comentario para agradar y el cliente se lo llevó al personal, y así sucesivamente. Y todos los días, cuando llegaba de sus decepcionantes intentos en el edificio de la universidad para entrar a su apartamento, Afonso siempre estaba allí con una taza de capuchino que le encantaba para consolarla.

- Aparentemente el día era nuevo y malo.

- Sí.

- Ven a almorzar conmigo.

- Mejor no.

- ¿Por qué?

- Como vecino, solo te estoy haciendo daño.

- Kkkk me encanta tu compañía Izana, tenías que irte y ser negativa.

- No lo sé.

- Deja de ser terco, ven pronto.

- ¡Me voy a dormir, Alfonso!

- Hice gofres de chocolate.

- ¡¡¡¡MENTIR!!!!

- Entonces, ¿te vas a negar?

- Claro que no.

- Entra en.

- ¿Puedo tomar una ducha? Tengo grasa de pasta salada que se fríe en mi cuerpo.

- ¡No se demore! - advierte Alfonso.

- Está bien. - dice Izana sonriendo.

                                                             $♤$♤$♤$♤$♤$♤$

En Pronyanza, en la mansión Guerra, hay una gran fiesta privada. Otro más entre varios que la familia está acostumbrada a hacer, y como siempre Duna solo miraba a la pareja de lejos, con envidia y ansiedad, ya imaginándose como una Guerra, vestida todo exquisita y joya, bebiendo champagne acompañada de empleados, mimos y mucho. de dinero para comprar lo que quiera. Cómo se comportaba cuando estaba en el pedestal como una bella y maravillosa millonaria. Rodeado de gente de gran riqueza, escudos de armas y fama.

- Mi querida joya que creé tanto cini una dama, no me defraudes.

- Eres mi única oportunidad de convertirme en millonario y salir de esta vida de institutriz.

- Gánate el corazón de Afonso Guerra, hija mía. Conquistarlo.

- Usa las armas que quieras, pero cásate con él pronto.

Duna Zabreine siempre ha sido una mujer fuerte y decidida, una mujer fiel a sus ideales, ha pasado por muchas cosas en su vida, se especializó en psicología y pedagogía. Pero nunca cumplió con ninguno de sus deberes, porque lo que de verdad quería era ser una mujer grande casada con un millonario exitoso y que estuviera completamente loca por ella, tener siempre todo a sus pies. Conoció a muchas figuras importantes en su vida, pero ninguna quería realmente tener nada que ver con ella, porque era complaciente y sin ideales. Hasta que quedó embarazada de Mikaela, y al ver que no tenía adónde correr, intentó regresar a casa, pero su destino no era el más amistoso, por lo que decidió correr tras lo último en el mundo que odiaba hacer, que era Trabaja.

- ¡Señorita Zabreine!

- ¡Bueno, no señor!

- Y en serio amigo, creo que tu hija no será una buena profesional jajaja.

Duna se aleja de ellos y se va muriendo de rabia, esos millonarios envidiosos, solo porque tienen empresas y maquillaje y cine creen que pueden decir lo que quieran. Duna decide volver a su habitación, porque esa fiesta y solo para jefes, no tenía obligación de quedarse allí. Pero antes de entrar a su habitación, dijo.

- Verás quiénes son los Zabreine. - Pregunte a Dune

- ¿Has estado hablando con tu hija Mikaela?

- Sí.

- ¿Y has tenido noticias de Afonso?

- Buen señor Guerra, mi hija le habla poco por sus estudios que están muy sobrecargados, pero por lo poco que me contó está dando mucho en la universidad.

- ¡¿De verdad?!

- Sí. Es un estudiante brillante.

- Qué bueno escuchar eso, Srta. Zabreine.

- ¿No ha hablado con él señor Guerra?

- Ha estado muy ocupado como dijiste. Muchos estudios.

- Verdad.

- Bueno, me voy, necesito hablar de negocios con los emprendedores.

- Está bien, Sr. War.

- Tómate la noche para divertirte. Después de todo, su hija también está en la universidad, disfruta del resto.

- Gracias Sr. Guerra. - Gracias Dune.

La señorita Zabreine le lanza una mirada burlona, como si no creyera ni una sola palabra de lo que le dice, como si suena falso solo porque ella era ama de llaves. Aun así, sonríe profesionalmente a los invitados, hasta que dos camionetas pasen frente a ti para enojar aún más tu noche.

- Buenas noches Dune Zabreine.

- Buenas noches, señorita Landergrum.

- Nos enteramos de que su hija está en la universidad.

- Sí.

- ¿En qué zona?

- Ciencias Contables.

- ¡Guau! ¡¿números?!

- ¿Estás seguro de que hay dinero tirado Dune?

- No parece que le guste trabajar con todo su aliento.

- Parece más una socialité o Patricinha.

- Permiso.

Después de su baño, Izana usa un atuendo cómodo y deportivo porque después de la cena quiere descansar, ya que el día fue bastante agotador. Cuando termina y se prepara, recuerda que había preparado Tacos para su cena, y como fue invitada por su vecina a compartir una cena, decidió retribuir con su cocina también. Ella va al frigorífico y lo saca de la olla y lo lleva a las microindas a calentar, y luego lo pone en una bandeja para llevar. En ese momento suena el celular y ella deja la bandeja sobre la mesa y va a contestar.

- ¡Izana Flores, no! - dice Izana ya sabiendo quien era

- Buenas noches mi florecilla, ¿cómo estás?

- Estoy bien, mi tía favorita.

- Kkkk ama esa frase.

- Los extraño a ustedes.

- Nosotros también, ¿y ya cenaste?

- Ya es mi vida.

- ¿Qué vas a cenar?

- Hice tacos tía Guadalupe.

- Estás cocinando, que maravilla mi flor.

- Sí, tuve un gran maestro.

- Kkkk, qué maravilloso saber que no estás comiendo esta basura de bares y restaurantes sin atención médica.

- Yo pienso lo mismo, tía.

- Vamos, va mi cena de flores. Solo quería escuchar tu voz antes de dormir.

-Ok tía, buenas noches.

- Buenas noches hija mía y buena cena.

- Gracias.

Izana apaga su teléfono celular y mira su bandeja de tacos y comienza a sonreír, así que guarda su celular y toma su bandeja y la lleva al departamento de Afonso.

                                                             $♤$♤$♤$♤$♤$♤$

Aún en Golden Hope, a unos metros de la universidad, Mikaela estaba sentada en una silla con los ojos totalmente asustados con tanta gente balanceándose de un lado a otro. Sí, la rubia por primera vez fue invitada por sus compañeras de piso a un evento ordinario en una universidad privada, fue llevada a una fiesta. Acostumbrada a ropa y marcas chic, champagnes y canapés, en lugares lujosos y rodeada de sirvientes de un lado a otro, música clásica y gente rica e importante, ese lugar para ella era aterrador, como en una película de terror. Donde no soltaría su rincón por un millón de dólares.

- ¡Vamos Mikaela, ven a bailar! - Flame Baby

- De ninguna manera, este lugar está rodeado de varios tipos de contaminación por bacterias. - replica Mikaela

- ¿Qué es Mikaela, nunca has ido a una fiesta? - pregunta Maria Heloisa

- ¿Esto es una fiesta? Lo uso aquí y el infierno mismo, sí. - Respuestas Mikaela

- Le prometiste a Mika. - Habla Lucía

- Pero que hay de ... - Responde Mikaela

- ¡Ven luego! - Flame Baby

- ¡No! - Respuestas Mikaela

- Toma al menos una copa. - dice Lucía

- ¡No! - Respuestas Mikaela

- Come algo entonces. - Habla bebé

- ¡No! - Respuestas Mikaela

- Entonces te pillarán, aburrido. - dice María Heloisa enojada.

- ¡Anda tu! - Respuestas Mikaela

- Mira tu ... María Heloisa amenaza.

- Quédate ahí entonces, Patricia, bailaremos y luego volveremos. - dice Lucía

- Bailemos pronto, y dejad que este fastidioso botín de placer ahí. - responde Maria Heloisa.

- ¿Me dejarás solo aquí? - pregunta Mikaela

- Estamos en ese espacio bailando. Cualquier cosa, Levanta ese trasero y camina hacia nosotros. - Esta es Lucía.

- O si quieres pedir algo o comer, llama al camarero. - Comentarios Maria Heloisa.

- Pero aquí no hay camarero. - pregunta Mikaela.

- ¡Guau y bien! - Ríe Maria Heloisa.

- No es divertido. - replica Mikaela.

- Sin camarero, se gira para comer o beber. - Habla bebé.

- O levanta tu trasero de esa silla y camina hacia nosotros. - Esta es Lucía.

Mikaela mira cómo van a bailar, y se encoge aterrorizada de que un extraño se acerque a ella, y se queda allí, totalmente atrapada en la fiesta universitaria de Lord Elite y en una de sus casas de hermandad.

                                                             $♤$♤$♤$♤$♤$♤$

Una vez en el apartamento de Afonso, Izana entra con una bandeja en la mano, lo que hace que Afonso parezca sorprendido. Ella entra quitándose los zapatos y colocándolos en la repisa, como ya sabe lo limpio que está, y entra descalza a su habitación, colocando la bandeja junto a los gofres. Los dos se sientan en el sofá y él finalmente le pregunta qué había allí, ella le sonríe y le quita la tapa sonriendo.

- Como siempre nos preparas bocadillos, hoy quería colaborar. - Esta es Izana.

- ¡¡¡Maldita sea, son tacos !!! - dice Alfonso con agua en la boca

- ¿Sí, lo sabes? - pregunta Izana.

- Sí. Me encanta comer tacos. ¿Dónde lo compraste? - pregunta Alfonso.

- Yo no compré. Yo lo preparé. - Responde Izana.

- ¿Tu hiciste eso? ¿Voy a conocer las habilidades culinarias de la señorita Flores? - dice Alfonso.

- Por supuesto, póngase cómodo, Sr. Guerra. - dice Izana sonriendo.

Afonso va con el sabor del gas a disfrutar de los tacos, mientras Izana ataca los waffles que preparaba Afonso, los dos parecían dos niños comiendo y ensuciándose, donde se reían el uno del otro. Alfonso elogia los tacos que ha preparado Izana y comenta que hay algo diferente en ellos, ella pregunta si estaban malos. Pero él dice que no, es divino, como si fuera una receta secreta tipo tacos. Zana al escuchar eso comienza a sonreír y se siente congestionada, y comienza a hablar.

- ¿Cómo es tu trabajo en la empresa? - pregunta Izana.

- Está yendo bien. - Responde Alfonso.

- No dije que pronto obtendrías tu independencia. - comenta Izana.

- Sí. Si no fuera por ti, mi proyecto nunca sería aceptado. - Este es Alfonso.

- Podría ser. Tú y un chico brillante. - Alabado sea Izana.

- ¿Me estás diciendo esto por los waffles? - pregunta Alfonso curioso.

- Nooo ... ¡pero claro que no! - Responde Izana con cara siniestra.

- Pero mira que cara, jajaja. - Ríe Afonso

- Kkkk lo confieso, me encantan tus gofres. Pero realmente eres un hombre brillante. Afonso.- Alaba a Izana.

- ¡Gracias! -Gracias Afonso.

                                                                       $♤$♤$♤$♤$♤$♤$

En la fiesta de la hermandad, Mikaela todavía estaba sentada en la misma esquina enfurruñada, mirando a sus compañeros bailar desde lejos. Como siempre, observaba la ropa de todos los que estaban en la fiesta, ropa, zapatos, complementos, incluso maquillaje y peinado, porque no dejaba de ponerle faltas a las cosas. Y alu sola, pensó para sí misma lo arrepentida que estaba por haber aceptado venir a esta fiesta con ella, con tanta gente desordenada y sin un comportamiento ético y elegante. Y murmuró en su silla queriendo irse a casa y quedarse en su cama, lo cual era desagradable pero era suyo.

- Cómo lograron convencerme de que viniera a esta fiesta tan sin clases. - replica Mikaela.

- Debe ser porque querías venir con ellos. - Responde un extraño.

- Nadie te preguntó nada. - Responde Mikaela.

- Pero respondí. - Habla el extraño.

- No te pregunté nada. - replica Mikaela.

- ¿Y yo con eso? - El extraño responde de nuevo.

Mikaela se enfurece por la respuesta de un entrometido, grosero y petulante. Y decide dar una respuesta al mismo tiempo y cuando se da la vuelta reconoce a la persona, y su enfado sale de la nada, quizás porque tenía dos copas de champagne en las manos, muy frías. El rubio lo mira con sorpresa y él le entrega uno de los vasos y se sienta a su lado, y los dos comienzan a hablar.

- ¿Qué haces aquí, en esta fiesta? - pregunta Mukaela

- ¡Es mi cumpleaños, hora! - Responde Peter.

- ¿El cumpleañero y tú? - dice Mikaela asustada

- Sí, realmente soy yo. - Confirma Peter.

- Por eso la fiesta es de tan mal gusto, jajaja. - Ríe Mikaela.

- ¡Gracias venenoso! ¿Has expulsado todo? - Ironiza a Peter.

Mikaela está tan horrorizada por su actitud que no responde nada por respeto a su día. Y después de diez copas de champagne, totalmente fuera de sí, escucha una canción y llama a Pedro para que baile con ella, lo toma del brazo y lo arrastra al espacio de baile. Después de "Don Omar - Zumba" le pide a su colega que le enseñe a bailar ese estilo de música.

- ¿No sabes bailar zumba? - pregunta Peter sorprendido

- Solo ballet, vals y tango. - Respuestas Mikaela

- Perdón. - Ironiza a Peter.

- Enséñame pronto. - dijo Mikaela eufórica

- Está bien, suelta el brazo y el hombro. - Habla Pedro enseñando

- OK. -Acuerda Mikaela

- Ahora mueva su cintura. - Ayuda a Peter.

- Yo no consigo. - Comentarios de Mikaela

- Sí tu puedes. Déjame ver. - Motiva a Peter

- Me rindo. - ventila Mikaela

- Dijiste que bailas ballet, vals y tango, ¿verdad? - pregunta Peter

- Sí. - Responde Mikaela.

- Bueno, entonces quiero que bailes ballet y tango al mismo tiempo. - Comentarios Peter

- ¿Como asi? - pregunta Mikaela

- Libera completamente tu cuerpo como en el ballet, pero con la garra y la sensualidad del tango. - Comenta Peter.

- Lo intentaré, ¿y entonces? - pregunta Mikaela.

- ¡Eso mismo! - Alabado sea Peter.

- Es extraño lo que estoy haciendo jajaja. - dice Mikaela riendo

- Ahora viene el segundo paso. -Nótese Peter

- ¡¿Segundo paso?! - pregunta Mikaela

Pero él le sonríe a Mikaela, le pone la mano en la cintura y la empuja a bailar dejándola sorprendida. El rubio lo mira a los ojos y se siente confiado en él, y comienza a bailar como dijo, siguiendo sus instrucciones. Los dos comenzaron a reunirse en la fiesta, atrayendo la atención de todos en la fiesta, atrayendo la admiración de una niña tan gruñona y arrogante que se divertía en la fiesta como un ser humano normal. Pedro le da la vuelta y lanza el baile al son de y los dos bailarines en este público y contagioso lugar en plena armonía. De ahí que María Heloisa, Lucía y Baby quedaran encantadas con la verdadera Mikaela que estaba allí con la fiesta, una chica común, alegre y muy feliz y divertida.

- Mira, Patricinha no está enferma. - Comentarios Maria Heloisa.

- Parece que la arrogante rubia es en realidad una chica normal y divertida. - Lucía

- Necesitamos deshacernos de él con más frecuencia. - Juega Baby haciendo reír a todos.