Me da igual el dinero que tenga y que pueda permitirme todo lo que me dé la puta gana, nunca me acostumbraré a fiestas abarrotadas de ricos egoístas, que fingen preocuparse por los demás además de por ellos mismos. Entiendo que es la fiesta de cumpleaños de uno de los socios más importantes de Alejandro, pero no entiendo por qué debemos estar aquí. Prefiero pasar la noche en la habitación del hotel con comida mientras veo algún programa aburrido y, a juzgar por la cara de Addison, ella también prefiere eso. La exquisita y aburrida música que ponían me hará dormir en cualquier momento. No sé cuánto vino más tengo que beber para aguantar esta aburrida fiesta, y ni siquiera sé si han pasado 2 horas desde su comienzo. Addison y yo estábamos visiblemente desinteresados en todo lo que sucedía