Después de pasear por la ciudad, mis pensamientos empezaron a enderezarse. Sabía que no podía confiar en Zachario, pero él no era una amenaza especial para mi amado. De hecho, podría ser un aliado temporal para mí. Aceptaré encontrarme un novio, y después del espectáculo, que yo monte sin querer, de esta mañana, estaba segura de que Zachario creería en mi odio al Príncipe. Así calmaré su guardia y trataré de saber lo más posible sobre la familia de Iván. Especialmente sobre su hermana. Tengo que conseguir su confianza y aun mejor ser su amiga. En la cena le pregunté al gobernador como debería actuar en la fiesta. Estaba muy contento de que me hubiera calmado y, como una chica inteligente, decidiera planear y aceptar mi destino. Dijo que no tenía mucho tiempo, porque debería casarme antes