Desunidos

Capitulo 3

-¿Y si me voy lejos con mi hijo?;  no se si soy capaz de verlo y mucho menos sabiendo que este era nuestro sueño, es decir tener hijos...

-Julia este niño te necesita - el bebé abre la boca buscando de su madre - ¿quieres que nos vayamos juntas en el avión de Pablo?.

-Carla yo...no creo ir - toma a su hijo y lo empieza a alimentar.

En la recepción del hospital...

-Estoy buscando a la señora Julia de Escallón. -Habla con impaciencia.

-En estos momentos tiene visitas y no lo puede recibir, esta con su esposo -explica la enfermera.

-Eso es imposible, él esposo de la señora Escallón soy yo, mire -saca una credencial donde están sus datos.

-En ese caso sígame - va nervioso con flores y cosas para su hijo. Al entrar a la habitación encuentra a otro hombre dándole un beso a Julia.

-¿Que esta pasando aquí? - Julia se aparta de Alfredo y la voz potente de su esposo llena el lugar. Se acerca a la morena de manera posesiva.

-Pablo - la enfermera desaparece y Julia se queda callada. La morena tiene en sus brazos al niño, lo cubre contra su pecho en modo de protección - voy a comprar algo de comer, ¿quieres algo Julss?.

-Si - su voz demuestra nerviosismo - tengo sed y hambre, alimentar al niño me deja así.

-¿No me haz respondido quien es el? -lo mira con ira.

-No tengo porque hacerlo, lo que había entre nosotros se acabo hace mucho porque así lo quisiste.

-Eres mi mujer -deja las cosas en la mesa - no voy a hablar de nosotros frente a extraños-se acerca a ella - quiero conocer a NUESTRO hijo, me entere que le pusiste Julian, como lo habíamos hablado hace un tiempo.

-Yo me retiro -hace gesto de besarla, Julia voltea su rostro y se despide de su abogado visiblemente nerviosa.

-¿Puedo? -su tono de voz se suaviza y se acerca de mas a la morena, ella se estremece y no puede ocultarlo cosa que a Pablo le agrada, él también esta nervioso.

-¿Cuando llegaste? - pone al niño en una posición para que Pablo pueda verlo, pero sin soltarlo -cuidado, nació hace poco.

-Lo sé, llegue hace un par de horas y vine directo a verte... a verlos - sonríe al bebé, quien al oírlo abre los ojos.

-¡Oh Dios mío! - besa la frente del pequeño.

-¿Que pasa? -la mira hipnotizado y humedeciendo los labios.

-Te reconoce, es extraño porque...-traga saliva - tu no estuviste presente en el embarazo, y tiene esta reacción ante ti.

-Porque soy su padre, y desde antes de engendrarlo siempre hemos sido unidos tu y yo - la besa sin que ella tenga tiempo a reaccionar, la morena esta sensible con lo cual corresponde a su beso, el cual demuestra necesidad posesión amor, deseo; se separan cuando su primogénito llora. Pablo sonríe al terminar el beso, ella se regaña por ser tan sensible a él.

-Pañales -susurra, recomponiéndose del beso.

-¿Que? -la mira encantado.

-El bebé necesita pañales, ¿puedes comprarle? - él asiente y de paso tráeme algo de comer, tu hermana se ha tardado mucho -se sonroja, él da un beso a su hijo, Julia se aparta.

Un momento después Pablo entra a la habitación luego de mandar a su hermana al hotel y coordinar su regreso a Suramérica, sabe que tiene una conversación pendiente con Julia desde ya planea como hacer para que la morena lo perdone, hay cosas que no le cuadran como porqué Santiago no ha vuelto a las empresas y Julia que hace libre si se supone estaría en prisión el resto de su vida, y no menos importante su hermana sabia todo. Se asusta al entrar y ver la habitación vacía, se alarma y su primer pensamiento es que Julia se escapo de él, reniega cuando escucha un quejido.

-Julia mi amor - golpea la puerta del baño - ¿estas bien?.

-No, entra -pide en un hilo de voz.

-¿Que tienes y donde esta Julian? - se acerca para ayudarla.

-Tengo un dolor bajito, la doctora me dijo que es normal pues hace menos de 48 horas tuve al bebé y hasta que me recupere puedo presentar dolor - lo toma de la mano - a Julian le están haciendo un examen y ya lo traen. Ayúdame a ponerme la pijama.

-Bueno -suspira aliviado - te ayudo. ¿Cómo fue el parto?, cuéntame todo -pide mientras la ayuda a acomodarse de nuevo en la cama.

-Antes que nada -lo toma de las manos - júrame por nuestro hijo que no vas a hacer nada, la justicia ya se esta encargando de todo - él asiente y pone la silla al lado de la cama - El día que murió Paola - toma aire - tu y yo peleamos pues yo creía que tu me eras infiel con ella, yo salí porque necesitaba aire y me cruce con Santiago - él frunce el ceño - él siempre ha estado tras de mi, yo no quería pero él me empezó a hablar de sus sentimientos y me ofreció todo su dinero para que te dejara y me fuera con él - Pablo se levanta bruscamente - yo no acepte pues te amaba - habla en pasado - siempre lo rechace, Pablo no se como pero abuso de mi yo perdí el conocimiento me desperté desnuda en su cama -llora y su marido la toma del rostro limpia sus lagrimas - no recuerdo nada, después de eso fui a nuestra habitación no te encontré me bañe y cruce por la recamara donde estaba el cuerpo sin vida de Paola el resto tu lo sabes...Santiago declaro eso porque lo amenace con decirte de su abuso, le dije que tu...-rompe en llanto.

-Perdóname mi amor -la toma en sus brazos - Santiago se va a arrepentir de meterse contigo, ¿Cómo demostraron tu inocencia?.

-Me hicieron la prueba de la parafina y salió que jamás dispare esa arma, se demostró que Santiago la mato porque ella sabia de sus intención conmigo, lo amenazaba y para no decirte nada, él pagaba una fuerte suma de dinero, Paola vio lo que me hizo -llora - y desencadeno en su muerte.

-Mi amor -ella se suelta.

-No me vuelvas a decir así - lo mira con resentimiento - si te dije esto es porque quiero que te sientes culpable por abandonarme, por no responder mis cartas -se limpia las lagrimas - por favor dame el divorcio a Julian tu lo puedes ver cuando quieras, yo voy a volver a Bogotá, se cuanta ilusión te hace este bebé y lo entiendo pero mi amor...lo mataste.

-Julia yo...¿es por el verdad? -se limpia una lagrima.

-Alfredo es un hombre maravilloso -enarca una ceja - yo le debo mi libertad.

-No Julia, tu no me puedes haber dejado de amar - habla desesperado.