Pasamos parte de la tarde haciendo un plan, porque estaba claro que yo no era tonta y todos los años que fui a la universidad debían servir de algo, aunque hace mucho tiempo que no usaba demasiado mi cerebro y el plan fue idea de Nathaniel, yo estaba por llamar a mi abogado y ver que podía hacer en contra de ellos.
Pero está vez no iba a caer en mentiras y quería que ellos pagaran por lo que me estaban haciendo, el jodido Sidney se podía ir a su barrio mediocre del que salió por infiel y oportunista; a Ana no iba a dejarla volver a la empresa, si ella decía que yo era una persona mala y vengativa, pues eso iba a ser.
–Tengo que regresar a la empresa y tomar el control de nuevo –aseguré para finalizar.
–Y para eso necesitas la ayuda de los socios –mencionó –. Tienes el mayor porcentaje de las acciones, pero sabes que es mejor cuando es unánime, tenemos que investigar y encontrarlos de inmediato, yo me encargo de eso, no te preocupes.
–Primero recuperar la empresa y luego deshacerme del jodido de Sidney y Ana.
–Hablando de Sidney tienes que regresar a tu casa, no puede sospechar nada.
–Creo que podría ir a casa de mis padres –mencioné –. Eso sería mejor y estaría a salvo.
–No vas a regresar a esa casa –me advirtió –. Seguramente Dalila está involucrada en todo esto y mira que esa mujer te trató muy mal todos estos años, además, Ana está viviendo ahí, no puedes arriesgarte a regresar.
En eso tiene razón, no puedo regresar con mis padres, pero ahora tengo miedo de regresar a casa.
–Tienes que fingir ser la mujer más afortunada del mundo con Sidney, casada y feliz mientras lo sacas de la empresa, conejita –explicó –. Así él no se dará cuenta en qué momento lo dejaste sin nada.
–Creo que sí puedo hacerlo.
Recordé que Sidney llega tarde a casa y no tenemos se.xo desde hace un tiempo, casi desde que su madre está viviendo con nosotros, es que no nos deja en paz y al final casi desistimos o yo lo hice, porque siempre soy yo quien lo busca.
–Bien, ahora ve, sé la esposa hermosa que da la vida por ese hombre y mañana te escribo para empezar nuestro plan.
–¿Y si nos descubren?
–Entonces le dejas ir encima a todo el departamento legal, cariño, tienes poder y dinero, eso nadie lo va a cambiar.
Busque de nuevo al chófer y regrese a la casa, tenía que actuar con normalidad, solo fui a ver a mi primo, pasé comprando las medicinas de la señora Norton porque obviamente no soy una asesina para dejarla sin medicina y aproveche para llamar y que me enviarán una enfermera para mañana, mi querida suegra se tendría que acostumbrar porque su criada personal, se había acabado.
La señora Norton estaba viendo televisión cuando regrese, fui directo a la cocina a dejar las cosas, esperaba a que no hablará, como si eso fuera posible.
–Llegaste tarde –escupió –. ¿Acaso la farmacia quedaba del otro lado de la ciudad?
–Ah, tenía que hacer otras compras –expliqué –. No se preocupe la cena estará lista a la hora de siempre.
–¡Me quedé sola por más de una hora! –exclamó –. ¡Me pudo pasar algo y eso sería tu culpa!
No era una niña pequeña, creo que podía quedarse sola un par de horas, pero la soledad era algo que le desagrada bastante aunque a veces pensaba que tenía una satisfacción rara al reclamarme esas cosas.
–Lo lamento, señora Norton.
–Con una disculpa no basta, veremos que dice mi Sidney cuando venga –expresó.
–Señora Norton, no quiere molestar a Sidney con esas cosas, él trabaja todo el día y todavía regresar a recibir quejas, es muy cansado, estoy segura que podemos arreglarlo –expresé –. Qué le parece si le preparó su cena favorita, ¡Cordón Blue! Le parece.
Me miró con desconfianza, no podía negarse al Cordon Blue, la ternera era su carne favorita.
–Está bien, solo para no molestar a Sidney y la próxima vez pide las cosas a domicilio.
–Si, señora Norton, eso haré.
Le preparé su cena, como lo sospeche Sidney no llegó a cenar, seguramente estaba con Ana en algún lugar comiendo y disfrutando, mientras que yo estoy aquí soportando a la versión pobre de Jane Fonda en la película Una suegra de cuidado.
Le dí su medicina, terminé de limpiar la casa y está vez me fui a dormir muy temprano, no estaba segura si hacerlo o no porque siempre espero a que Sidney venga con un su discurso de que está muy cansado y que tuvo mucho trabajo expresando lo mucho que se alegra que esté para cumplir el rol más importante y cuidar a su madre, solo diré que estoy cansada.
Me fui a la cama, pero no pude dormir, estaba cansada, triste y sola, la cabeza me daba vueltas en ese momento que Sidney le dijo a Ana que se iba a deshacer de mí y de pronto sentía que iba a entrar y me iba a clavar un cuchillo en la garganta.
Me agité cuando la puerta se abrió y Sidney entró.
–Te desperté –mencionó.
–Si –bostecé –. Lamento no haberte esperado, estoy muy cansada.
–No te preocupes, ya te dije que no tienes que hacerlo –comentó entrando al baño y luego salió en ropa interior para meterse a la cama –. Descansa, haces mucho aquí.
–Si, gracias, Sidney.
Me dí la vuelta y fingí volver a dormir, estaba muy tensa, no sabía si se daba cuenta, pero no podía fingir tanto, terminé por levantarme parte de la madrugada, él ya estaba durmiendo, me preparé un té y me quedé dormida un poco en sofá de la sala, cuando desperté aún estaba oscuro, así que decidí regresar a la habitación, tengo que seguir siendo la misma persona o se dará cuenta.