La espalda de Daisy golpeó con la puerta mientras James buscaba el pomo para abrirla. Hubo un sonido, como de algo resbalarse, antes de que por fin lo agarrara y la puerta cediera a su peso. Sus ojos se abrieron para mirarlo fijamente antes de la boca de James volviera a caer sobre ella y de que el sonido de la puerta al cerrarse llegara a sus oídos. -Daisy. Un sonido, como el de una súplica. Sus manos recorrieron sus pechos, sus caderas, hasta tomar el dobladillo del vestido para sacarlo. Ansiosa como estaba, se precipitó hacia él con la intención de desnudarlo por completo. Sus dedos se liaron con los botones de su camisa, incapaz de sacarla. Se detuvo, notando que James la observaba mientras lo hacía. Tenía una mirada hambrienta, como si tratara de devorarla. Nunca apartó los ojos