Días después
El tiempo pasa y afortunadamente las cosas resultan bien. Los abuelos, trabajan en la cafetería, donde la abuela cocina y el abuelo ayuda a servir la comida. Yo por mi parte, me encargo de ayudar a limpiar los platos. Por lo que, los tres trabajamos en el mismo lugar y sin tanto caminar o exponernos. En la cafetería, no hemos tenido que preocuparnos por rechazos o algo por el estilo, sino que ha pasado todo lo contrario, las personas aquí son muy buenas y de algún modo, son más con nosotros por haber sido traídos y bien tratados por el presidente. Lo sé porque ya he escuchado rumores donde claramente nos identifican como los pobres que casi nos sacan del hospital.
Sin embargo, ignoró algunos comentarios maliciosos de ser la hija del presidente o novia y me pongo a trabajar
