Die for you

7

"Si me amas hoy te juro que te amaré por toda la vida".♡

-Crystal Upia.

2 de noviembre del 2018.

Narrado por Noah:

El haber dormido con Kira hace una semana fue algo histórico para mí, ademas de que al otro día nos fuimos de viaje a Noruega. Nunca olvidaré nuestra estadía allá, fue magnifico.

Tenía un año en el cual no dormía, el insomnio me consumía y con solo dormir en sus brazos la paz me inundó y dormí como si no existiera mañana. Ese día, cuando abrí mis ojos y vi que tenía su cabeza recostada a mi pecho, no sentí más dolor, por lo menos por un segundo.

Y hoy lo volvimos a repetir. Me pidió que durmiera en su casa hoy. No quería estar sola y no pude decirle que no.

El ver cómo duerme tan tranquila me hace pensar que podría vivir para cuidarla, para velar sus sueños y no me haría falta descansar porque con solo ver su respiración tan lenta y compasa, me siento más que satisfecho.

Observo desde la cama el cielo nublado que envía mensajes de que lloverá y no me quejo realmente, amo que llueva. Al llover siento que el aire se limpia y no solo el aire, si no también yo. Me siento más cómodo conmigo mismo.

Me levanto lo más lento posible y tengo que hacer estrategia para no despertar a Kira y cómo no, me tiene agarrado de la camiseta cómo si creyera que me iré corriendo.

Salgo de la habitación y cruzo el pasillo para ir a la cocina. Encuentro algunos trates sin lavar y me dispongo a limpiar la casa mientras ella duerme. Coloco todos los trates en el fregadero y con una esponja comienzo a limpiar uno a uno. Me tomo mi tiempo limpiando y al mismo tiempo tarareando una canción.

En cuánto termino voy directo a buscar una escoba para barrer la casa. Al terminar de limpiar me coloco en la sala y puedo ver que todo está limpio. Los muebles organizados, el piso brilloso y nada de polvo. Observo luego la cocina y ya al terminar de mi inspección de limpieza, me pongo a hacer el desayuno o caeré muerto del hambre.

Preparo uno huevos fritos, pan tostado, queso y jamón en rodajas y un jugo de chinola o (maracuyá) como lo conocen en otros países.

Los coloco en una bandeja y con ella subo a la habitación de Kira para que reciba un desayuno de una reina a causa de que merece más que eso. Abro la puerta con los pies no queriendo caerme y entro despacio a la habitación, colocando con cuidado la bandeja en la cama. Me siento lentamente en la cama y comienzo a mover el cuerpo de Kira, pero ella no responde. Acaricio su rostro y al parecer esto no la despierta, pero en cuanto toco su cuello abre los ojos a una velocidad sorprendente.

—Odio que me toquen el cuello. —levanto mi cejas confundido por su declaración.

—¿Por qué?

—Porque en la escuela cuando los chicos se me acercaban y querían burlarse de mí, al estar distraída me besaban en el cuello y me molestaba por ello y les gritaba. Ellos asumían que me excitaba el que ellos me besaran el cuello, pero solo es que tengo un trauma y al ellos jugar con eso me recordaba algo que quería olvidar.

Escuchar su declaración me alerta a que tengo que prestar sumamente atención a todo lo que salga de sus labios.

—¿Recuerdas que odio el alcohol verdad?

—Si, ¿por que?

—Era clases de deportes y estábamos practicando volleyball, pues estaba agitada, agotada y con sed, entonces cuando fui a buscar mi botella de agua y tomé un sorbo era alcohol. Habían cambiado mi agua por alcohol.

La bandeja de comida la quito de la cama y lentamente la coloco en una mesita. Camino de nuevo hacia la cama y me subo en ella. Sostengo las manos de Kira y colocandome en el centro de la cama la acerco para que esté frente a mi.

—Háblame más. —ella me dice que no con su cabeza y acariciando sus manos le hago sentir confianza.—. Aquí estoy, y sabes que no te juzgaré por nada que me confieses. Nada cambiará la hermosa perspectiva que tengo de ti. Si decides no querer hacerlo, lo entenderé, pero inténtalo. Quiero conocerte y quiero conocer que te hace daño y cómo puedo ayudarte a superarlo.

—Para eso también tendrías que contarme tus traumas y así poder arreglarnos el uno al otro, si es que tenemos arreglo. —baja la cabeza.

—La persona que te destruye no puede ser la que te reconstruya y tu y yo no nos lastimamos. Solo estamos tratando de reparar lo que otros rompieron. —ella asiente y acepta hablarme de su pasado.

Respira profundamente buscando las fuerzas para hablar.

—Cuando estaba en el orfanatorio, había algunos enfermeros que cuidaban y daban seguimiento a todos los niños. Ellos por ende eran más cariñosos con las niñas que con los niños. Había escuchado de varias niñas que en secreto mencionaban el nombre de los enfermeros y decían que ellos las tocaban y que se sentia muy bien el que lo hicieran. En mi opinion estaba mal, más porque con 14 años solo me preocupaba en estudiar para salir de allí. —respira cómo si le costara hablar lo que dirá en este momento.—. Una noche despues de las 12 de la madrugada, estaba sentada frente a la ventana de mi habitación y de un instante a otro la puerta comenzó a abrirse.

»Tenía la luz apagada y tambien las lámparas, sin embargo, por la luz de la luna pude percibir que habia un hombre en la habitación y ese fue el momento más escalofriante para mi, porque de solo pensar que él me haría lo mismo que hablaban mis compañeras, quería dejar de existir. Por reacción del cuerpo intenté escaparme y por poco no lo logro sino le llego a romperle una lampara en la cabeza. Al dia siguente al saberse el suceso, me catalogaron cómo una perra joven, porque se suponia que debía de estar pensando en cosas de niñas y, ya estaba practicando el tener relaciones sexuales.

—¿Entonces el hombre hablo mal de ti? Él dijo que habian tenido relaciones sexuales, pero ¿cómo le creyeron? —me intriga la respuesta.

—Él dijo que lo estaba seduciendo y que por varios días él me ignoraba para no caer en la tentación, pero cómo hombre no pudo aguantar mucho y eso fue mas porque ese día me desnude y le hice un baile erotico. En fin, nada de eso era verdad. Las únicas que sabían lo que verdaderamente había pasado eran las chicas a las cuáles ellos ya habian tocado. Me sacaron del orfanatorio y desde ese momento comencé a trabajar en el hotel. Al principio el jefe era bueno y humilde, pero desde que comenzaron a alojarse hombres importantes en su hotel, se volvio arrogante y incluso llego a abofetearme, pero lo olvidé y no hice nada porque necesitaba un trabajo.

Pasmado por su declaración no digo absolutamente nada. En cuánto me encuentre a su jefe, lo golpearé por haberla lastimado.

Miro sus ojos los cuáles están cristalizados por lagrimas que ella no quiere dejar salir.

Instantáneamente me posiciono de rodillas en la cama y bajo de esta. Extiendo mi mano para que me sostenga y asi lo hace, un poco insegura de lo que haré, pero agarra mi mano para que la guíe.

Sosteniendo su mano abro la ventana grande de su habitación y cruzamos por ella. La lluvia que comenzó hace varios minutos nos empapa por completo haciendo que el momento tan incomodo y triste que se había creado, desaparezca sin más.

Me alejo un poco de Kira y ella se acerca a mí, pero comenzando un juego entre nosotros, cada vez que se acerca, me alejo.

—¡Basta! Quiero abrazarte. Vuelvo a tener miedo. —parado rectamente cómo un militar camino hacia ella.

Me acerco, pero dejo un espacio reducido entre nosotros y histericamente Kira me acerca haciendo que le robe un beso sin querer. No separo mis labios de los de ella y ella tampoco lo hace. Con los ojos abiertos, observo cada una de las cosas que hacen que me guste más y más Kira. Sus ojos color café, su piel suave y una marca rosada en su frente que se asemeja a un punto.

Recorro lentamente mi mano por su cuerpo y comienzo a acariciar la linea de su espalda haciendo que se le erizen los bellos del cuerpo.

—Me gustaria hacer que olvides tu pasado para asi volverme tu futuro. Me gustaría borrar las marcas de las manos de ese hombre que te lastimó y marcar las mias a base de besos, caricias y cariño.

—Siento cómo si me decepcionarás y no quiero que eso suceda, sería demasiada coincidencia, porque ya de por si mi vida es una mierda. —susurra cerca de mis labios.

—No quiero que tengas una dependencia hacia mi. No. Quiero que poco a poco me dejes entrar en tu corazón y quiero que me dejes sanar todas tus heridas y traumas. No quiero ser igual que la mayoria de las parejas heridas, a ellas les gusta lastimar indirecta o no directamente a su compañero. Por eso necesito que sanemos y al sanar encontraremos el verdadero amor. El amor sano, el amor no obsesivo ni posesivo, ese quiero para un nosotros si llega a ver y créeme que es lo que más quiero, pero sé cómo juega el destino. —beso sus labios lentamente.—. Cómo dice the weekend: cuando sea el tiempo, no importará.

Kira me devuelve el beso y no es un beso apasionado, no. Es un beso dulce y lento.

Dejo de besarla y me dedico a mirarla.

—Vamos a dentro. No quiero que te enfermes. —la guio para adentro de la casa.

—Me quedaré en la habitación y me cambiaré. —asiento y la dejo sola en su aposento.

Mientras camino hacia la cocina, mi mente reacciona y me dice que tengo que ir a mi casa. He pasado la noche entera en la casa de Kira y ahora estoy aqui, pero para irme tendría que cambiar el tiempo atmosférico y al parecer va a durar un poco mas igual.

Oigo los pasos de Kira así que me recuesto de la meseta. En cuánto entra a la cocina abre la boca sorprendida por lo limpia que se ve la casa.

—¿Tu..., lo hiciste? —asiento y ella al parecer no se lo cree. No entiendo porque la sorpresa.

—¿Por qué te sorprende? —ella se acerca a mí y me abraza. Emocionada por ver como esta la casa, me besa las mejillas, la nariz y la frente.

—Porque pensaba limpiar hoy la casa, ya que ayer fue un mal día. Ya hasta sentía verguenza de la suciedad. —Apenada coloca su cabeza encima de mi pecho.

—Cómo amigos casi novios, tengo el deber de cuidarte y mimarte, por lo tanto no pensaba irme de tu casa y dejarte con muchas cosas que hacer. Necesitas descansar y organizar tus pensamientos y muchos oficios no ayudan —río y ella me da un beso corto en los labios.

❤️❤️❤️❤️❤️❤️

Me encanto este capitulo. No es romántico, es reflexivo. Si leiste bien el capítulo y te detuviste a pensar en las lalabras directas que dijeron Noah y Kira entenderás entenderás que hablo. Mua bella mia.♡♡♡♡