Trilogía 'amor sobrenatural'.

Octava burbuja

E- ¿En qué te basas para decir eso?

N- ¿No es obvio? No soy excepcionalmente fuerte, y no tuve que dar más de dos golpes, pero él está así.

E- Pero, se supone que con quien ibas a pelear es conmigo, no con él.

N- Fue tan débil, que no creo que cuente, fue entrenamiento. Además, fue él quien se intentó aparear conmigo, es su culpa.

En ese momento, todos voltean hacia Theodore, que huye ahora de Elián. Quien tiene una expresión de cólera en su rostro, por lo que Rick se pone nervioso al ser usado de escudo, tan ansioso cómo Theodore.

T- ¡No lo pude evitar, yo solo lo estaba viendo, y no es lo que creen! ¡Fue un beso, cuando me di cuenta lo estaba besando, no sé por qué no me pude controlar!

R- ¡Controlándote, no eres un maldito animal!

T- No lo entiendes.. ¡Nunca me ha pasado esto, fue cómo si mi cuerpo no me escuchara, lo siguiente que supe fue que me estaba golpeando!

E- ¡Tus excusas son patéticas, no puedes volver a estar cerca de él, ni entrar aquí! ¿Me escuchaste?

T- ¡! Pero yo..

R- Creo que.. Es lo mejor.

N- Entonces.. ¿No lo puedo matar?

E- No. .. Aunque estoy bastante tentado.

Así, Elián despacha a todos, justo a tiempo para ver el amanecer con Njord.

E- Dime dónde te tocó.

N- ¿? .. Pues, estaba sobre mí.

Empujando a Njord al sofá, Elián se posiciona sobre él, sorprendiendo al más joven.

E- ..

N- ¡! ..

E- .. ¿Qué más?

N- S..Sostenía mi cuello, y beso mis labios. .. Los succionó un poco..

Justo cómo anteriormente, Elián besa los labios de Njord, succionándolos justo cómo el joven le indicó. Más la sensación es embriagante, Elián introduce una pierna entre las de el más joven, pasando a un beso húmedo. Siente que debe detenerse, pero cada vez que lo intenta, las sensaciones hunden su voluntad fuertemente.

Sin embargo, es el mismo Njord quien lo detiene, jadeando suavemente. La vista no ayuda en lo más mínimo al mayor, quien admira el brillo de los húmedos labios de Njord, su tierno sonrojo y sus ojos llorosos. La voz entrecortada del más joven, cuya respiración se nota acelerada, sale aterciopelada de su tentadora boca.

N- N..No debemos.. Aún.. Yo quiero..

Esto hace suspirar a Elián, quien intenta controlarse, recostando su rostro en el cuello de Njord.

Por la tarde, al igual que el día anterior, Elián encuentra a Njord armando suficientes sandwiches para vender en una cafetería. No sabe cómo, pero cada vez este se vuelve más atractivo, pese a verlo devorar casi todos los sándwiches él solo. La conversación fluye sin problema, Njord pregunta claramente, y aprende lo suficientemente rápido para mantener la conversación.

Al atardecer, Njord parece ansioso, incluso comiendo lo que Elián pidió a domicilio con rapidez.

N- ¿Te irás pronto?

E- ¿Quieres que me quede?

N- Sí quiero.

El puchero que se forma en el más joven enternece al mayor, quien lo abraza en el sillón, dejando un corto beso en sus labios.

E- De acuerdo.

N- ¡!

Al igual que por la mañana, una cosa lleva a la otra, mientras se besan suavemente. Las manos de Elián aprietan a Njord contra su cuerpo, haciendo al más joven sentirse cómo una de las masas de pizza de Hefesto, más el calor que se comienza a expandir por su cuerpo no le deja pensar claramente.

N- E..Elián~, aún no.. no.. podemos.. Yo quiero, aún no.

Esto no detiene a Elián, quien con voz ronca, responde mientras llena de besos el cuello de Njord.

E- ¿’No podemos’, qué?

N- T..Tu aroma aún.. está mal. Hay que esper..rar.

E- ¿’Esperar’, para qué?

N- ¡Reproducirse!

Un espasmo recorre el cuerpo del más joven, quien se estremece en los brazos del otro, elevando su voz sin pretenderlo.

E- Hmn~.. Pero no vamos a reproducirnos aún.

N- ¿No?

De alguna manera, parece haber un tono de desilusión en la voz de Njord, lo que hace reír suavemente al mayor.

E- No, esto es.. ¿Cómo lo llamaste? .. ‘Entrenamiento’, para reproducirnos.

N- ¡E..Eso es.. COPULAR!

Dejando un suave mordisco en el cuello de Njord, Elián deja una pequeña marca de beso, con un marco de mordida que mira con orgullo. ¿De verdad estaba marcando al joven? Es una pregunta cuya respuesta Elián no quiere admitir.

Pronto, el cuerpo del joven comienza a reaccionar, moviendo su pelvis contra la de Elián. Más el mayor tiene un mal presentimiento al respecto, por lo que mueve su cabeza lejos del cuerpo de Njord, sorprendiéndose a sí mismo al esquivar por un milímetro el manotazo que arroja el más joven. Elián podría jurar que escuchó un zumbido debido a la fuerza y velocidad con la que Njord lanzó el golpe, por lo que sin notarlo su reacción es tomar las manos de Njord para sujetarlas contra el sofá, inmovilizándolo.

Por supuesto, el joven se retuerce bajo la presión de su cuerpo, más esto los vuelve a estimular. Lo que debilita poco a poco su resistencia, provocando leves gemidos auto infringidos debido a su movimiento de cadera, lo que hace casi rechinar los dientes a Elián que no está seguro de poder besarle.

E- Njord..

N- ¡¿Hmn?!

E- Q..Quiero besarte. ¿Puedo, m..me dej..jas?

Njord sonríe dulcemente, envolviendo sus piernas alrededor de la cintura de Elián, quien muerde su propio labio en un intento por contenerse.

N- Me has ganado en estrategia.. P..Puedes.

Inmediatamente Elián se arroja a sus labios, casi devorando a Njord, hasta prácticamente quedarse sin aire. Elián se dedica a tocar cada parte del cuerpo de Njord, encontrando hechizante todo cuando toca y ve, intentando saborear el momento. Sin embargo, se restringe a solo tocar, por lo que no penetra a Njord.

El joven nunca lo había experimentado, pero de todas formas reconoce la extraña sensación que se acumula en su vientre, para explotar en miles de chispas de colores. La euforia es única, cómo tanto se lo han comentado, el cansancio lo envuelve pero también la satisfacción. Una sensación de frescura que te hace querer permanecer junto a tu pareja, el deseo de que el momento nunca acabe, pero el alivio de llegar a ello.

Un orgasmo, más lo que Njord no se explica es, por qué Elián no ha copulado con él.

N- ¿Elián?

Observando el semen de ambos, Njord hace un puchero, el cual Elián besa una y otra vez casi sin permitirle hablar.

E- ¿Sí?

N- Esa es.. tu semilla.

E- ¿?

N- Tu esencia, debe ir dentro de mí.. ¿Por qué no has copulado conmigo? La próxima vez no será tan sencillo.

De alguna manera, aunque el mayor desea molestarse, saber que el joven le quiere dentro lo hace feliz.

E- Si ya me has elegido, no entiendo por qué deseas pelear, entiendo que es tu costumbre pero.. La mía es ser cariñoso.

Llenando de besos el rostro de Njord, Elián intenta enfatizar su punto, a lo que el joven suspira.

N- Está bien, pero mi cuerpo reacciona, es mi instinto. Nuestros bebés serán muy fuertes, lo sé, pero debes de intentarlo.

Aunque Elián lo cree imposible, la idea de un bebé de Njord y suyo le cala profundamente, por lo que siente el joven le está contagiando su locura.

Ambos duermen temprano, despiertan temprano al día siguiente, más esta vez Elián se retira poco después del apresurado desayuno. Njord no comprende por qué Elián no le puede llevar con él a su trabajo, ya que Hefesto lo hacía, por lo que se molesta con el mayor. Tomando el dinero que le ha dejado, unas llaves y una de sus bolsas de ropa, busca el camino desde la casa de Elián hasta el restaurante de Hefesto.

Tan lleno cómo siempre lo ha visto, Njord pasa a través del restaurante, directamente a la cocina. Hefesto deja quemar felizmente el huevo frito que cocinaba, para abrazar al joven, que con una sonrisa corresponde. Le explica a Hefesto que quiere mantener una bolsa de ropa en su casa, ya que en algunos meses espera tener una cría, por lo que deberá volver a su hogar temporalmente.

Es cuando después que Hefesto le explicara por qué no puede acompañar a Elián a trabajar, que Njord hace una rabieta, devorando el pescado crudo que Hefesto preparaba.