LUNA La bebé ha dormido durante el camino, es una nena muy tranquilita, espero pronto llegar al restaurante, ya que muero de hambre. Samuel y Fernando han conversado durante el camino, me alegra mucho que se lleven tan bien porque en realidad, son más parecidos de lo que creen. Andrés está llamando. — ¿Se están muriendo de hambre tanto como yo, verdad? — pregunta inmediatamente al contestar — Así es. ¿Cómo lo sabes? — respondo — Porque también tengo hambre, Carmelita me malacostumbró a comer siempre a la misma hora — responde — Sólo como debe ser — injiere Carmelita — Ya estamos llegando al restaurante, no es para nada lujoso, así que no se impresionen por su fachada — Me alegra saber eso, — responde Samuel — la verdad, me siento muy incómodo en lugares ostentosos — Me saldrás muy