Tentación. Maldecido por tí

CAPITULO XXXVIII. Seducción

JOAQUÍN

Como es de esperarse, Luna ha comenzado con un interrogatorio para tratar el de averiguar acerca de el lío en el que estoy metido, pero los tres prometimos mantener esa información fuera de su alcance, solo por precaución, y evadimos todos los intentos de mi hermana y de mi cuñado por obtener una respuesta.

Yo me tengo que ir, pero les dejaré la tarea difícil a Samuel y a Andrés, espero que no logren su propósito, al menos estaré lejos si ellos fallan, para evitar los insultos de Luna... personalmente.

SAMUEL

Joaquín se ha ido dejándonos a Andrés y a mí la enorme responsabilidad de ocultarle a luna la información sobre su problema, ella puede ser muy convincente y persuasiva cuando quiere saber algo y aunque, hemos advertido Andrés sobre los alcances del Luna, me temo que no será suficiente, sé que bastará una sonrisita y un comentario picante de su parte para salirse con la suya. ¡Rayos! Andrés no está enterado de los métodos que utiliza luna aunque, sinceramente, espero que por respeto a Fernando, ella se detenga un poco. ¡Muero de celos sólo de pensar que le coqueteará a Andrés! Definitivamente no quiero estar presente cuando eso ocurra, será mejor que me vaya.

FERNANDO

Es un momento de tención entre Andrés, Samuel, Luna y yo, pues la mirada fría y calculadora de ella hace que los latidos de mi corazón se sientan apresurados. Logro reconocer las intenciones de Luna y aunque, muero de celos, no quiero intervenir en su actuar, comienzo a notar como Luna coquetea sutilmente con este par. ¿Así que es así como caí en su red? Me pregunto tratando de recordar situaciones en las que ella utilizó su coqueteo conmigo, por suerte no logro identificar ningún momento de esos, al menos no he sido manipulado para conseguir algo, o eso creo, puedo vivir con ello. Lo siento por Andrés que no sabe lo que le espera.

Creo que Samuel ya está curado, pues a pesar de los intentos de Luna él no accede a revelar ni una sola pista.

— Me tengo que ir, más tarde tengo examen y quiero estar preparado, estaré en mi habitación por si me necesitan — dice Samuel safándose

— Que te vaya muy bien en tu examen Samy — responde Luna

— ¡Suerte, colega! — responde Andrés

— ¿Así que ya se tratan de colegas y todo, Andrés? — pregunta Luna, mientras observo como mi mejor amigo se pone nervioso, intento no hacer ruido para no interrumpir la escena

— Pues sí, sé que Samuel será un gran abogado y estaré feliz de trabajar con él algún día

— Es muy lindo de tu parte, Andrés

En este momento la niña comienza a llorar, yo la obtengo en mis brazos para intentar calmarla, descubro que su pañal está un poco mojado y decido llevarla a la habitación para cambiarla en privado, no quiero irme, pero debo dejar que Luna termine con su investigación, además tengo la impresión de que mi ausencia influirá en su comportamiento frente a Andrés, confío en ella, así que, puedo estar tranquilo.

ANDRÉS

Fernando se ha ido dejándome a solas con Luna, la actitud de Luna ha logrado ponerme un tanto nervioso, es una mujer muy bella y sé que cualquiera en mi lugar se pondría así.

¿Es mi imaginación o el botón de su blusa se desabrochó? No se ha dado cuenta que tengo acceso a una vista impresionante de sus pechos, ¡pero qué malos pensamientos tengo!, pero es que son tan hermosos y perfectos, podría comerlos en este preciso momento... ¡Debo apaciguar mi mente! ¡Es la esposa de mi mejor amigo! ¡La madre de mi futura ahijada!

FERNANDO

Luna debe estar divirtiéndose mucho jugando con los deseos de Andrés, me excita imaginarla usando sus encantos para persuadirlo, si él se creía seductor e irresistible es porque hasta hoy no había conocido a Luna en esa faceta, que, por cierto, más tarde haré que me cuente todo con lujo de detalle.

LUNA

¡Y él cree que no puedo notar cómo sus ojos se han clavado en mi escote! Ay, Andrés, esperaba más de tí, juraba que tú eras ese tipo de hombres que les gusta tener a las chicas a sus pies, pero veo que es al revés, unas piernas bonitas y un pequeño escote y ya perdiste.

— Sé que no me dirás nada acerca de los planes turbios entre tú y mis hermanos... — comento — pero no te preocupes más por eso, no pienso obligarte a hablar

— ¿Tus hermanos? — pregunta

— Claro, para mí esos dos siempre han sido mis hermanos, aunque Samuel no tenga nada de los Villanueva, crecimos juntos y con eso basta y sobra

— Entiendo, qué lindo gesto de tu parte

— En realidad no hay nada que agradecer — me acerco un poco para limpiar la mesa justo frente a él, creo que mis pechos se ven geniales desde su perspectiva

— Fe... Fernando me... me dijo que... que ya tienes la resolución a...

— ¿Nuestros problemas? — ayudo a terminar la oración, está tan nervioso el tonto

— Sí, a nuestros problemas

— Sí, a ver qué te parece, — me siento frente a él para que pueda seguir observando a su gusto mientras explico — creo que debemos renovarnos, publicidad y explicaciones diferentes de todos nuestros servicios y productos y al final el toque que el cliente necesita para sentirse tranquilo, podemos hacer creer al cliente que Fernando ya no tiene voz ni voto en los negocios, usaremos un prestanombres temporalmente

— Pero algún día el cliente y la sociedad se dará cuenta de nuestra mentira y todo será peor para Fernando, además, sería borrar el legado de los Rivera — Carmelita me hace el gran favor de llevar un postre para los dos, ella me conoce mejor que nadie y sabe que sí o sí me saldré con la mía, luego se retira para dejarme continuar con mi plan

— Como dije, es sólo temporal — tono una posición un poco más cómoda para mí, en la cual cruzo mis piernas y alejo un poco la silla de la mesa, la falda se me sube un poco y omito acomodarla dejando ver un poco de mis torneadas piernas y continuo hablando a la vez que disfruto del postre — mientras todo eso sucede, iniciaremos una especie de campaña en la que poco a poco iremos mostrando lo grandioso que es mi Fernando

— Eso suena muy bien — creo que le dolió un poco escuchar la frase "mi Fernando" y después de ingerir un poco de postre continua — ¿pero cómo lograremos mostrar a la sociedad las virtudes de Fer?

— Fácil, en redes iré subiendo lo extraordinario que es, y con ayuda de todos los que lo conocemos, terminaremos inundando las redes con los maravillosos momentos al lado de él, tú como su mejor amigo y casi compadre puedes comenzar a subir recuerdos con él, y además, ne ayudarás a encontrar a más personas que hablen bien de él

— Se escucha fácil, pero...

— ¡No seas agua fiestas! Lo lograremos, ¡yo sé que lo haremos! Y cuando llegue el momento el mundo se arrepentirá de haberlo excluido de todo y le pedirán, le suplicarán que regrese, te lo aseguro

— Definitivamente es más fácil que encontrar al verdadero asesino de Giselle

— Lo sé, yo quisiera encontrar al verdadero culpable y hacer que le pida perdón de rodillas, pero eso sí lo veo imposible — al decir estas palabras, mi expresión se vuelve triste, ¿intentará consolarme? ¿Tú que crees?