La otra cara de la luna

Confusión

Punto de vista de Gray

Estuve de acuerdo en venir por una cerveza y de alguna manera eso se convirtió en cinco. Tengo un pequeño zumbido agradable, así que no estoy seguro del recuento. No sé por qué acepto salir por una, cuando sé que me llevará a quedarme fuera toda la noche, pero estoy relajado por primera vez en toda la semana.

Supongo que Noa sabía que necesitaba esto. Él me conoce perfectamente.

Salgo del baño cuando la veo caminar hacia mí, luciendo como un maldito espectáculo salido de mis fantasías. Thea. Ella está vestida con una minifalda ceñida y una camiseta sin mangas y verla así hace que mi sangre corra directo a mi polla.

Mi lobo está muy de acuerdo cuando empezó aullar y agitarse.

Ella está mirando hacia abajo, por lo que ni siquiera me ve detenerme y extender mi brazo, presionando mi palma contra la pared para bloquear su camino. Sé que dije que la evitaría, pero estoy un poco emocionado y se ve tan malditamente bien que no puedo evitarlo. Ella mira hacia arriba en el último minuto, la sorpresa jugando en su rostro mientras patina hasta detenerse justo antes de colgarse de mi brazo extendido.

Inclino mi cabeza junto a su oreja.

-No deberías estar aquí y mucho menos sola- Mis palabras salen en un gruñido bajo.

-¿Qu ... qué?- Ella me mira con los ojos muy abiertos y de inmediato sé que algo no está bien. De repente me doy cuenta de que ella no huele y ni se ve exactamente igual.

Maldita sea y el jodido efecto del alcohol en mi sistema.

Cuando me doy cuenta, la realidad me golpea como una tonelada de ladrillos, dejo caer el brazo y doy un paso atrás. Ella solo me mira, confundida y parpadeando.

Thea tiene una gemela y esta mujer que se encuentra frente a mí, no es mi chica, es su jodida hermana.

-Perdona chica, te he confundido con otra persona, es mi culpa el haberte asustado- balbuceé, extendiendo la mano para frotar la parte de atrás de mi cuello. Mierda.

¡Di algo, idiota!

Realmente no puedo hacerlo, así que huyo rápidamente junto a Kate que se ve muy confundida antes de que pueda responder.

Mantengo la cabeza baja hasta llegar a la mesa, deslizándome en mi asiento en silencio. Los chicos están perdidos en una conversación, pero todos se vuelven hacia mí cuando se dan cuenta de lo fuerte que estoy respirando.

-¿Qué pasa?- Pregunta Noa, entrecerrando los ojos.

Niego con la cabeza, alcanzando mi cerveza medio vacía en la mesa.

-Nada- refunfuño, poniéndolo en mis labios y apurando el resto.

Los otros chicos me miran fijamente. Dejé mi botella de cerveza de nuevo en la mesa, deslizándola hacia el centro para unirla a las otras. Calmo mi corazón acelerado y mi respiración errática, recuperando la compostura. Todavía están esperando que responda, pero de ninguna manera voy a confesar mi humillación en el pasillo.

-¿Qué?- Pregunto, arqueando una ceja.

-Lo que sea, hombre- dice Noa, poniendo los ojos en blanco. Vuelve a su conversación con Zatch.

-Oye- Damon me da un codazo, hablando en voz baja para que los otros chicos no escuchen- ¿Viste quién está aquí? - Él inclina su botella de cerveza en dirección a la barra, y yo me giro sobre mi hombro para seguir su mirada a través de la habitación.

Es Thea.

Mi chica, la verdadera evidentemente, está vestida de manera diferente a su gemela. Su vestido es demasiado corto, mostrando sus largas y bien formadas piernas. Pensé que su hermana se veía bien, pero la original es una diosa absoluta. Una mujer totalmente pecaminosa. No puedo dejar de mirarla mientras toma un sorbo de su bebida y echa la cabeza hacia atrás mientras se ríe con sus amigos.

Mi lobo estaba dominado por todas las cervezas que había consumido, pero inmediatamente se anima y se pone firme.

Definitivamente estoy mirando demasiado tiempo, porque su mirada parpadea en la mía y nuestros ojos se encuentran. Rápidamente aparto la mirada, dándome la vuelta en mi asiento para darle la espalda.

Damon me da una mirada de complicidad y alcanzo su cerveza, bebiéndola. Simplemente me sonríe mientras deslizo la botella vacía sobre la mesa, sacudiendo un poco la cabeza.

Sé que no les dirá nada a los otros chicos; él no es del tipo que chismosea sobre la gente y solo se dedica a sus asuntos. Pero él y yo sabemos que el hecho de que Thea esté aquí esta noche significa una cosa:

Problemas.

Y ahora no se cómo borrar su imagen de mi cabeza