Ronan, con sus ojos entrecerrados y la mandíbula tensa, observaba con cautela a la recién llegada “Saltadora del tiempo” y al lobo que la acompañaba que ya estaba interactuando con los otros Alfas. Su mente, aguda como el filo de una navaja, procesaba rápidamente la situación, anticipando los problemas que esta inesperada reunión podría acarrear. Tres lobos del pasado, junto con una Sullivan con la magia de viajar en el tiempo, no se veía como una buena combinación. Por otra parte, Declan, luego de terminar de saludar a sus hermanos, se acercó a Ronan con paso firme y decidido. Su ceño fruncido delataba la curiosidad y el recelo que sintió cuando percibió la esencia de Ronan, esto ocasionó que sus facciones se endurecieron aún más. El aroma le resultaba familiar, evocó recuerdos de la in