Al recibir la llamada de su padre, Kristen sintió alegría, como cada vez que Lucio le informaba que había regresado de un viaje de negocios. Aunque esta vez era diferente, pues Kristen no solo se sentía feliz de saber que su padre estaba en la ciudad y pronto llegaría a casa, también estaba ansiosa por saber que James había regresado.
Kristen se encontraba en su habitación recorriéndola de un lado a otro con el celular en la mano, en él tenía el numero de ese hombre y moría de ganas por llamarle, escuchar su voz haciendola estremecer al sentir ese hormigueo entre sus piernas.
El tictac del reloj en uno de los muros parecía marcar el compás de su agitado corazón. Se encontraba inquieta, pensando en si debía o no llamarle, Kristen caminó hasta el enorme ventanal en su alcoba, las cortinas
