─No es lo que crees, disculpa ─menciona Nick, soltándome ante la mirada enojada de Ale. Levanta sus manos, evitando que esto se vuelva una escena desagradable y que va en contra de mis valores.
─Discúlpate con ella ─ordena Alessandro con severidad.
─Oye, viejo, solo estábamos hablando y bailando, relájate. Estás como… muy tenso ─dice Nick hacia él, con un tono jocoso. Vislumbro el semblante de Ale, pareciendo recién salido de una película y por suerte soy la chica por la que podría enfrentarse a otro hombre. Suspiro embobada “reacciona, Pianella” exclaman mis pensamientos, pestañeando y me coloco erguida.
Alessandro termina de interponerse al frente de él, encarándolo.
─Deberías de hablar con respeto, no soy tu maldito “viejo” ni me mandas a calmarme cuando has tocado a mi mujer ─f
