Nancy escuchó la pregunta de Jace, tenía tanto miedo de dejar de recoger los pedazos de la cuchara que ni siquiera sintió el dolor al cortarse con los pedazos rotos.
Recordó la pesadilla bastante realista de la noche anterior, en la que Jace estaba completamente histérico y demente.
¡El dolor y pánico que sentía en ese momento era una pesadilla eterna!
Contuvo a la fuerza el temblor y levantó la cabeza, en ese instante vio el rostro de Jace tan cerca al de ella. Sus pupilas oscuras y espeluznantes estaban mirándola fijamente, y la misteriosa sonrisa que aparecía en sus labios eran exactamente iguales a las del hombre de su pesadilla.
Nancy cayó al suelo asustada.
"Me escuchaste hablando con Sophia Sun, ¿no?" Jace preguntó una vez más con una voz espantosa.
Nancy lo pens
