Y LA ABUELA QUIERE NIETOS.

Capítulo 2.

Sobre ruedas.

Pov Niccolò Corleone.

Camino por los jardines de la casa de mis padres, ya que, jamás vi la necesidad de alejarme de ellos, solo somos los tres, bueno mi madre después de tenerme sufrió un Cáncer en etapa uno y entre ambos decidieron que ella se sometiera a una operación para poder remover el útero, intentaron adoptar, pero después de un tiempo no resulto así que, solo soy yo. Y si ellos no tienen problemas en que yo viva con ellos, a los demás no debe importarles.

A mis conquistas si eso les preocupa jamás las dejaría ir a un lugar mío para eso existen los hoteles, y si no les gusta muy problema de ellas, yo jamás he prometido amor, desde hace años, de hecho, una vez lo hice y cuando le propuse matrimonio porque la quería, ella jugo conmigo como quiso, solamente fui un motivo para una causa, me saco lo que pudo y antes de la boda la encontré con otro tipo en el departamento que compartíamos juntos.

Al tiempo que esos sentimientos se fueron desvaneciendo y, como lo supe, lo corroboré, pues ella volvió, y ni siquiera la determiné. Fue solo una persona.

Yo trabajo junto con mi padre y hemos estado viéndonos en muchos problemas con algunas construcciones, ya que somos arquitectos, bueno tuvimos un proyecto gigantesco y mi padre se encargó mientras yo me fui a Europa a tomar las riendas de las constructoras y viñedos que poseemos, pero tuve que dejar todo para cuando las noticias de la tragedia me llegaron y que todo se descontroló.

Decidí que era tiempo de volver después de casi 5 años volvería a ver a mi pequeño demonio, jajajá esa pequeña que hace más de 3 años me declaro su amor, pero yo en ese momento recién estaba saliendo de la decepción del amor y toda esa mierda, ella vio mi dolor, también quise conquistarla, pero me di cuenta de que ella no es como las otras chicas, ella es tan delicada como una tormenta, pero si fuera que solamente, le hubiera dicho que podría quizás intentar algo después, pero no; yo tuve que ser el idiota más grande del mundo. Y lo único que conseguí fue que ella me odié de tal manera de que no soporté estar en la misma habitación que yo.

Después de ese episodio, cuando ella venía a la toscana de vacaciones con su familia, ella, la niña caprichosa, prefería estar en hostales con otras personas que quedarse en nuestra casa conmigo, pero no ella siempre argumentaba querer vivir la experiencia de personas normales. Normales mis pelotas.

Claro, y yo soy imbécil, eso lo lleva haciendo estos últimos dos años después de ese día. Pero ella jura y re-jura que nadie sabe qué hace, pero yo siempre la tengo con vigilancia.

Desde que llegué a Los Ángeles, California, me he dedicado a trabajar y a asechar a mi pequeño demonio y de algo que me he dado cuenta es de que ella no tiene novio ni nada por el estilo. Con eso ya estoy más tranquilo.

Mi plan va viento en popa; que las empresas de mi padre de este lado del mundo estén en declive, lo solucionaremos después del juicio.

El muy maldito del contratista usó materiales de pésima calidad y una de las torres colapsó mientras estaba en plena construcción, en donde dos trabajadores murieron.

El contratista fue sobornado para que hiciera mal las cosas y no tuvieron en cuenta la muerte de esos trabajadores, mientras nosotros no podamos comprobar y tener pruebas de que el maldito de Sebastián Márquez es el maldito que causó la muerte de los trabajadores, No podremos retomar los contratos que teníamos.

Mi plan desde el principio era una fusión con la familia Lincoln, no por el dinero porque lo tenemos de sobra, es solo por mi pequeño demonio, esa maldita bruja que desde que la vi robó mi corazón. Pero que jamás reconocí algún tipo de sentimiento hacia ella.

Los padres de mi demonio se han ofrecido a darnos la mano, no tanto por el dinero, sino que más que nada es por respaldo de ellos, el cual es muy importante. Podría decir más que del mismo presidente, por lo de su historia y esas cosas.

Pero quien es mi aliada en lo de la conquista de mi pequeño demonio es la abuela. Ella siempre supo de mis sentimientos por ella, pero la edad, la amistad de nuestros padres y la fundamental, la amistad de sus hermanos, quienes son como mis hermanos, lo que jamás tuve.

. — Eres un imbécil, te lo han dicho un domingo - y ve su reloj-— a las cinco de la tarde. — me dijo la abuela cuando le conté lo que ella era para mi vida, pero que no quería perder a mi familia.

Pero ella siempre me ha dado la esperanza de que mi pequeña aún me ama, pero que la dañe, y que no confía en mí, con razón yo tampoco confiaría en mí después de lo que le dije. Aun así, lo que hago sí soy un idiota, jajajajaj.

Pero cuando jugué mis cartas con mi padre y mi suegro para poder llevar a cabo mi plan de que ella se convierta en mi esposa, fue en complicidad con mi suegra, abuela - bueno de ella, porque la mía, está en un mejor lugar— y obvio mi madre quien después de contarle solo un poco de lo que hice ella como buena italiana me correteo por toda la casa y no para darme un abrazo, ella es la más feliz porque ama a esa pequeña diabla, y decirles que no me emociona tenerla para siempre a mi lado es mentira.

Lo malo de todo esto es que por su amor perderé a mis hermanos, pero ya estoy harto de tener que hacerme el idiota. Y si ese es el precio que debo pagar, lo haré.

Saco mi celular y hago la llamada más importante.

Llamando… TIFFANY & CO.

X: Tiffany and CO. Habla, Karla, en que puedo ayudarle.

N: Habla Corleone. Necesito saber cuándo llegará mi pedido.

X: Buen día, en efecto, su pedido debería estar arribando esta misma tarde, para entregarse en donde solicitó.

N, perfecto, hasta luego.

Termino la llamada y con una sonrisa en mi rostro tomo mis cosas, me voy a mi oficina a esperar el regalo que le tengo a mi pequeño demonio. Espero que le guste, ya que lo mande a hacer solo para ella.