Una híbrida en la manada

Capítulo cuatro

Killian:

Nunca imaginé traer a una humana a la manada, menos una tan terca, testaruda y desobediente; realmente me hizo enojar las veces que intentó huir y la forma en que me contesta es exasperante.

Estoy acostumbrado a que todos a mi alrededor obedezcan las órdenes sin explicación, soy un Alpha y mi padre fue uno también. Pero esa madrugada que supervisaba las patrullas, Brent llegó informando que unos vampiros sedientos de sangre estaban atacando cerca de nuestro territorio, esto regularmente pasaba debido a que los vampiros de sangre pura mordían a los humanos sin succionar toda su sangre o matarlos, luego estos se volvían sedientos de sangre, perdían su sentido común y comenzaban a atacar a los demás humanos. Fuimos en busca de ellos cuando vi a Lily defendiéndose de ellos, me pregunté ¿como esa humana podía matarlos? Olía a humana y se veía como una, pero su forma de luchar era diferente. En especial cuando Brent le dió la guadaña, la velocidad y movimientos eran de un lobo.

Solo pensé en llevarla a la manada, probar sus habilidades y descubrir quién es realmente, pero todo parece distinto, la chica del callejón no es la misma que está entrenando con Natalia.

Hoy decidí ir a tomar un descanso de todo, me gusta estar solo, así que fui al jardín que tengo detrás de la arena de pelea a leer un poco y meditar, cuando sentí a Lily acercarse, la observé muy cansada, tiene unas ojeras y esos ojos plateados están apagados, estoy seguro que apenas se sostiene con los golpes que le ha dado Natalia, me sorprende su resistencia; creo que el entrenamiento no le hace bien, pero quiero saber que tan lejos puede llegar.

Al recostarse a mi lado no puedo evitar que una leve sonrisa saliera, está obedeciendo, aunque ella diga lo contrario. Justo cuando iba a continuar leyendo escuché unos ligeros ronquidos salir de su boca.

Suspiré y otra vez una sonrisa involuntaria salió de mis labios.

–Así que ni dormida puede cerrar la boca– la observé un rato, no parece humana y tiene un aura familiar... Esta chica es una pequeña flama ardiente.

La levanté en mis brazos después de un buen rato, estaba muy dormida pero necesito irme y no puedo dejarla aquí, así que la llevé a su habitación.

Lily...

– Acepta lo que eres– escuché esa voz, sentí como una oscuridad me estaba consumiendo, algo pesado y doloroso en mi cuerpo, intentaba escapar, pero no podía, logré abrir los ojos sudada y abrumada.

–¡Lily! ¡Hora de irnos!– gritó Natalia abriendo las cortinas para que entre la luz del sol.

– ¿Qué carajo? –gruñí furiosa –. Natalia acabo de despertar.

– Lo lamento, princesa– se detuvo al verme sudada y pálida, estoy segura que debo tener un aspecto terrible –. ¿Estás bien?

–Si, estoy bien, ahora salgo– respondí de muy mal humor.

Recordé que no he tomado mis pastillas, estuve muy ocupada y distraída para decirle a Natalia o Brent que me las consiguieran, tendría que pasar el día intentando no colapsar.

Comencé a pensar en el día anterior y lo último que recordaba era que estaba en el árbol con Alpha Killian, eso definitivamente lo debí haber soñado.

Después de vestirme salimos con Natalia hacía el entrenamiento, ya me esperaba unos tremendos golpes de parte ella, bueno al menos ella no era tan hostil como solía recordar a mi padre y no me lastima de gravedad, los moretones desaparecen al descansar.

Cuando llegamos mi sorpresa fue encontrar al Alpha en el entrenamiento y me vino el recuerdo del árbol, sacudí la cabeza sabiendo que eso fue solo un sueño. El Alpha se acercó a nosotras.

–Natalia ve con Jason a entrenar– ordenó, ella me observó y me dijo adiós moviendo su mano un poco asustada.

– Lily, ven conmigo y Beta Nate– se dirigió a mí caminando hacia afuera.

Decidí no protestar y lo seguí, es decir al menos no van a golpearme hoy y en verdad estoy de mal humor por no descansar en la noche y el dolor de cabeza constante, sé que en cuanto salga de aquí le diré a Natalia que fuéramos a comprar las pastillas.

Llegamos al lugar de tierra con gradas que tiene como asientos alrededor, lo pude observar mejor, Beta Nate explicó que es un lugar donde peleaban en ocasiones por un enfrentamiento entre Alphas, me di cuenta que Brent nos estaba esperando con la guadaña en las manos.

– Lily, pelearás contra Beta Nate– ordenó el Alpha viendo hacia la arena.

Lo miré incrédula, esperé a que dijera que era una broma, pero su cara de perro enojado me hacía saber que estaba hablando en serio, fue mi límite.

–¡Estás loco! –exclamé casi la colapso –. Este hombre es... es ¡super grande! –señalé –. No puedo vencer a Natalia y ahora quieres que me mate este gigantón.

–Tendrás la guadaña que te dió Brent el otro día y podrás utilizar lo que quieras a tu alrededor, pelearas con Beta Nate y se detendrán cuando uno de los dos quedé inconsciente o este muerto, ahora ve– explicó viéndome fijamente.

Escuché bien, porque estoy segura que oí la palabra muerto.

–No lo haré– alce la voz, ¿por qué simplemente solo me mata o me deja ir? ¿Acaso quiere verme sufrir?

– Si no vas, pelearás conmigo– alzó la voz.

Eso era aún peor, es decir Beta Nate es atemorizante, pero el Alpha irradiaba un aura aún más escalofriante y sé que no me conviene pelear con él, no sabía lo que me podía hacer, así que, camine hacia Brent y tomé la guadaña esperando que me defendiera de algo contra Beta Nate.

Beta Nate se colocó a un lado de la arena y me lanzó una mirada de 'tú puedes'.

Al menos sé que no me mataría. Comenzó abalanzándose sobre mí rápidamente y me deslicé en el suelo esquivando el golpe que cayó sobre la arena.

Estoy alucinando, me muevo tan rápido como él.

Beta Nate comenzó a atacar y yo esquivé los golpes con facilidad, ¿qué me está pasando? Después de esquivar varios golpes decidí comenzar a atacar, moví la guadaña hacía él y lo esquivó, analicé sus movimientos como me había dicho Natalia y decidí atacar a los pies para que pierda el equilibrio, moví la guadaña hacía su pie izquierdo y él retrocedió, pero antes de que pudiera colocar el pie derecho en el suelo giré el mio golpeándolo y perdió el equilibrio cayendo al suelo. Me levanté dándole la espalda, antes de dar la vuelta, logró rodear un brazo por mi cuello, traté de liberarme lanzando la guadaña, pero solo logré hacer un corte en mi brazo y cuando comenzaba a perder el conocimiento, los escuché.

– Acepta lo que eres... te ayudaremos.

Sentí como algo frío atravesará mis venas, no tengo idea de lo que pasa pero me deje llevar.

–Acepto– susurré cerrando los ojos.

En el momento que dije esas palabras sentí como algo poderoso, frío y escalofriante invadió mi cuerpo y nubló mi mente, no sé dónde estoy, ni quién soy, sólo sé que alguien está rodeando mi cuello con su mano y tengo que defenderme; así que estiro mis pies con toda mi fuerza hasta el piso levantando mis manos lancé al hombre grande lejos, quedó inconsciente en el suelo después de chocar con una pared, mientras otro hombre de ojos azules me observa y corre hacia mí, asumo que ellos me quieren atacar así que ataco primero en contra del de ojos azules, luchamos por un momento, pero finalmente cuando intentó lanzarse sobre mi le dí un golpe con mi puño dejándolo inconsciente, cuando el otro hombre de ojos color miel me ve directamente y se acerca lentamente creo que… lo conozco, ¡NO! Estoy lista para atacar y me lancé sobre él, pero me sujetó fuertemente con sus grandes brazos.

– Tranquilízate, Lily, estás a salvo– susurró.

¿Lily? ¿Quién es Lily? ¿Soy yo?

Dudé un momento, pero no tengo tiempo para pensar porque me rodea con sus brazos con más fuerza, intenté soltarme sacudiendo mi cuerpo, algo oscuro nos rodea.

–Estas a salvó, Lily –vuelve a repetir una y otra vez.

Algo en su voz hace que me paralice ¿por qué no me ataca? ¿Acaso es cierto? Escuché los latidos de su corazón en su pecho... estoy a salvo.

Sus palabras finalmente llegaron a mis pensamientos entendiendo que me está hablando a mí, estoy a salvo, a salvo... resonó en mi mente y cerré los ojos.