CAPÍTULO ONCE Kevin sentía que el siguiente mensaje estaba llegando, la señal empezaba en sus auriculares, los principios de una traducción se abrían camino a través de él. Estaba sucediendo, quisiera él o no. —No creo que tengamos mucho tiempo —dijo—. Siento que está viniendo. La gente ya se estaba agolpando a su alrededor. Su madre estaba allí, rodeándolo con los brazos como si pudiera protegerlo de cualquier cosa que viniera. L Dra. Levin y el Profesor Brewster estaban allí, ambos parecían preocupados. Para alivio de Kevin, Luna volvía a estar de pie. No la habían apuñalado. Kevin fue corriendo hacia ella y la abrazó. —¿Estás bien? —preguntó. —Depende —dijo—. ¿Cuántos tús se supone que hay? Kevin negó con la cabeza. —No hagas bromas, estaba preocupado por ti. —¿¡Estabas preocupa