Se busca esposa

¿Mi esposa?

El lugar es muy íntimo y perfecto para nosotros dos. Una cabaña de madera, bambú y vidrio, alejada de las otras casas del recinto a un kilómetro, es preciosa, iluminada, fresca y tiene pinta de casa ecológica. Niza lo ve maravillada y trae consigo el pastel del cual ha hablado todo el camino de lo lindo que es y lo bien que huele.

Sé que esta no es mi esposa es nuestra pequeña creatura. Le pregunto si quiere pedir la comida para cenar. Niza niega con la cabeza y dice que solo quiere probar el pastel y comerme a besos. Pone el pastel en una mesa y lo partimos emocionados por lo que viene para el futuro.

La amo demasiado y se lo digo, le recuerdo a mi esposa que es lo mejor que me ha pasado en muchísimo tiempo y que sobre todo, estoy emocionado de poder formar parte de cada uno de sus sueños y sus deseos. Niza me pregunta qué lo que quiero hacer yo con mi futuro y le digo que estoy valorando tomarme una baja de paternidad, dejar a mi tía Sofía al mando y esculpir.

Los dos compartimos una mirada y Niza se atiborra de pastel. Es la primera vez que le veo tan feliz comiendo algo, así que le dejo en paz y le digo que voy a tomar una ducha. Me aseguro de que nuestros hijos estén bien y Mily me envía una foto de ella haciendo de niñera para sus primos pequeños en casa de Arturo. Le pregunto por los adultos y padres de esos niños.

Mily

Seré una mamá fantástica, todos están bien.

Dice cuando me tenía una foto de los niños armando sus coronas.

Emilio

A los cuarenta y tres con tu primer y último esposo.

Mily

Eres un guapo, pero, yo quiero ser mamá antes de los treinta y quiero casarme antes los veinticinco.

Emilio

Soy tu fan mi amor, pero tu carrera y tus sueños antes de empezar a limpiar pañales y vivir los sueños de alguien más. ¿Me lo prometes?

Mily

Eres el mejor padrastro que he tenido.

Emilio

Vaya, Te amo y espero no te hayan dejado con esos tres locos. Y eres la mejor hija que la vida pudo haberme dado.

Mily

Ellis está asando hot dogs.

Me envía una foto y les mando besos a todos.

Tomo una ducha y busco algo que ponerme, pero, creo que es mejor aparecerme desnudo ante mi guapísima esposa. Cuando llego a la sala ella está acostada en el sofá, con una almohada en el rostro y el brazo cubriéndose.

—¿Qué te pasa?

—Me siento cansada y es nuestra luna de miel—Responde y me río—Lo estoy arruinando y me vas a dejar el primer día de casados.

—Quítate el brazo de la cara—Ella lo hace y me ve con los ojos llenos de lágrimas.

—Yo estoy desnudo, intentando seducirte, pero, voy a prepararte un baño, buscarte un pijama y dormirme a tu lado.

—¿Cuán molesto estás?

—Mi amor, estás creándole algún órgano a nuestro hijo. Es normal que estés cansada, tal vez más tarde o mañana quieras hacerlo por ahora a descansar.

Niza me da las gracias por entender y me recuerda que estoy guapísimo y que me ama demasiado. Mi esposa no quiere ni bañarse, solo va a la cama y en segundos está dormida, yo me pongo un pijama y me acuesto a su lado, le doy varios besos en el cuello y le peino el cabello.

Mi teléfono suena y me acerco a tomarlo, me pongo en pie y saludo a Leticia.

—Hola, ¿cómo están los sobrinos? Y ustedes dos.

—Nosotros felices, los niños grandes e insoportables —los dos reímos. —Llamaba para comentarte que mi prima tuvo que irse del país, su esposo está furioso por una infidelidad y ella de alguna forma quiere que tú sepas eso. ¿Tienes idea de por qué?

—Me acosté con ella, pero dijo que estaba divorciándose.

—Sí, pues, tampoco sabe de quién es el bebé.

—Siempre usamos protección.

—Con suerte no fuiste el único, pero, Rodrigo, su esposo psicópata solo sabe de ti.

—Me queda demasiado mal esto, me acabo de casar Leticia.

—Ya... ella dejó todo para que puedas hacerte una prueba de paternidad, reza para que salga negativa y no tengas que explicárselo a tu mujer, ahora ve al Pieth y dona una muestra de sangre o algo.

—¿Puede ser pelo o saliva?—pregunto.

—Sí.

—Gracias por arruinarme el día.

—Tu polla te arruinó el día, te dije que no te metieras ahí, la conozco y lo conozco a él. Ellos dos están locos, ella no es una mujer agredida Emilio, a ella le gusta provocarlo, se pelean, se insultan se tiran cosas y ella va y amenaza a las mujeres con las que él sale, él hace lo mismo y regresan. La diferencia es que esta vez está esperando un bebé.

Le pido a mi hermano que lleve mi cepillo de pelo o de dientes al hospital y Logan me pregunta frustrado por qué siempre estoy enredado en historias donde hay un hombre loco y celoso y un bebé de por medio. Mi hermano sigue gritándome mientras me pregunta cómo voy a darle semejante noticia a mi novia sobre el posible embarazo de mi examante.

—No me responsas. La verdad quiero saber lo mínimo del tema—declara mi hermano—Declara mi hermano, sin embargo, es lo último que dice que me lastima.— Emilio, eres el tipo de inestabilidad que la vida de una persona no soporta. Mucho menos una persona que tiene problemas de adicciones, al menos asegúrate de que ella tenga el apoyo necesario cundo llegue la noticia.

Mi hermano no me ha bajado de decepción y falta de honor.

Yo me siento y lloro en silencio, en un rincón y para hacerlo peor Niza ase ha despertado y me pregunta qué es lo que me preocupa.

Mi esposa me abraza. No tengo una respuesta para ello y no tengo una solución. Solo le ruego porque acepte ir por las cosas y él me pide que piense en hacer las cosas bien con Niza.

—¿Pasó algo con Emiliano? Mi amor, ¿estás bien? ¿Pasó algo grave? —lloro aún más y ella me abraza. —Dime qué es lo que te pasa. ¿Por qué lloras?

Volví, comenten muchísimo para hacer un maratoncito este fin de semana. ¿Les parece?