Capítulo 1: Primer día de clases
~~~~~Un día antes de iniciar clases~~~
En casa de Esteban
— Mañana ya estaremos en nuestro territorio —comenta Esteban a Camilo y Michael—, Tenemos que ganar en todo. Esos perdedores no nos pueden ganar como la última vez.
FlashBack
Están jugando Fútbol en el que ambos equipos se encuentran empatados, pero en último minuto Daniel mete un gol evidenciando quien ganó el partido.
Burlas por parte del equipo ganador, se hicieron presentes. Lo cual aumento el enojo del equipo de perdió en el último minuto. Sobre todo, al saber el castigo que les tocaba cumplir por haber perdido.
El castigo que habían decidido ambos grupos, consistía en que el perdedor tenía que estar de sirviente del equipo ganador por un mes. Mes que los chicos aprovecharon para que los perdedores hicieran las tareas que ellos no quisieran hacer e incluso otras que aunque no les correspondía hacerlo, para molestarlos los mandaban a realizar, como: limpiar el establo, realizar una fiesta y que ellos limpiaran después sin ayuda de sus empleados o su dinero, hasta Daniel hizo que Camilo fuera a comprar toallas sanitarias para su hermana, favor que nunca le pidió su hermana pero que lo hacía para molestar a Camilo.
~~~~Fin de FlashBack~~~~~~
— Exacto — comenta Michael— No podemos perder otra vez, mañana tenemos que mostrar quien manda.
Por otro lado.
En el aeropuerto de Rusia
Narra Sofía
Aquí estoy nuevamente. En un nuevo país, con nuevas comidas, nuevas culturas y cero amistades o por lo menos personas conocidas. Mamá dice que entendamos su situación y nos adaptemos a esto, ya que no podemos cambiar algo. Sobre todo cuando es nuestro padre fantasma quien nos puso en este aprieto.
Mi madre es una mujer de 39 años, divorciada, que se la pasa viajando por su trabajo. Por eso, mi hermano mayor David y yo vivimos constantemente solos. Por lo que ya nos hemos acostumbrado a mudarnos de ciudad o país y a vivir solos. Cosa que no nos ha molestado en lo absoluto, ya que, además de no sentir tanta presión por nuestra madre, siempre estuvimos ocupados con nuestras cosas.
Por lo que rara vez nos sentíamos solos, ya que en Estados Unidos mi hermano estaba en clubs de fútbol, música, baile y fotografía. En cambio, yo estaba en patinaje artístico, tenis, natación, ajedrez y música. Por lo cual el tiempo en los clubs y las cargas académicas, apenas teníamos tiempo para respirar y nos gustaba. Así no nos sentíamos muy solos.
Llegamos a nuestra casa, una casa muy elegante del vecindario.
Desempacamos nuestra ropa (ya que era lo único que teníamos que hacer) y por lo increíblemente cansado que estábamos decidimos pedir comida a domicilio.
La decoración e infraestructura de la casa es bonita para mí, aunque David protestó diciendo que pareciera una casa de sólo mujeres y se sentía desplazado, pero bueno le tocó conformarse ya que está casa ya la había comprado nuestro padre fantasma.
Aún no sabemos el acuerdo que tuvo mi madre con nuestro padre. Lo único que sé es que esta casa fue comprada por nuestro padre y según él, no tendremos más mudanzas ni traslados de país. Mi madre continuara en su trabajo, pero ahora nuestro padre será quien costeara nuestra educación y estadía. Es por ello, nos trasladamos a su país. Siguiendo lo que él y mi madre acordaron.
Ya mañana tendremos que ir a clases y eso como tal me da igual. Con tantos cambios que hemos vivido en nuestras vidas, ya no hay miedo o emoción por conocer la escuela. No tengo interés de levantarme temprano y asistir a clases, pero bueno, hay que ir.
Mi hermano y yo, somos excelentes en los estudios aunque no nos esforcemos tanto y eso es un alivio para nosotros. Sin embargo, es por eso que es tan aburrido y monótono. Por ello, ambos estamos más en los clubs que en una biblioteca o en casa estudiando.
Primer día de escuela
— Niños, apúrense que se les hará tarde —grita mamá desde la primera plata.
— Ya voy —Grito, arreglando el uniforme que para nada me agrada.
Es muy feo para mi gusto.
— Espera un momento madre, tengo que lucir perfecto — grita mi hermano cuando salgo al encuentro con mi madre.
Mamá rueda los ojos, sabe cuánto le gusta a David verse bien, como también cuanto demora haciéndolo.
Una hora después
Llegamos a la escuela. Como era el primer día mamá nos acompañó a la escuela, pero obviamente se fue literalmente volando a su trabajo. Por ende nos correspondía a nosotros ir a la oficina del director.
La escuela era muy grande y tenía entre sus instalaciones múltiples canchas, que evidenciaban que existían clubs de algo extra académico, lo que es bueno para Daniel y para mí.
Después de unos minutos divagando en la gran escuela llegamos a la oficina del director
~~~~En la oficina del Director~~~~
— Me llena de alegría tener a unos estudiantes tan perfectos en nuestra escuela —comenta el director mientras observa los documentos con nuestra información escolar— Ambos hermanos son primeros en sus clases. Ambos han ganado muchos premios en deporte, fotografías y música. Sin duda es un honor tenerlos aquí.
Aquí vamos otra vez con el discurso de siempre, llevemos a nuestros salones de una vez —pensé sin quitar la sonrisa de me vale lo que digas pero tengo sonreír.
Después de otro discurso y mostrarnos a nuestros maestros mi hermano de último año y yo de penúltimo año. Cada uno nos fuimos con nuestros maestros para ir a nuestras respectivas aulas de clases y hacer nuestras tediosas y respectivas presentaciones.
Narra Sofía
Llegamos a mi clase. Los gritos de los estudiantes se pueden escuchar desde afuera. Pero todo queda en silencio cuando el maestro principal abre la puerta e ingresa al aula de clases.
El silencio se vuelve sepulcral y el orden se hace evidente en segundos.
— Muchachos, buenos días. Como saben, hoy no tengo clases con ustedes, pero he venido aquí porque quiero presentarles a una nueva estudiante — voltea hacia mí y me pide que ingrese— Espero que la hagan sentir bien y le ayuden en todo lo que pueda.
No puedo evitar este momento para nada interesante. Por lo que opto por ingresar y acabar con el espectáculo poco interesante, lo más pronto posible.
— ¡Guau! Carne fresca —responden los chicos.
— Tan animal —responde una de las chicas.
— Muchachos, sean educados —le regaña el profesor — Adelante estudiante, preséntese.
— Hola me llamo Sofía vengo de Estados Unidos, espero que cuiden mucho de mí.
— ¿Eso es todo?
Asiento
Me molesta estar hablando de mí, si por mí fuera, llegara y ni me presentará pero eso no se puede.
El profesor notó mi poco interés en presentarme así que él dijo todas cosas que dijo el director. Es decir, que soy excelente estudiante, que he ganado muchos premios, entre otros logros que no me emocionan..
— ¡Guau! Creo que está chica te quitará el primer puesto Esteban —comenta uno de los chicos.
— Por favor, no ha nacido quien nos supere — se burla alguien sentado en los últimos pupitres.
— Cof, cof, Daniel —dijo alguien pero no se supo quién.
Se levanta el castaño.
— ¿Quién fue el idiota que dijo eso? Ese imbécil no nos llega ni a los pies —comenta alterado.
Todos murmurar entre sí.
Vaya escuelita en la que me metí.