En toda la noche no pude dormir, me la pasé pensando en que sería de mi vida. «¿De verdad quería vivir como una fugitiva?, ¿esta era la mejor solución?, ¿en serio no tenía otra opción?…» Sin poder pegar el ojo, camino por toda la casa, que es desconocida para mí, empiezo a curiosear. —Parece que Austin, si viene de vez en cuando. —Pienso en voz alta, al observar varios artículos personales, como cepillo de dientes, toallas, algo de ropa, zapatos, libros, y otras cosas más. —Mmm!, que extraño — Digo al abrir el gabinete del baño y ver que hay otro cepillo de dientes, muy femenino. —Acaso, ¿es de su novia?, quizás suelen verse aquí, y yo en este momento solo soy un estorbo. No quisiera meter a Austin en problemas. Pero, por otra parte, ¿tiene novia?, ¿entonces por qué jamás lo mencion