Capitulo 19.
1094 Words
Carlo la llevó a la habitación y colocó el cobertor sobre ella.
Fue a darse una ducha, se colocó desnudo para abrazarla y halar su cuerpo junto al suyo.
Mariana despertó en medio de la noche.
Pudo ver el rostro del hombre a su lado.
Para ser honesta era bastante guapo.
Delineó con la yema de sus dedos su perfil.
Por qué no puedes darme más noches así.?
Desearía tanto que pudieras darme algo más que solo sexo Carlo.
Carlo podía escucharla, no estaba dormido cuando la sintió girarse hacia él.
Mariana se abrazó al cuerpo firme y grande, hoy era ella quien quería sentirlo.
Bajó y tomó el m*****o de aquel hombre para meterlo en su boca, tenía deseos de hacer el amor.
Pudo sentir que crecía en su boca hasta no alcanzar más.
Escuchó los gemidos de aquel que aún le resultaba un desconocido.
Mmm, parece que alguien no quiere dormir esta noche.
No, quiero que me hagas el amor Carlo.
Él se paralizó, se había enamorado ella de él.?
Qué dijiste.?
Qué quiero que me hagas tuya y me hagas el amor.
Carlo la subió, colocándola en arcadas.
Acercó su rostro al suyo para hablarle al oído.
Yo no hago el amor Mariana.
Yo tengo sexo contigo, no te confundas.
De verdad es todo lo que puedes ofrecerme.?
Qué, no estás satisfecha y por eso es que buscas otro hombre para darte lo que yo no puedo.?
Qué... qué dices.?
No estabas hoy con otro chico.?
Carlo yo...
Cómo supo él que yo estaba con Leandro.?
Qué, te sorprende que lo sepa.?
No...es qué...no es lo que piensas.
Ah no, entonces que es.?
Vienes aquí jugando de santa y deseas que te haga el amor según tú.?
Por favor niñita, te metiste en mi cama sin siquiera conocerme, qué esperas, que me case contigo y te dé hijos.?
Estás loca.!
Mariana sintió un vuelco en su corazón.
Ese lugar ya está ocupado Mariana.
E...eres casado.?
Carlo no respondió nada.
Responde, eres casado.?
Carlo la besó y la tomó a la fuerza, sus besos y caricias fueron más bruscos esa noche.
Incluso la llevó a la otra habitación.
La amarró de manos hacia atrás y las piernas abiertas en el aire.
Bajó su cuerpo a la altura de su m*****o para follarla.
El título de señora no te queda niña, solo eres un juguete para mí.
Entonces satisface tu maldito ego y déjame ir porque será la última vez que me veas Carlo.
Por supuesto que voy a satisfacer mis deseos bebé, eres deliciosa, al menos llévate contigo la experiencia de haber estado con un hombre de verdad.
Crees que lo eres solo por follarme, un hombre de verdad es quien da respeto, amor y cuida la dignidad de la mujer.
Probablemente me equivoqué contigo, pero sabes qué.?
Un error no se comete dos veces.
Algún día la pagarás Carlo y te va a doler en el alma haberme utilizado.
Recordarás que hubo una mujer que aunque no estaba a la altura con respecto a la edad, pudo llegar a darte todo y lo tiraste a la basura.
Te crees importante por ser la hija de los Ford.?
No eres más que una niña que reciclaron.
Eres adoptada cierto.?
Mariana pudo sentir las lágrimas caer,
Ni siquiera podía limpiarlas en esa posición.
Decidió no decir nada más.
Carlo la bajó y pudo ver sus lágrimas las cuales de cierta forma lo quemaban.
No quería lastimarla, pero tampoco deseaba que ninguna ocupara el lugar de su esposa, jamás superaría la pérdida el cual lo atormentaba día y noche.
No le quedaba más que ser cruel con sus palabras porque un agresor físico no era, jamás la golpearía ni la lastimaria.
Más él no pudo entender que las palabras a veces lastiman más que los golpes.
Mariana quedó exhausta.
Recogió su ropa, su bolso y se vistió.
El hombre estaba recostado sobre el respaldo de la cama viendo cada uno de sus movimientos.
Espero nunca nos volvamos a encontrar señor Ferretti.
Sí algún día se cruza en mi camino haga de cuenta que como hoy me demostró, no soy nada y no significó nada para usted.
Hasta nunca, ojalá no te arrepientas por la suerte que tuviste al tenerme y perderme a la vez.
Carlo se sintió herido de alguna forma, no quería aceptarlo, no quería reconocer que esa chiquilla la cual alejó, significaba más que solo sexo en su vida.
La cena, las velas todo lo hizo sentir culpable esta noche y no quería seguir robándole la Juventud.
Ella merecía a alguien mejor.
Se tomó la cabeza con ambas manos frustrado.
Mariana subió a su auto a las tres de la madrugada directo a su casa.
Al llegar fue silenciosa.
No quería que Bryan la viera en ese estado.
Se dió una ducha, al salir se colocó uno de sus trajes deportivos y trató de no llorar, él no merecía sus lágrimas ni su sufrimiento.
Estaba agotada, así que por suerte pudo dormir profundamente.
Mientras, Carlo se distrajo viendo los vídeos de las cámaras que tenía por toda su casa.
Seleccionó uno por uno y los editó para subirlos a la web.
No podía creer que tuviera tantas reproducciones, eran un Boom.
Había acumulado millones con esa chica, dinero que la verdad no le faltaba.
Al subir los demás, no esperaría que su vida cambiaría a partir de ahí.
Casualmente Susana estaba con ese chico Dylan, el cual terminó acostándose de verdad.
Era un pervertido que le encantaba ver pornografía.
Mientras la chica dormía a su lado recorrió algunos vídeos encontrándose con una enorme sorpresa.
Se sentó de golpe en la cama y despertó a la chica .
Susana, maldición despierta.!
Mmm, déjame dormir.
Mira esto, qué no es tu amiga la puritana, esa tal Mariana.?
Qué, de qué hablas.?
Mira, es o no es.?
Déjame ver.!
Susana abrió grande la boca, no se lo podía creer, su supuesta ex amiga la santa Mariana haciendo videos y subiendolos a Only Fans.?
Pero qué sorpresa más buena.
Soltó una carcajada maníaca, no podía creerlo, esa era su oportunidad, la que había estado esperando desde hace mucho.
Por fin su día había llegado, iba a desenmascarar a la maldita adoptada hija de los Ford.
Estaba eufórica, descargo todos los videos, los cuales empezó a subir al foro de la universidad con diferentes títulos.
La reina del Only Fans, la más santa de todos hace dinero y fama a costa de su cuerpo.
La más zorra de las psicólogas da terapias gratis, quién quiere una cita.?
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