Capítulo 3 II Parte

1851 Words
*** ***Flashback*** —Esto tiene que ser un error —Dijo Alison mientras negaba con la cabeza, su mirada fija en los papeles de registro de pagos que el gerente del banco habia dispuesto sobre su escritorio en evidencia para ella —Señorita Mason me temo que no hay ningún error, recientemente estamos haciendo algunos cambios en nuestro sistema y notamos su caso… Bueno, el de su padre que en paz descanse —El gerente ajusto sus gafas en el puente de su nariz mientras apoyaba su cadera sobre el borde de su escritorio y limpiaba una pelusa invisible des visiblemente caro traje de negocio que vestia ese día Pese a sus palabras no podía sentir la empatía venir de él desde que ella habia cruzado la puerta y a pesar de ya estar enterado de la muerte de su padre antes de que ella abriera la boca, sus condolencias no eran más que falsas, ninguna de sus palabras hacia contraste con su lenguaje corporal, el hombre no parecía ver el momento en que al fin ella saliera de su oficina Y Alison tampoco, le habia costado cada gramo de voluntad en su cuerpo trasladarse desde su casa hasta el banco, lo que parecía ser un buen día se arruino cuando habia leído la carta del banco, Dios sabia que lo ultimo que queria en su vida ahora eran malas noticias —Yo no estaba enterada sobre esta deuda que mi papá tenia con el banco —Confeso ella tragando saliva al ver la fila de ceros al final de la cuenta —Comprendo su situación señorita Mason, en serio lo hago —El hombre la miro con un pequeño puchero curvando sus labios que en seguida desapareció —Sin embargo alguien tiene que saldar la cuenta y ya que su padre ha fallecido solo queda por acción del banco embargar su casa, es una lástima y en verdad lo siento Más y mas palaras vacias, Alison no podía culparlo después de todo lo ultimo que queria era ser objeto de lastima —No pueden embargarla, pertenecía al matrimonio de mis padres… —Y precisamente porque es lo único que queda de su padre es que lo haremos, es la única forma, por favor entienda —El gerente entrecerró los ojos en su dirección —Quizas si me dan un poco más de tiempo podria pagar la deuda —Intento ella, su voz elevándose una octava por el pánico que empezaba a sentir ¿Tiempo? Necesitaría al menos volver a nacer para pagar aquella deuda, dudaba que incluso aunque consiguiera tres o cuatro trabajos que todo quedara resuelto Su sueldo de camarera solo le alcanzaba para comprar comida y a veces darse gustos o en su mayoría pagar los servicios, mientras más observaba la gran suma de dinero que representaban los dígitos en el trozo de papel más rápido caían sus esperanzas derrumbadas, mentiría si dijera que con su sueldo lograría conservar la casa y pagar al banco o al menos con tres trabajo, no seria posible en un futuro cercano ella lo sabia bien El labio del gerente se alzo con molestia y sus ojos se achicaron como un par de rendijas mientras la miraba, se irguió en toda su altura que apena eran un par de centímetros más que ella y ajustando sus gafas sobre el puente de su nariz dijo: —Ni el banco ni yo somos responsables de su desgracia señorita Mason, no tenemos la culpa de la irresponsabilidad de su padre y que por ello ahora usted este hasta el cuello de deudas—Dijo él a medida que avanzaba hacia ella Adiós apariencia de hombre correcto, elegante y respetuoso, ahora tenia en frente a un hombre miserable en todo su esplendor ¿Dónde habia quedado el respeto y la amabilidad? Alison desvió la mirada, quería alejarse de eso hombre y de ese lugar lo más pronto posible, se sentia indignada y sobre todo enojada —No hacemos obras de caridad por lo que tampoco podemos darle más tiempo ¿Diez años no han sido suficientes? ¡Que descaro tiene! —De haber sabido de la deuda habría podido hacer algo —Alison alzo la barbilla desafiante, por mucho que queria llorar en ese momento no se amilanaría ante un hombre como el gerente del banco —No se tome a mal lo que le voy a decir —El hombre bufo y puso los ojos en blanco —Pero sinceramente dudo que un sueldo de camarera hubiese sido suficiente y ya eso no tiene importancia Ella sintio como el calor subia por su rostro en una clara señal de que se estaba sonrojando más de ira e indignación que vergüenza en realizad “¿Quién se cree para hablarme asi?” pensó ella levantándose como un resorte de su asiento —No puede hablarme asi —Razonó entre dientes sin apartar la mirada de la del hombre en cuestión —Usted me ha faltado el respecto al querer abusar aun más de nuestro tiempo límite en estas situaciones, considero que diez años han sido más que suficientes independientemente del hecho de que no estuviera al tanto de nada —Murmuró él mientras volvía detrás de su escritorio donde apoyo sus manos sobre la gruesa madera —Su tiempo se ha acabado Alison. Ella se mordía la lengua, estaba intentando ser lo más fuerte que podía, en su mente no dejaba de visualizar su futuro ¿Qué haría? Quizás podria costear un pequeño apartamento pero seguro supondría un gran sacrificio, tener que dejar todas las pertenecían de sus difuntos padres… —A algunas personas les dan un mes para desalojar —Murmuró ella apretando sus manos en puños a sus costados —La presencia de algunas personas no me ofende tanto como la suya y tienen esa oportunidad… Desgraciadamente usted no —Apuntó él sin inmutarse siquiera al tiempo que recogía los papeles de registro que habia dispuesto sobre el escritorio y le entregaba los que ella habia traído consigo: algunas copias de los pagos que su padre habia hecho y que encontró en la casa, entre ella el título de propiedad que también señalaba que faltaba pagar una parte al banco —El trato que he recibido es inconcebible —Dijo ella intentando mantener toda la compostura posible —Tenga por seguro que esto no se quedara asi. El rostro del gerente se deformo de ira —Le sugiero que vaya movilizando sus cosas lo antes posible —Escupió él lanzándole una mirada de pocos amigos —Tiene hasta el fin de semana, ni un día más. Alison sabia que si las miradas mataran ya ella estaría desangrándose en el suelo —Con todo respeto —Ella lo miro al mismo tiempo que apretaba la carpeta con los papeles contra su pecho y añadió —Púdrase. Alison no era de decir groserías pero sin lugar a dudas aquel hombre habia podido sacarla de sus casillas en menos de una hora, sin embargo aunque ahora se sentía un poco mejor luego de lo que dijo eso no cambia las cosas ni su futuro Habia perdido —¡Largo! —Grito el gerente y ella trago saliva mientras se apresuraba a salir de aquel lugar ***Fin del Flashback*** Ya cuando estaba cruzando la puerta habia dejado las lagrimas caer libremente por su rostro sin tener ningun control sobre ella, habia estado tan desesperada por salir de aquel lugar que no habia visto al hombre frente a ella y habia terminado por estrellarse contra él, afortunadamente nadie salio lastimado y aunque toda su carpeta habia terminado en el suelo con todos los papeles fuera el hombre habia sido tan amable en ayudarla Alison apenas se habia permitido ver lo guapo y atractivo que era, le parecía conocido pero debia de estar confundida, en honor a la verdad ella tenia mucho tiempo en que no compartía con nadie, ya sea de su mismo sexo o no. —Pff —Suspiró, estaba en el pequeño jardín que solia ser de su madre, habia pasado tanto tiempo desde que ella habia partido de ese mundo y aun asi su jardín estaba maravillosamente cuidado y repleto de flores aunque hubo un tiempo en que no era asi. A medida que Alison iba creciendo fue valorando aquellas cosas que pertenecían a sus seres queridos, habia visto el amor que su madre habia puesto en decorar su hogar y mantener su jardín, habia estado detrás de su padre para que construyera un especie de invernadero para que su jardín no tuviera que pasar por la peor parte del la épocas, su madre habia sido una mujer dedica, demasiado llena de vida y energía pero lo más el cáncer habia aparecido progresivamente esos colores vibrantes tan característicos de la vibra de su madre lentamente fueron perdiendo vida hasta el resultado estaba declarado No podían hacer nada por su enfermedad, el cáncer estaba muy avanzado, aunque habia sido una niña en ese entonces nunca podria olvidar lo sombrío que se habia vuelto todo luego de aquel diagnostico —Estas muy hermosa —Le susurró a ella a una de las hortensias de su madre tal y como ella solia hacer, era un tipo de flor que se la llevaba muy bien con los climas fríos, el huerto que habia construido su padre sin duda habia ayudado a que la nieve no las convirtiera en cubos de hielo aunque el lugar era algo frio, también habia farolas amarillas de una luz intensa que simulaba la luz de sol, se usaba en ocasiones especiales y se vigilaba mucho el jardín en cuestión ¿Qué pasaría con ella cuando tuviera que irse? No queria pensar el destino de aquel jardín y tampoco en el suyo, pues era algo inevitable, desde aquella ultima vez en el banco no habia dejado de pensar en sus opciones para descubrir que realmente no tenia, estaba de manos atadas Tomó asiento en un pequeño taburete y apoyo sus codos sobre uno de los mostradores detras donde habia algunos tulipanes y rosas, flores decorativas sembradas en masetas de cerámica, a pesar de encontrarse afuera con un vaqueros desteñidos que en otros tiempos eran azules y un suéter de lana blanco no cargaba una gruesa chaqueta de invierno pues ese día sentia que no hacia tanto frio, cerro los ojos disfrutando del silencio y la paz que sentia y sin darse cuento los recuerdos de sus padres invadieron sus pensamientos —Los hecho tanto de menos —Murmuró a la nada abriendo los ojos y sintiendo como las lagrimas empezaban a acumularse, respiro hondo en un intento por contenerlas No deseaba perder su casa, el lugar que sus padres habian convertido en un hogar para los tres y lo único que tenia de ellos, no podía aceptarlo, quedaba solo un par de días para que fuera fin de semana, a lo lejos el sol empezaba a abrirse paso en el horizonte hasta lo alto del cielo iluminando todo su paso y supo entonces que solo un milagro podría hacerla conservar la casa. Solo necesitaba un milagro
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