Al día siguiente comenzaría la nueva rutina, mis mañanas empiezan llamando a Cony para que me cuente los planes de la semana y como está, luego me comunico con Miami con Carl que está a cargo de la oficina y me pone al tanto también de los planes. Luego de desayunar bien temprano antes de que todos bajen, Cami y yo nos vamos al gym, donde ya está casi listo para entrar en funcionamiento, ella lo va a dirigir las dos semanas que esté aquí y las otras dos semanas se irá a Caracas y hará lo mismo con las dos sedes que tiene allá. Así que mientras se pone todo a punto para la apertura, Cami me puso a hacer ejercicios y con una rutina en pesas, para ganar masa muscular y definir, y hacer así control de calidad en las maquinas. Desde que murió don Guillermo no había vuelto a hacer ejercicios.