—Necesito primero que nada que en lo que puedas evites dejarnos solos, ya me tocará a mí contenerlas cuando estén a solas conmigo, no quiero que las alientes, si te llegasen a tocar el tema trata en lo posible que esperen ser más adultas, a que no me presionen, que sean pacientes y no forzar la situación. Si algo me gustó; fue cuando Andrea dijo sobre el hecho de que Gise les impidiera estar juntas que a los 18 no podría evitarlo.
—Estás pidiendo demasiado Sergio, eso tiene un precio —sus ojos pícaros brillaron.
Era inevitable que no pasara lo que iba a pasar, desde que estoy hablando del tema de las niñas he estado excitado, ella lo ha notado, y seguramente también lo está.
—Pues ven a cobrar.
Ella se para de la silla donde está y se acerca a mí, se abre de piernas y se sienta sobre l
