Narra Nerea:
Sentí como me depositaban en un lugar suave, acogedor, con un aroma que ya conocía. Sus manos hicieron que mi piel se erizara al sentir como su mano tocó mi muslo al soltarme en esa cama, luego sentí un peso al lado de mí. No quería hablar mis ojos aún, luego como sus manos algo temblorosas tocaban mi mejilla haciendo una caricia en ella, fue así por segundos para luego inclinarse y darme un beso en la frente. Se paró y se fue. Abrí mis ojos lento y suave, estaba en su habitación, en la habitación de Harry, de seguro me había quedado dormida en el departamento de hacer tantas cosas, bueno, lo admito. No había hecho casi nada, pero algo sí. Me senté en la cama, sentí el aroma de su perfume en ella, sonreí. Alguien estaba en baño ya que por debajo de la puerta se veía la luz en
