OLIVIA SLOAN Siento que cada paso que doy no es más que un paso hacia la horca misma. Mis compañeros de trabajo entran y salen del edificio donde se supone que debo trabajar pero no soy capaz de quedarme dentro del ascensor porque apenas se cierran las puertas las detengo y termino quedando fuera. Llevo diez minutos de retraso, hubiera subido de no ser porque ahora mismo no trabajo más en contabilidad sino mano a mano con Harry, el secretario de Travis a tan solo unos pasos de su oficina. Estoy nerviosa, pasar todo el tiempo pensando en cómo va a reaccionar en cuanto me vea ahora mismo es lo único en lo que he tenido en mente durante el fin de semana. Recuerdo sus besos, sus caricias y el que me haya pedido una cita pero lo hizo en su apartamento, a solas. Ahora tengo miedo de cómo va