El Diario del Renacimiento de Selena

Capítulo 39 Comprar Tienda

Los días pasaron día a día, y después de medio año la familia de Selena tenía 81 monedas de oro en sus ahorros. Y José finalmente encontró una tienda que era satisfactoria en todos los aspectos después de buscar durante casi medio año.

La tienda no está ubicada en el centro de la ciudad. Debido a una mala gestión, el propietario planea vender la tienda y regresar a su ciudad natal para comprar un terreno para convertirse en terrateniente.

José preguntó sobre la tienda y pensó que estaba bien, así que lo discutió con el dueño durante mucho tiempo. El dueño originalmente planeaba vender la tienda por 90 monedas de oro, pero nadie preguntó por el precio durante mucho tiempo. José también Tenía muchas ganas de comprarlo y podría pagar el importe total en un solo pago.

El dueño de la tienda quiere volver a su ciudad natal lo antes posible, porque un día de retraso le costará más. El consumo en la ciudad no es bajo. En el campo no pueden gastar nada, pero en la ciudad gastarán dinero cada día.

Al final, la transacción se completó por un precio de 80 monedas de oro. Después de obtener el certificado de propiedad de la casa, José regresó a casa emocionada en un carro tirado por bueyes. María también estaba muy feliz después de obtener el título de propiedad de la casa y la tienda. Selena tomó un trozo de pastel que trajo José, se lo metió suavemente en la boca y lo mordió, al ver las caras felices de sus padres, Selena no pudo evitar sentirse emocionada, de ahora en adelante tendrían un lugar en su ciudad.

Inesperadamente, la tienda que compró José tenía un pequeño patio detrás, Selena y María se alegraron mucho al verlo. En ese momento, José no explicó en detalle la situación de la tienda, por lo que pensaron que solo compró una tienda.

Resulta que aparte de la tienda hay un pequeño patio y tres casas. Sucedió que la calle donde estaba ubicada la tienda estaba conectada con el área residencial detrás de ella, por lo que el dueño original de la tienda compró la tienda y la casa con un patio detrás para residencia. No es de extrañar que una pequeña tienda no esté en el centro de la ciudad, también cuesta 80 monedas de oro.

Aunque la tienda no es grande, los productos almacenados se pueden colocar directamente en el patio trasero en el futuro, de modo que se pueda ahorrar más espacio para exhibir los productos. Además, el pequeño patio está rodeado de paredes altas y tiene una excelente privacidad. No se puede ver cómo hacer el producto.

Aunque la casa no es exquisita, tiene una sólida estructura de mampostería y hay muchas plantas plantadas en el patio, lo cual es agradable a la vista, las cuatro paredes rodean el patio, que luce mucho más privado que la casa construida por el campo. Ahora, no tienen que preocuparse de que alguien siempre venga a espiar a Selena.

En cuanto a la nueva casa en la que vive desde hace casi dos años, María se muestra un poco reticente a desprenderse de ella, según su intención no piensa venderla y la guarda allí por si acaso. Podrán regresar a la aldea en el futuro, si no ganan dinero ni pueden mantenerse la vida en la ciudad. Pero, después de hacerse cargo de la tienda y la casa con patio, a la familia no le quedaba mucho dinero.

Vivir en la ciudad es completamente diferente a vivir en el campo, necesitan dinero para comprar cualquier cosa para comer, aunque los ingresos de treinta o cuarenta monedas de plata cada mes puedan parecer mucho, pero hay muchísimos lugares donde se necesita dinero.

Y José también dijo que si no se vende la casa nueva nadie vivirá allí y otros tendrán ideas para su casa, entonces es mejor venderlo. En ese momento la familia del jefe de la aldea vino a querer comprarla, y finalmente se vendió por 10 monedas de oro con algunos muebles que no se podía llevar.

Incluyendo la participación en las ganancias de este mes, la familia todavía tiene un depósito de unas quince monedas de oro. Luego, María alquiló un carruaje para trasladar las pertenencias de la familia al nuevo hogar.

Selena miró a su alrededor tan pronto como entró a la tienda. Esta tienda es bastante buena. El diseño de la tienda es razonable. Los productos se venden en el frente. El patio en la parte trasera está rodeado por una pared alta. Pueden instalar un banco de trabajo. Para la fabricación de productos en el patio, más adentro hay tres habitaciones, una habitación se puede utilizar como almacén, se puede decir que aunque es pequeña, tiene todas las comodidades necesarias.

Y esta tienda está ubicada en la calle La Calleja de las Flores, en la zona de Córdoba, a la izquierda de la tienda hay una tienda de seda, y a la derecha una joyería, ambas tiendas parecen tener muchos clientes, y pueden comprarse joyas y seda, deberían ser ricos.

No subestimes la ubicación de la tienda y los vecinos. Las personas se dividen en grupos, y lo mismo ocurre con las tiendas. Si el negocio es pobre en un área, es difícil ganar popularidad, pero si hay competidores, las buenas ventas de su tienda, que fácilmente puede despertar celos, lo que puede conducir al desastre. Parece que la popularidad y seguridad de esta calle son buenas.

Hay dos o tres tiendas de comestibles no muy lejos en la calle frente a la tienda, no es de extrañar que el propietario original de la tienda no pudiera continuar con el negocio y tuvo que vender la tienda y regresar a su pueblo natal.

Si quieren abrir la propia tienda, definitivamente no abrirán una tienda de comestibles, si lo hagan, abrirán una boutique de cuidado de la piel y cosméticos exclusivamente para mujeres, de esta manera no habrá competencia en toda esta área comercial.

Selena y María entraron satisfechas al patio trasero, José estuvo muy ocupado estos días, primero selló unas flores secas que habían sido secadas en su casa en el campo y las transportó al patio trasero en varias veces, y luego comenzó la construcción del patio trasero. Cuando María y Selena llegaron una semana después, todo en el nuevo hogar estaba casi listo.

Después de vender la casa, la familia no tenía nada que preocuparse en la aldea Dalle. Los días de semana, deja que la familia de Leo se encargue de parte del terreno montañoso que compraron. Cuando el clima se calienta, Leo se encargará de emplear personas que recojan y sequen las flores. Cuando las entreguen en la tienda, pagarán el trabajo. José ahorra problemas, y la familia de Leo también puede ganar ingreso extra, es lo mejor de ambos mundos.

A Selena le dolía el trasero por las sacudidas del carro de bueyes durante todo el camino, cuando llegó a su nuevo hogar, María le pidió que fuera a su habitación a descansar, que vivía la hija del dueño original de la tienda.

José ya había arreglado la habitación. Además del tocador original hecho a medida para Selena, se instaló un nuevo mosquitero de gasa de color verde claro, las ventanas también se equiparon con cortinas de doble capa con base de tela y gasa del mismo color, también se agregó un estante de lavabo para lavarse. También estaban cubiertas con esteras de juncos y se puede caminar descalzo después de entrar a la casa. Esta disposición finalmente parece el tocador de una chica de ciudad.

Selena estaba un poco cansada por estar ocupada mudándose estos días. Al ver que aún no se había extendido la colcha, le daba pereza moverse. Casualmente, se quitó los zapatos, se acurrucó en la cama y cerró los ojos por un rato hasta que María entró a ayudarla a extender la colcha.

Bueno, ella tampoco despertó. Estaba acurrucada como una pequeña ardilla en su cama. Mirándola, no pudo evitar pellizcar sus mejillas que estaban blancas y rojas.

Después de descansar, Selena ayudó a María a limpiar por dentro y por fuera durante mucho tiempo, por la tarde realmente no pudo más, tuvo que hacer aceites esenciales, bálsamo y colorete, y ordenar la tienda. Solo había tres personas en la casa. Seguramente los tres estarán muy ocupados. Antes, Lucía y Helena solían ayudarles, pero ahora que se mudaron a la ciudad, no conocen a nadie.

La familia lo discutió en conjunto y decidió ir al oeste de la ciudad a buscar dos esclavos capaces para poder ayudarles en el futuro. Además, la familia necesitaría a alguien que los cuidara cuando abrieran una tienda en el futuro.