El Diario del Renacimiento de Selena

Mientras su padre sudaba profusamente y salía a beber agua, Selena abrió silenciosamente el viejo cesto tejido en el suelo. Había tres capas de particiones, cada una de las cuales contenía varios objetos pequeños. La capa superior estaba llena de cintas para la cabeza hechas a mano, algunos adornos para el cabello baratos y horquillas; debajo había pañuelos bordados y colgantes aromáticos hechos por su madre, María. Miró a través del cesto tejido y descubrió que no se había vendido ni un solo pañuelo, pero sí cuatro o cinco abanicos. Ahora que el verano es cada día más caluroso, algunas mujeres de familias normales necesitan ventiladores para combinar con su ropa o para abanicarse. Lo que es popular en la metrópoli este año es este tipo de patrón de flores y mariposas. Aunque las cosas son hermosas, el costo también es alto. Para no acumular mercancías en exceso, los vendedores solo pueden venderlas a precios bajos: quince monedas de cobre por puñado, con una ganancia de solo dos monedas de cobre. Selena miró otra canasta y descubrió que solo se vendían algo de aceite, sal, salsa de soja y vinagre, pero no eran artículos rentables. Había pocas familias dispuestas a comprar mucho. Cada moneda de cobre debía calcularse cuidadosamente. Cubrió la tapa de la canasta y entró en la habitación. Su madre, María, estaba sentada en la cama, remendando ropa. Ella no gozaba de buena salud; acababa de resfriarse hace unos días. Había mejorado estos días, pero su rostro todavía estaba pálido. Cuando María vio entrar a su hija, se detuvo y dijo: —Tu papá siempre tiene buen carácter, pero esta vez lleva varios días enojado contigo. Aunque te ignora, no lo culpes en tu corazón. De hecho, esta vez hiciste algo mal... Tal vez estaba un poco emocionada, así que después de decir esto, María tosió varias veces. Tomó el té de margaritas hecho por Selena y bebió sorbos antes de sentirse aliviada y su rostro se veía mejor. Luego miró a Selena y dijo: —Lucio proviene de una familia culta, y Lucio es guapo y talentoso. Si tu padre no hubiera salvado la vida del padre de Lucio por casualidad, nunca habrías tenido la oportunidad de convertirte en su prometida. Ahora que los padres de Lucio están muertos, él espera obtener nuestra ayuda. Incluso si tiene la cara herida y no tiene dinero, incluso si realmente no quieres casarte con él, por el bien de su padre muerto, no puedes insultarlo. Su padre ha ayudado mucho a nuestra familia en el pasado, pero ahora no le echamos una mano. ¿Cómo pudiste ser tan malo y ahuyentarlo…? Dime, ¿por qué fuiste tan indiferente y fría ese día? Al ver que los ojos de su madre estaban rojos, Selena inmediatamente se sintió al lado de la cama, cayó en el regazo de su madre y comenzó a llorar. Al ver a su hija llorar tan tristemente y sus hombros temblar, María no pudo decir más palabras de culpa que quería seguir diciendo. Ella siempre tiene mala salud. Ella solo tiene una hija. Aunque ella proviene de una familia común y corriente, todavía tiene a Selena en su corazón y la adora en todas las formas posibles. Pensando en lo que sucedió en casa durante este período, pronto derramó lágrimas junto con Selena. La madre y la hija de repente rompieron a llorar. Originalmente, Selena simplemente se recostaba en el regazo de su madre y fingía llorar para evitar que la regañaran. Por un momento, olió la familiar vegetación ligera en el cuerpo de su madre, y luego pensó en el sufrimiento que sufrió después de que su madre falleciera en su vida anterior. No pudo evitar sentirse triste. Rompió a llorar incontrolablemente y solo tomó un momento para que la ropa de María se mojara. Afuera de la puerta, José, que originalmente quería entrar a la habitación, se quedó un rato en la puerta. La expresión de su rostro finalmente se suavizó un poco. Suspiró, se dio la vuelta, tomó las herramientas y fue a la montaña trasera a recolectar leña. Selena sonrió. Ya no era la Selena original que solo tenía el recuerdo de once años. En su vida anterior, fue la amante de un conde. Después de disfrutar de algo de riqueza y adquirir algunos conocimientos, sintió que su nombre era tan normal que deseó poder cambiarlo. Nunca pensó que algún día volvería a escuchar a alguien llamarla Selena y se sentiría cálida. Le dio ganas de llorar. Mientras pensaba en ello, usó el peine de madera con varios dientes rotos para peinar con cuidado las zonas anudadas de su cabello. Luego se sentó junto a la ventana como una estatua, en silencio, esperando a que su cabello se seque naturalmente con el viento. Ayer, accidentalmente volvió a 12 años desde 30. Al mirar en el espejo el rostro que se veía desnutrido y delgado, en lugar del rostro que la desesperaba, despeinada y con aspecto de anciana, de repente volvió a tener las ganas, las ganas de vivir, que se hicieron más intensas luego de confirmar que esto no fue un sueño. Después de un rato, la carita infantil en el espejo de bronce de repente se echó a reír, sonriendo tan feliz y desenfrenadamente. Extendió la mano y se tocó la cara y el cabello ligeramente amarillo. Esto se debió simplemente a una nutrición insuficiente. Cuando crezca, parecerá una persona diferente. De lo contrario, en la vida anterior, el Conde no se habría enamorado de ella ni se habría llevado al palacio como su amante. Ella no se habría destacado entre los muchos amantes del conde y no habría disfrutado del favor del conde durante cinco años. Después de mucho tiempo, resultó herida debido a varios abortos espontáneos, y no pudo tener hijos en el futuro, al mismo tiempo que perdió el favor del Conde. Aun así, la condesa todavía le guardaba rencor. Finalmente, ella fue expulsada del palacio del conde y la vendieron en secreto a un vendedor de bálsamo. Si ella muere, cuando el conde lo recuerde nuevamente, los recuerdos anteriores serán todos maravillosos. Pero si se escapa con otro hombre, entonces estos hermosos recuerdos se convertirán en cosas repugnantes. El movimiento de la condesa fue sin duda cruel, lo que eliminó a Selena por completo la posibilidad de escapar de regreso a la Mansión del Conde y buscar protección del Conde. Pensando en los pocos años de vida después de dejar al Conde en su vida anterior, Selena detuvo el peine. Selena en su vida anterior era una mujer extremadamente vanidosa. De lo contrario, no insistiría en ser una amante del Conde. Ella solo vivía para la gloria llamativa externa, por lo que tenía todos los hábitos de una mujer vanidosa y vulgar. Le encanta el dinero, la belleza y el lujo, pero ¿y qué? Simplemente, le encantan esas costosas ropas de brocado, seda y encaje, le encanta esa caja de maquillaje llena de todo tipo de joyas y piedras preciosas envidiables, y le gusta todo tipo de pasteles exóticos para saciar su apetito. Preferiría morir antes que vivir la dura vida de comer pan n***o, incluso sin tener nunca una buena comida, y no querría trabajar como un buey o un caballo todos los días, y ser golpeada y regañada por los hombres. Por estas razones, está dispuesta a renunciar al amor entre hombres y mujeres que las mujeres esperan, y nunca pide una relación duradera y sincera con un hombre. Ella está satisfecha mientras pueda vivir una vida próspera. ¿Se equivocó? Selena miró la figura borrosa en el espejo durante mucho tiempo. En ese momento, la luna estaba en el oeste y la suave brisa de la tarde le había secado el cabello. Se levantó lentamente y caminó hacia la dura cama, sus pasos eran ligeros pero firmes, y finalmente entendió que su idea había estado equivocada todo el tiempo. El error fue que no debía suplicar clemencia y depender de la caridad de los demás toda la vida. Una vida así no duraría mucho, por lo que en esta vida quería depender de sí misma y en sus propios esfuerzos para vivir la vida próspera que desea. De repente, Selena pensó en Lucio y detuvo su paso. Lucio era solo una sombra en su vago recuerdo. La razón por la que lo recordó fue por los ojos enojados de Lucio cuando se dio la vuelta y se fue después de haber sido insultado por sus palabras. Sus ojos eran realmente oscuros y aterradores. Unos años más tarde, parecía haberlo visto de nuevo en la Mansión del Conde, pero para entonces ya ocupaba una posición alta, e incluso el Conde lo trataba con cortesía. Cuando Lucio la miró en ese momento, solo había indiferencia en sus ojos, y ahora que lo piensa, Selena todavía siente un poco de miedo. Ahora que ha renacido, es una pena que ya haya insultado a Lucio. Lo que pasó ya pasó y vuelve a ser irreversible. Sin embargo, cuando lo pienso, los dos solo se encontraron unas pocas veces en la última vida, por lo que no hay necesidad de tomar este asunto en corazón. Si se encontraran, simplemente lo evitaría. Pensando que habían pasado muchos años, Lucio debería haberla olvidado. Selena se sintió aliviada de inmediato, luego se acostó en la sencilla cama de madera y se quedó dormida lentamente.